TORNEO INTERMEDIO
El aurinegro perdió otra vez en el Campeón del Siglo, le empieza a decir adiós al Torneo Intermedio y se aleja cada vez más de Nacional en la Tabla Anual.
Sin respuesta. Así quedó Peñarol en su casa. El mirasol volvió a perder y sumó su tercera caída consecutiva en el Estadio Campeón del Siglo por el Campeonato Uruguayo tras el 1-0 con Liverpool en la tercera fecha del Torneo Intermedio.
Pero muchas cosas pasaron en una noche fría en la que el carbonero, luego de cinco minutos de imprecisiones, mejoró y se adueñó del trámite.
Y lo hizo con el juego que no había mostrado en encuentros anteriores: desbordes por las bandas y llegadas al área.
Con el 1-4-3-3 Peñarol tuvo una buena media hora en la que además de ser superior y generar chances en la ofensiva, mantuvo a Liverpool alejado del arco de Kevin Dawson.
Con Ignacio Laquintana por derecha y Nicolás Rossi por izquierda más los volantes Agustín Álvarez Wallace, Damián Musto y Walter Gargano involucrados en la generación, el aurinegro tuvo sus chances, pero Ruben Bentancourt no tuvo una buena noche y las dos oportunidades que tuvo, las desperdició.
Pero pasada la media hora de juego en el Campeón del Siglo el viento futbolístico cambió y el negriazul creció tras la salida por lesión de Ramón Arias.
Fue ahí donde Kevin Dawson empezó a transformarse en la gran figura del encuentro porque tuvo tres intervenciones vitales en las que la visita pudo ponerse en ventaja.
La primera parte se fue sin goles y con un partido que podía volverse de ida y vuelta por lo mostrado por los dos equipos. Y así fue porque crecieron las chances, pero sobre todo para Liverpool.
Peñarol bajó la intensidad. Gargano no estuvo fino y la mitad de la cancha empezó a fallar demasiado. Mauricio Larriera apostó a los cambios, pero no hubo una mejora en el juego carbonero.
Sumado a eso, Gonzalo Carneiro se estaba volviendo imparable para la zaga mirasol y Liverpool aprovechó eso porque luego de varias jugadas en las que la visita buscó el pase filtrado para el delantero, llegó el gol.
Fue a los 83 minutos, cuando Carneiro recibió ese pase a espaldas de los defensores, pisó el área y remató obligando a otra gran intervención de Dawson pero en el rebote Pablo González la mandó a guardar para poner el 1-0.
Golpe al mentón para un Peñarol que no tuvo respuestas. El mirasol no inquietó más al negriazul, no pudo hilvanar más juego ofensivo y lo terminó pagando muy caro.
Liverpool, que venía de dos sin ganar, se recuperó y volvió al triunfo para llevarse su primera victoria en la historia del Campeón del Siglo.
Peñarol por su parte, volvió a ser preso de sus errores, sumó la tercera caída consecutiva como local, le empieza a decir adiós al Intermedio y se complica en la Anual: quedó a ocho puntos de Nacional.