Es cierto que hasta el momento Peñarol abrochó la llegada de 13 jugadores y seguramente venga alguno más, pero también es verdad que muchas negociaciones (13) se cayeron cuando menos se esperaba, tal como pasó con el marfileño Aké Loba.

Y si bien también es real que se fueron del club 19 futbolistas entre préstamos y contratos finalizados y ventas o sesiones a otros equipos, el actual período de pases le viene siendo muy esquivo al carbonero.

Es que para empezar, el club todavía no sacudió el mercado y si bien contrató a algunos jugadores interesantes como Byron Castillo y Leonardo Fernández, y logró el regreso de Gastón Ramírez, hasta ahora no logró la llegada de un Clase A que mueva la estantería.

Y en eso está trabajando el presidente Ignacio Ruglio, quien por estas horas sigue en Europa tratando de convencer a Maximiliano Gómez —algo que parece poco probable— pero también barajando otras opciones.

De todas maneras y si de centrodelanteros se habla, el caso de Maximiliano Romero fue el primero que desencadenó las críticas en Peñarol. El argentino de 25 años no iba a ser tenido en cuenta en Racing de Avellaneda y desde Peñarol tenían todo acordado —préstamo, salario y condiciones— con La Academia, el jugador y su representante, pero el día que tenía que viajar a Montevideo, terminó firmando en Argentinos Juniors.

Foto: Leonardo Mainé.

El asunto no quedó ahí y el período de pases tenía otra mala noticia para el mirasol. Cristian Lema —zaguero argentino de 33 años— fue otro de los apuntados por el club, pero Boca lo quiso, aceleró, pagó una cláusula a Lanús y se quedó con el futbolista.

Otro de los casos que sorprendió fue el de Romario Ibarra, el atacante ecuatoriano de 29 años perteneciente al Grupo Pachuca.

Todo hacía indicar que el mundialista en Qatar 2022 con su selección iba a viajar a Uruguay, pero el tema se enfrió y el jugador optó por irse a Independiente del Valle para jugar junto a su hermano Renato.

Más particular fue el caso de Luis Mejía. El golero panameño de 32 años estaba en la mira del aurinegro, pero el club nunca llegó a un acuerdo con el jugador y Manotas concretó su arribo a Nacional, donde ya se ganó la titularidad.

Foto: Estefanía Leal.

Reforzar la defensa se volvió algo imperioso en Peñarol, sobre todo luego de las pobres actuaciones en los partidos de pretemporada.

Lo cierto es que el mercado también le fue esquivo con algunos nombres como por ejemplo, Maximiliano Falcón (26 años), quien por temas económicos no llegó al mirasol y optó por seguir en Colo Colo, Joaquín Varela (25), defensor que el aurinegro quiso pero que terminó arreglando en Águilas Doradas de Colombia, y Matías de los Santos (31), quien fue anunciado hasta por el propio Diego Aguirre, pero que finalmente en la noche del jueves llegó a un arreglo con Liverpool.

Finalmente, el club contrató a Martín Gianoli y a Guzmán Rodríguez, pero por este último la negociación tardó más de la cuenta.

Foto: @OficialCAP.

El tema del “9” sigue siendo una prioridad en Peñarol, pero también un gran problema. El club perdió a verdaderos goleadores como Matías Arezo y Abel Hernández, trajo a Maximiliano Silvera y tiene a José Neris, pero sabe que necesita un Clase A que todavía no encontró.

Al caso de Romero, se le suman la fallida contratación del argentino Lucas Di Yorio (27 años), quien pasó al Athletico Paranaense desde el Grupo Pachuca, y Felipe Avenatti (30), quien continuará en el Kortrijk de Bélgica tras no llegar a un acuerdo con el aurinegro.

Y como frutilla de la torta, cuando parecía que Aké Loba viajaba a Uruguay, el marfileño de 25 años que tenía un precontrato firmado con Peñarol, no lo cumplió y se hizo la revisión médica para llegar a Xolos de Tijuana, motivo por el que desde el club mirasol tomarán acciones legales ante la FIFA.

Foto: Mazatlán FC.

Luego de que Peñarol perdiera las finales del Campeonato Uruguayo 2023 a manos de Liverpool cayendo en el Estadio Campeón del Siglo y dejando una muy mala imagen deportiva, desde el club comenzaron a barajar nombres para reforzar al plantel en 2024.

Y en plena campaña electoral, el presidente Ignacio Ruglio dijo que ya había iniciado gestiones para concretar el regreso al club de Jonathan Rodríguez (América de México) y Guillermo Varela (Flamengo), y la contratación de Matías Abaldo (Gimnasia y Esgrima La Plata).

“Abaldo es un jugador que siempre nos gustó”, dijo en su momento el vicepresidente Eduardo Zaidensztat, quien acerca del Cabecita, enfatizó: “Los niveles de retribución que tiene en México son difíciles para competir. El amor que tiene por el club nos ilusiona porque nos dijo que ‘a Peñarol nunca se le dice que no’”.

Foto: Fluminense Prensa

Lo cierto es que hasta el momento, ninguno de los dos futbolistas llegó al club carbonero y difícilmente puedan arriba en este período de pases.

Otro anhelo del aurinegro en este mercado fue el regreso de David Terans. La buena relación que Ignacio Ruglio entabló con el Grupo Pachuca —quien adquirió al Rey a mediados de 2023— hacían pensar en que el jugador podría retornar a la institución en la que tuvo un desnivelante pasaje, pero eso no ocurrió y el atacante de 29 años fue transferido al Fluminense —vigente campeón de la Copa Libertadores— y además, de momento no tiene pensado jugar en Uruguay.