Redacción El País
Faltaban pocos minutos para que el plantel de Peñarol apareciera en el campo de juego del Estadio Centenario y las primeras bengalas empezaron a aparecer en la Tribunas Olímpica y Ámsterdam. Aquellos que no tenían una encendían los flashes de sus celulares para, de alguna manera, acompañar.

Es que el hincha de Peñarol acompañó y en gran número a los jugadores que desde el primer minutos salieron a buscar un gol que lo pusiera en ventaja en el partido de vuelta de una serie muy cuesta arriba.

Con ese objetivo es que una vez más los hinchas mirasoles hicieron un show de fuegos artificiales que, acompañados de cánticos, le dio un interesante marco al ingreso de ambos planteles para la disputa del encuentro.

Las bengalas fueron pasando a bombas de estruendo y de luces que atravesaron el cielo del Parque Batlle, mientras que desde las gargantas de los más de 35.000 hinchas que llegaron al Estadio Centenario nacía el aliento a los de Diego Aguirre que tanta ilusión generaron en la competencia internacional.

Foto: Ignacio Sánchez.

Algo similar a lo que había ocurrido en la serie de los cuartos de final frente a Flamengo que, de todas maneras, tuvo sus consecuencias desde el aspecto económico por las sanciones de Conmebol.

En aquella ocasión, Peñarol sufrió una multa que rondó los US$ 200.000 y solamente US$ 90.000 fue por violar los artículos 11.2 M y 12.2 C. La primera y principal multa fue por "ser el causante del retraso en el inicio del partido, encender bengalas, fuegos artificiales o cualquier otro tipo de objeto pirotécnico".

Foto: Ignacio Sánchez.

Cabe destacar que Conmebol no le exige a los clubes pagar la multa, sino que la misma se debita automáticamente del importe que debiera recibir cada club los en concepto de derechos de Televisión o Patrocinio, de parte del propio organismo.