Redacción El País
Este martes Peñarol arribó a Río de Janeiro de cara al gran encuentro que tendrá este miércoles frente a Botafogo, desde la hora 21:30, (ESPN y Disney+) por la ida de las semifinales de la Copa Libertadores en el Estadio Olímpico Nilton Santos. La delegación mirasol estuvo acompañada por un ídolo de la casa, Mario Saralegui.

"Estoy en una situación especial. Soy hincha y no soy entrenador ni jugador y eso me tenía preocupado", sostuvo Saralegui en dialogo con #Minuto1 (Carve Deportiva).

Además, añadió el entrenador: "En determinado momento me puse a dudar, pero mi mujer me dijo que tenía que ir porque me estaban invitando".

Saralegui tuvo un párrafo aparte con el trato que recibió por el presidente de la institución carbonera en los últimos días. "Tengo que ser agradecido y me voy con una imagen bárbara. Ruglio es así y estoy sorprendido por la actitud de invitarme. Está a otro nivel, lo está haciendo bien y el hombre está luchando", esgrimió.

A su vez, recordó las charlas que mantuvo con algunos amigos por la invitación del presidente de Peñarol. "Me decían que sí voy a ir iba a 'alcahuetear'; no voy hacer eso porque vengo para estar con Peñarol", remarcó.

Foto: Estefanía Leal.

El oriundo de Artigas ha sido muy crítico a lo largo de estos cuatro años de la gestión de Ruglio. Previo al juego de ida contra Flamengo por los cuartos de final de la Copa Libertadores, Saralegui disparó contra el actual presidente mirasol por no haberlo invitado para acudir al Maracaná como lo hizo con Jair Gonçalves.

Saralegui enfatizó sobre la oportunidad de haberle hecho un homenaje a los campeones de América y del Mundo en 1982 con Peñarol: "De repente con un poquito de creatividad se podría haber hecho un lindo homenaje, oportunidades perdidas y la sensación constante que les importa un carajo el club y eso a nosotros que nos rompimos el alma para hacerlo grande nos cae muy mal, causa mucha frustración, y mucho asco".

Y finalmente apuntó directamente contra Ruglio: "Y nos invitaron a comer un asado eso si rompe récords, tenes la cara de piedra de ir a un asado que lo paga otro y no llevas entrada nada, es ridículo es Rugliano, falta de respeto, falta de capacidad, soberbia tremenda, hago una lista con tres amigos y te gano la elección".

Foto: Nicolás Pereyra.

La iniciativa rápidamente fue vista de forma positiva, pero debía pasar por la aprobación de Conmebol. Se trataba de un homenaje y de uno muy especial porque era para el plantel de Peñarol que fue campeón de América y del Mundo en 1982.

“Se venía trabajando en esto desde que se confirmó que íbamos a jugar contra Flamengo”, le confesó el delegado de Peñarol Julio Trostchansky a Ovación.

“Dejamos que pasara el partido en Río de Janeiro y a través de distintos contactos fuimos invitando a muchos de los integrantes de aquel plantel campeón de América y del Mundo en 1982”, añadió. Además, comentó quiénes fueron invitados y ya confirmaron su asistencia: “Venancio Ramos, Walkir Silva, Nelson Gutiérrez, Jair Gonçalves —quien también estuvo en el Maracaná—, el Indio Olivera y Mario Saralegui”.

“La idea era homenajearlos porque son los últimos campeones del mundo con Peñarol y también tuvieron la fortuna o la gloria de haberle ganado al Flamengo en el Maracaná por 1-0”, indicó Trostchansky.

Lo cierto es que a falta de una hora para el inicio del partido, buena parte del plantel que consiguió dichas consagraciones para Peñarol pisó el césped del Campeón del Siglo y recibió los aplausos y el cariño de los fanáticos aurinegros.

Durante varios minutos estuvieron en el campo de juego, se juntaron en el centro del campo y luego se tomaron fotografías con la hinchas de Peñarol de fondo viviendo un momento muy especial.