ENTREVISTA

JUAN PABLO ROMERO

-¿Habitualmente se trabaja el tema de la depresión entre los futbolistas o solamente cuando surge algún tema puntual?

-En el contexto actual empieza a haber una mayor visibilidad sobre estas cuestiones. En general, hay más conciencia sobre la importancia que tienen en el bienestar de los deportistas y por defecto su rendimiento. En este sentido, hay mayor sensibilidad y receptividad frente a las mismas. Por ejemplo, en mi trabajo con juveniles, se procura abrir espacios de conversación grupal e individual para abordar distintos asuntos. Esto podría ser un primer recurso para detectar problemáticas y desarrollar estrategias para los casos que ameritan. Por otra parte, si bien esta situación ha ido mejorando, aún queda mucho camino por recorrer, y el fútbol no escapa a la realidad de la sociedad ante esta problemática. Más aún en un ámbito en el que muchas veces se exacerba la competitividad, existe un alto grado de exposición y presiones.

-Por tu experiencia, ¿qué factores suelen incidir en la depresión de un jugador de fútbol?

-El futbolista está expuesto a padecer este tipo de trastornos como cualquier otro individuo. El ambiente del fútbol puede ser muchas veces hostil, y se ponen en juego diversos factores que pueden generar circunstancias difíciles de tramitar para el deportista. A las situaciones personales que pueden enfrentar (como el desarraigo de su círculo íntimo), se le agregan presiones internas (del propio futbolista) y externas (del entorno), cumplimiento de expectativas, intereses económicos, un alto grado de exposición (sobre todo en la alta competencia), etc. Hoy en día, los futbolistas transitan estas situaciones de gran demanda desde muy jóvenes; lo que evidencia la necesidad del acompañamiento como forma de brindar herramientas para ayudarlos a sobrellevar las posibles dificultades que su rol conlleva.

-¿Cuánto incide en el estado de ánimo de un futbolista las repercusiones de su actuación en las redes sociales?

-Es muy relativo a la persona y a la situación puntual que se analice. Es una realidad que el futbolista desarrolla un rol con un alto grado de exposición, y que en los tiempos que corren, su imagen es de sus mayores capitales. Las redes sociales juegan un rol importante, y es por eso que se hace imprescindible desde formativas brindar ayudas para manejar estos aspectos. Es así por ejemplo, que se hace necesario ayudarlos a poner en perspectiva y aprender a regular los comentarios que leen (relativizar tanto los positivos como los negativos), o el tipo de contenido que hacen públicos, y el alcance o efecto de los mismos.

-El suicidio del “Morro” a causa de una depresión, y el hostigamiento en redes que hubo en la semana a Denis Olivera, ¿qué reflexión te genera?

-Aunque obviamente hay enormes diferencias entre un hecho y el otro, y que desconozco los casos en profundidad, no queda duda que la exposición y presiones que un futbolista vive es un tema que urge atender. La salud mental es tan importante como la física, y es necesario el compromiso de todos los implicados para asegurar el bienestar de nuestros deportistas, humanizando su figura. La sociedad en su conjunto tiene la obligación de alinearse con este objetivo, por lo que visibilizar y concientizar, dejando de lado tabúes y educando sobre estas cuestiones, se hace imperioso.