Redacción El País
Una de las novelas del mercado de pases fue el futuro de Washington Aguerre en Peñarol, que mientras negociaba su continuidad su nombre sonaba en distintos mercados de Sudamérica.

Uno de ellos fue el ecuatoriano, porque cuando se confirmó que el arquero no seguiría en filas aurinegras, su primera alternativa era el Barcelona de Guayaquil. Pero finalmente ese destino tampoco prosperó y en las últimas horas el club contrató a otro golero, también uruguayo.

Se trata de Ignacio De Arruabarrena, golero uruguayo de 28 años que tras una larga carrera en el arco de Montevideo Wanderers —club que lo formó—, emigró en julio del 2022 al fútbol europeo para jugar en el Arouca de Portugal.

El último semestre del pasado 2024 defendió al Al-Wehda de Arabia Saudita, donde jugó apenas dos partidos y últimamente ni siquiera estaba siendo convocado, motivo que lo llevó a rescindir su contrato y buscar nuevos horizontes. Así es que el arquero llega en este período de pases para incorporarse al club "oro y grana" de Ecuador.

Barcelona estaba en busca de un arquero luego de la partido del argentino Javier Burrai, de 34 años, que tras cuatro temporadas defendiendo la valla del club vuelve a jugar en su país.

Lo llamativo de la incorporación de De Arruabarrena, es que horas antes el club también fichó al arquero venezolano José David Contreras, ficha que le quita un cupo de extranjero al igual que la del uruguayo.

Foto: Arouca.

Tanto Barcelona de Guayaquil como Newell's Old Boys de Rosario fueron los dos equipos que sonaron más fuerte como destino del exarquero de Peñarol, Washington Aguerre. Sin embargo, el primero contrató a los dos mencionados y el segundo, argentino, revolucionó el mercado con la incorporación del costarricense Keylor Navas, multicampeón de la UEFA Champions League con el Real Madrid.

A pesar de que en las últimas horas el Consejo Directivo de Peñarol debatió si ir de nuevo por Aguerre o no, sobre todo luego de la derrota clásica del pasado lunes, determinaron que no era coherente luego de la contratación del arquero Martín Camapaña, presentado días atrás.

Desde Peñarol habían puesto sobre la mesa un vínculo contractual por tres años y, de acuerdo a lo expresado públicamente por dirigentes, duplicar el sueldo que tenía anteriormente. Sin embargo, ninguna de las ofertas enviadas durante los primeros días de enero colmaron las expectativas del arquero ni su representante, Rafael Monge.