CAMPEONATO URUGUAYO
De ser el equipo que recibió más goles al menos goleado, de finalizar el Apertura penúltimo a estar peleando el trofeo. El Gaucho enfrenta las presiones de una final, pero tiene quien lo resguarde.
Ocho vallas invictas suma Progreso luego de dejar su arco en cero ante Rentistas en el duelo por la fecha número 13 del Torneo Clausura. Con ello es el equipo que menos goles ha recibido (6) cuando en el Apertura fueron el más goleado (26). La respuesta posiblemente esté en que el Gaucho ha dado un giro de 180 grados de un torneo al otro y, aunque peligra en el descenso, va a por el trofeo. Parte de la posibilidad de soñar con la consagración se la ha dado Rodrigo Formento, el guardián del arco, porque de no ser por él (sin desmerecer la ayuda de sus compañeros) muchos puntos habrían quedado por el camino.
¿Qué cambió en elenco de la Teja entre un torneo y otro? Formento lo tiene claro: ”Principalmente se dio el cambio de cuerpo técnico, no quiere decir que un cuerpo técnico trabaja mejor o peor que otro, sino que muchas veces el cambio de aire, las nuevas ideas y propuestas motivan y hace que el jugador empiece a encontrar su funcionamiento y se sienta bien. A medida que fueron pasando los partidos y el equipo se sintió mejor fue agarrando confianza que era lo que estaba faltando en la Apertura. Lo que priorizó Álvaro Fuerte en su llegada fue transmitir un poco de tranquilidad y confianza por lo que había sido la primera parte del año. Confiaba plenamente en nosotros y pudimos responder bien en cancha”.
De esto se debe aferrar Progreso para los dos objetivos que tiene en mente, pero uno es impostergable. “Tenemos que ser conscientes de la situación en la que estamos y cuál es el objetivo principal nuestro. Estar peleando el Clausura lo vemos como una oportunidad y hasta que tengamos chances vamos a dar pelea”, sostiene Rodrigo, pero por otro lado agrega: “Nosotros sabíamos que teníamos que estar arriba en el campeonato para quedarnos en Primera”, meta que el triunfo de Boston River sobre Plaza les empaña, al menos por el momento.
Para este último objetivo dependen de sí mismos: están terceros junto a Nacional, a cuatro unidades del líder, Peñarol, con quien se miden el jueves, por lo cual, de llevarse los puntos, Progreso quedaría a uno solo a falta de una fecha y podría seguir peleando. Esto genera mucha presión que se vuelve difícil de gestionar, pero para eso el club realiza charlas y se sirve de sus psicólogos deportivos. Pese a ella, el arquero vive un muy buen momento y ha sido determinante tapando pelotas muy importantes en varios juegos.
“Feliz de haber podido revertir un poco la imagen del Apertura, que no había sido mi mejor campeonato. Es un trabajo colectivo, todo el equipo se está sacrificando un montón, desde el primer delantero que defiende hasta llegar a mí y también los que están afuera del plantel haciendo un aporte muy importante. El nivel de competencia que tenemos entre los cuatro arqueros es muy grande también y eso eleva el nivel. Esperemos conseguir los objetivos grupales que son los nos van a llevar a los personales”, expresó.
Rodrigo sueña con lograr su primer salida al fútbol internacional, pero ahora su mente está enfocada en el torneo y, sobre todo, en el partido del jueves 16:30 en el Parque Capurro, que cambió de escenario debido a que Paladino no fue modificado para mejorar su capacidad locativa.
Con fechas entre semana no hay mucho tiempo para bajar la pelota, pero Rodrigo sostiene que ya preparan el partido para “afrontarlo como una final”, mientras recolectan información para que no haya sorpresas. “Hay que ganar, seguir siendo un equipo duro, solidario, que revierte situaciones complicadas y lucha contra la adversidad”, dijo.
El triunfo los dejaría bien posicionados respecto al descenso y a una fecha del trofeo donde se medirán ante Torque. Más allá de depender de sus resultados, también deberán prestar atención a Cerro Largo, equipo al que aún le resta jugar con Torque y Villa Española, y Nacional, que disputa las últimas dos fechas ante Liverpool y River Plate.