Redacción El País
Peñarol mantuvo este lunes una reunión con el Colegio de Árbitros que había quedado pactada después del cruce del aurinegro ante Liverpool por la undécima fecha del Torneo Apertura. Aquel viernes 3 de mayo igualaron 2-2 en Belvedere y en la visita terminaron molestos por entender que un gol anulado a Maxi Silvera había sido lícito.
Corrían 78 minutos de juego y el negriazul se imponía 2-1, pero tras un cabezazo inicial de Leo Sequeira apareció el "9" de Peñarol en el segundo palo para colocar el empate parcial. Sin embargo, el línea Sebastián Schroeder levantó la bandera de inmediato y lo anuló. Luego llegó la revisión del VAR que ratificó la decisión primaria.
Finalmente, en el último minuto del partido, terminó llegando el 2-2 definitivo de Silvera que evitó que el mirasol perdiera el invicto en el Torneo Apertura.
Una vez finalizado el partido, Diego Aguirre se mostró molesto por el gol anulado: “El gol anulado me dicen que es un escándalo, que fue claro gol y no existe ninguna posibilidad de que haya sido fuera de juego. Sería muy triste y lamentable”, afirmó minutos después de que finalizó el compromiso.
Desde aquel partido Peñarol tenía el deseo de reunirse de forma "urgente" con el Colegio de Ábitros para charlar cordialmente sobre el arbitraje en el fútbol uruguayo, debatir aspectos a favor y en contra y ponerse a disposición en lo que puedan colaborar. Así lo habían dejado de manifiesto en el comunicado que emitieron en su momento, y finalmente esa instancia de intercambio ocurrió este lunes.
Julio Trostchansky, delegado de Peñarol, quien estuvo presente en la reunión con los jueces, reveló algunas de las jugadas que se repasaron durante el encuentro: "Ayer repasamos muchas de las jugadas, no solo la jugada de Liverpool, sino repasamos otras que se modificaron por decisiones del VAR tanto a favor como en contra. O sea, no solo repasamos aquellas que considerábamos que nos perjudicaban sino también aquellas que de alguna manera decidían a nuestra favor. El hecho más reciente es el último partido con Wanderers, que el VAR en sí nos termina dando un penal que si bien después fue claro había pasado desapercibido por lo menos para la mayoría dentro de la cancha".
Luego puntualizó en los comentarios que recibieron acerca de la discutida jugada en el Liverpool vs. Peñarol: "Recorrimos muchas jugadas y en la de Liverpool se termina yendo por el camino de la regla pura en sí mismo, es decir, si hay cinco centímetros de adelantamiento en la regla la actual está claro que es offside, y entiendo que los jueces deben hacerlo así. En ese sentido, mostrándonos las jugadas, cómo era el trazado de líneas y cómo se realizaba finalmente la decisión sobre la posibilidad de un offside o no, termina mostrándose que hay un adelantamiento mínimo de 12 centímetros respecto al penúltimo jugador de Liverpool".
Trostchansky también comentó que hubo algunos planteos específicos del aurinegro "sobre la certeza inmediata que tuvo en línea en ese partido, que después igualmente se vio corroborada por el VAR, pero advertimos que había una certeza tal que en una jugada muy fina nos llamaba la atención".
Otra perspectiva de la charla estuvo enfocada en "cómo mejorar la confiabilidad de las imágenes que perciben los espectadores". A entender de Trostchansky, esas imágenes "en términos de calidad no son las mismas imágenes que nosotros vemos en la televisión". Y en esta línea añadió: "Los distintos monitores que se tienen a nivel de la cabina del VAR impresiona por lo menos a partir de lo que vimos ayer que tienen una definición mejor que la que se le termina brindando al espectador en donde sólo se le marca dos líneas que terminan siendo las que desde el punto de vista fáctico terminan decidiendo si hay offside o no".
La gestión que prometió realizar Peñarol
Según manifestó Trostchansky, el objetivo que se trazó Peñarol al asistir a la reunión fue buscar "puntos en común" para crecer. El delegado mirasol puntualizó en aspectos concretos del fútbol uruguayo que cree que no colaboran con los árbitros para poder realizar una labor más eficaz. "A veces en algunas canchas las condiciones o disponibilidad técnica no es la mejor por tema de altura, por la calibración de las líneas, que terminan siendo un poco diferente de las líneas que están puestas dentro del campo de juego, y eso también termina induciendo a errores. Lo que discutimos fue cómo generar o cómo tratar de generar esa confianza desde el lado del espectador por esa sensación que hoy hay de que todos los fines de semana hay una jugada que no termina de ser clara para el espectador".
Peñarol comprendió el planteo que hubo de los árbitros en este sentido y también se comprometió a realizar una gestión concreta: "Hoy hay una situación en la cual los jueces, a diferencia del año pasado, no tienen el espacio para generar el 'entrenamiento de campo', como le llaman ellos, que es a nivel propiamente de un campo de juego donde se ejemplifican distintas jugadas y se valoran esas jugadas mediante la utilización del VAR, y con eso el juez y el línea toman contacto con situaciones que se pueden generar durante los distintos partidos. Peñarol ofreció realizar las gestiones para ver si se podía disponer del Estadio Charrúa para que los jueces dispusieran de un campo de juego para poder entrena. Nosotros tenemos vinculación con lo que es el Estadio Charrúa a través de nuestras participaciones en el rugby y se van a hacer las gestiones para ver si conseguimos eso".