Redacción El País
Aston Villa viajó a Bélgica para enfrentar al Brujas por la cuarta fecha de la Champions League. El equipo de la Premier llegaba como uno de los líderes, con puntaje perfecto y además con el arco en cero en los tres partidos que había disputado hasta el momento. Pero se invicto se quebró de la peor manera.

El Villa venía sosteniendo el arco en cero gracias a muy buenas intervenciones del arquero de la selección de Argentina, sobre todo en el primer tiempo, pero en el complemento ocurrió algo inesperado.

Entre Emiliano Martínez y su defensor Tyrone Mings no se entendieron y tuvo lugar uno de los bloopers más grandes en la historia del torneo más importante de clubes de Europa.

El equipo de Birmingham tenía un saque de arco a favor y Dibu tocó en corto para su defensor dentro del área pero éste no estaba muy atento a lo que estaba ocurriendo, tomó la pelota con las manos y se dispuso a hacer él el saque de arco, pero la reanudación ya estaba hecha y el árbitro, en buena ley, cobró mano dentro del área y penal para el equipo local que cambió por gol.

Foto: AFP

Jugaban Independiente y Colón de Santa Fe en el estadio Libertadores de América cuando el arquero del Sabalero y uno de sus centrales no se entendieron de la mejora manera.

Ignacio Chicco tocó en corto en un saque de arco para Paolo Goltz pero el defensor no se percató de que esa había sido la reanudación del juego y tomó la pelota con las manos para hacerse cargo él mismo de reponer el juego. Enseguida los jugadores del Rojo fueron arriba del árbitro a protestar ya que este no se había dado cuenta de lo sucedido en primera instancia.