LALIGA

Real Madrid y Barcelona se enfrentaron en uno de los clásicos más apasionantes de las últimas temporadas, por lo que pintaba en la previa y por lo que se vio dentro del campo en el triunfo por 2-1 del conjunto merengue en un choque por  la Liga que además tuvo el atractivo de dos presencias celestes: Federico Valverde y Ronald Araújo.

Barcelona comenzó mejor el clásico. Lionel Messi comandaba los ataques y de hecho en una conexión con Jordi Alba generó la primera clara del encuentro, que fue para los culés. El centro del lateral tenía destino de Ousmane Dembelé dentro del área chica, pero justo cortó el belga Thibaut Courtois.

Aunque poco a poco, Real Madrid comenzó a adueñarse de la pelota y empezó a hacerlo ganando el duelo en la mitad de cancha y desde ahí nació el gol que puso la ventaja para el merengue a los 14'.

Federico Valverde tomó la pelota en su campo y empezó a correr, cruzó la mitad de la cancha, se sacó un rival de encima y jugó para Lucas Vázquez, este lanzó un centro rastrero y Karim Benzema definió, de taco, para poner el primer tanto del juego.

A partir de ahí, los dirigidos por Zinedine Zidane se adueñaron de la pelota, del control de la misma y también de las acciones más claras de gol, pero el segundo gol llegó casi por fortuna.

Una infracción de Ronald Araújo sobre Vinicius, en la que recibió amarilla, derivó en un tiro libre al borde del área donde Toni Kroos se hizo cargo del remate y terminó encontrando el gol con algo de suerte. El disparo rebotó en Sergiño Dest y luego Jordi Alba no pudo despejarla en la línea venciendo a Ter Stegen.

La distancia ya era de dos goles, pero estuvo a punto de ser de tres luego de que en un contragolpe Vinicius habilitara a Federico Valverde. El "Pajarito" remató cruzado dentro del área y la pelota dio en el palo.

La reacción de Barcelona fue muy poca y lo más cercano al descuento fue un tiro de esquina cerrado de Lionel Messi que superó a Courtois, pero terminó pegando en el palo.

El segundo tiempo fue muy distinto a la primera parte, sobre todo porque Barcelona salió con otro ímpetu obligado también por el 0-2 con el que salió a jugar el complemento en el estadio Alfredo Di Stéfano.

Con Valverde y Araújo todavía en el campo de juego, las chances se fueron replicando de un lado y del otro y la primera clara fue para los culés por intermedio de una asistencia de Frenkie de Jong que dejó cara a cara a Antoine Griezmann, pero la definición del francés se fue apenas afuera contra el vertical derecho de Courtois.

A los 59’, el incremento de la presión de Barcelona dio sus frutos porque un centro de Jordi Alba derivó en un disparo poco ortodoxo pero efectivo con de Óscar Mingueza que venció a Thibaut Courtois para el descuento.

Un minuto más tarde, Zidane tomó la decisión de sacar a Federico Valverde y poner en su lugar a Marco Asensio, en parte, por la inactividad con la que llegaba a este encuentro el “Pajarito” tras recuperarse de su lesión.

Barcelona, tras el gol, se fue arriba en busca del empate y eso lo llevó a dejar espacios en el fondo que no fueron bien aprovechado por Real Madrid o que fueron bien evitados por el propio equipo blaugrana como sucedió a los 65’ donde Vinicius habilitó a Benzema, pero Ronald Araújo, en un gran esfuerzo físico, cortó cuando el francés ya se aprontaba para definir.

La búsqueda de la igualdad también llevó a que Koeman hiciera variantes pensando en el ataque y por eso salió el propio zaguero riverense y le dejó su lugar al joven Ilaix Moriba, previo a que Real Madrid quede con 10 hombres por la expulsión de Casemiro.

Real Madrid aguantó bien, Barcelona se quedó sin energía y sin ideas y de esta manera el elenco “merengue” se quedó con el clásico y por ende alcanzó al Atlético de Madrid en lo más alto de la tabla, pese a que su rival de ciudad tiene un partido menos.