Redacción El País
Una reunión de urgencia convocada por el ministro del Interior, Nicolás Martinelli, surtió efecto en la tarde de este lunes en la sede de la cartera, con la presencia de autoridades de Nacional y de Peñarol, quienes tomaron partido sobre el clásico del 24 de marzo. El intercambio comenzó sobre las 15:00 horas y finalizó poco más de una hora después.

En representación de los tricolores, asistió el presidente Alejandro Balbi y el contador Gonzalo Lucas, actual vicepresidente del club. En tanto, por el lado aurinegro, los participantes fueron Ignacio Ruglio y el vice Eduardo Zaidenzstat. Además, también estuvieron el subsecretario del ministerio, Pablo Abdala; el jefe del Estado Mayor, Richard Cabral, y Álvaro García como representante de Seguridad en el Deporte.

La cita tuvo como motivo principal tratar los temas relacionados al clásico del fútbol uruguayo que está fijado para el domingo 24 de marzo. Los clubes diferían en sus visiones y fue por eso que el ministro Martinelli pretendía actuar como mediador para resolver si se otorgaban (o no) 2.000 entradas para los hinchas visitantes.

Foto: Leo Mainé.

La posición de Ruglio era que se le debían proporcionar esas localidades a Nacional y de esa manera se lo transmitió a Balbi en un encuentro que mantuvieron en Punta del Este el pasado 23 de febrero. El abogado, en tanto, era partidario de jugar sin visitantes o, de lo contrario, fijar el Estadio Centenario para el partido.

El Ministerio del Interior consideró este lunes que el lugar "más adecuado" para jugar el partido clásico es el Estadio Centenario, según anunciaron las autoridades en conferencia de prensa. Sin embargo, la decisión final quedó en manos de Peñarol, que es quien tiene el derecho de elegir la localía en este caso.

Los aurinegros resolvieron que el encuentro se juegue en el Campeón del Siglo, por lo que finalmente será sin la presencia del público tricolor. Interior adaptará su operativo a estas condiciones.

Del intercambio también surgió la creación de una Comisión de Trabajo que acogerá las diferentes problemáticas relacionadas a los espectáculos deportivos, con aportes de los clubes y de la dirección de Violencia en el Deporte. El organismo tendrá como cometido una primera puesta a punto una semana después del clásico e integrará al Ministerio del Interior, los presidentes Ruglio y Balbi y al de AUF, Ignacio Alonso.

"Está la posibilidad de crear una Fiscalía especializada de Violencia en el Deporte. Es una sugerencia que recogemos", dijo Martinelli.