Redacción El País
Se acerca una nueva doble fecha de Eliminatorias rumbo al Mundial 2026 y en el marco de esos partidos Marcelo Bielsa, entrenador de Uruguay, brinda una conferencia de prensa en la Sala Arq. Juan Scasso del Museo del Fútbol en el Estadio Centenario.

Cabe recordar que la Celeste se apronta para disputar los partidos ante Perú y Ecuador que se jugarán el próximo 10 de octubre (22:30) en Lima y el 15 del mismo mes (20:30) en el Estadio Centenario.

Los dirigidos por el rosarino se encuentran en la tercera posición de la tabla al sumar 15 puntos en ocho juegos producto de cuatro victorias, tres empates y una sola derrota. Se ubica por detrás de Colombia (16) y de Argentina (18) que son escolta y líder de la clasificación.

¿Cómo es el relacionamiento con el plantel?

Me extraña la pregunta. Normal. ¿Qué es normal en la relación de un DT con el plantel? Normal quiere decir que no hay ausencia de dificultades, que son propias de las relaciones humanas. Me parece a mí que vuelve el escenario normal que es cómo se resuelven las diferencias propias de las relaciones. Las resoluciones de las dificultades han sido satisfactorias. Si se refiere a algún caso puntual, me lo puede decir.

Por ejemplo: ¿Los casos de Agustín Canobbio y de Luciano Rodríguez, que explicó que estaba pasado de peso?

La mejor respuesta es la que le dé el jugador porque evita la mía. Por eso me inhibe un poco comentario, pero no hay ningún problema.

En relación al peso de un jugador, yo siempre le doy mucha importancia. Y le voy a decir el motivo. Cuando un jugador está en su mejor peso, hay deducciones que son inevitables y muy importantes. El jugador en peso, está entrenado, sino no está en peso. El que está entrenado y en peso es porque es buen profesional. El que está en peso tiene poca necesidad de resolver temas de ansiedad y demuestra que está tranquilo. Si está en peso está entusiasmado porque quien le reclama un peso ideal, está respondiendo. ¿Cuál es el peso ideal de un jugador? De mi opinión es el peso con el que el jugador transcurrió un tiempo prolongado con actuaciones satisfactorias. Cuando quiere saberlo, tengo una planilla donde veo el rendimiento físico, futbolístico y el peso. Si veo que tiene buen nivel en un mes, veo ese peso y le digo que en ese periodo de tiempo tuvo un buen rendimiento.

Foto: @Uruguay.

Yo le dije a Luciano: "Tu peso ideal yo lo verifiqué con vos cuando conviví contigo un tiempo prolongado en el preolímpico y tenías un peso diferente al actual. Pero cualquier diferencia que haya entre mi opinión y la tuya, es mejor la tuya porque no me quiero imponer sobre vos. Cualquier diferencia que haya entre mi opinión y la de tu club, es mejor la de tu club, quienes te pagan y administran tu preparación. Además que son los que te ven todos los días y yo te veo cada tanto. Si tenés dudas hacé lo que te parezca o lo que indique tu club, si yo te puedo ayudar, te lo comento. No te preocupes por obedecerme a mí: si yo te veo jugar bien, te convoco, y si no jugás como creo que podés, no te convoco.

Sobre Canobbio, pregúntele a él porque es una ofensa grande hacia mí y hacia él si ofició de alcanzapelotas. O pregúntele a cualquier convocado. No se como un afirmación tan despectiva simplemente se basa en un trascendido.

El rendimiento de Kike Olivera y las críticas en redes sociales.

Yo no sé sinceramente qué han opinado en las redes sociales sobre la realidad futbolística de Olivera. Para evaluar la opinión de alguien es necesario saber quién opina. Yo ignoro el funcionamiento de las redes sociales. Siempre estamos sujetos a que personas que se interesan por lo que hacemos nos califiquen y siempre las escuchamos, vemos el contenido y quién lo dice. Si es generalizado o son excepciones, vemos lo que nos permite ayudar a mejorar y lo que hay que descartar para que no nos afecte. Si él estaba afectado no lo vi, pero no tome en cuenta mi perspectiva. No vi a ninguno afectado y jugamos mal los dos partidos. Cada uno procesa eso de manera personal.

Foto: Darwin Borrelli.

Jugadores del medio local y presente de Peñarol en la Copa Libertadores.

Por supuesto que le doy valor a lo que sucede en el fútbol uruguayo, fundamentalmente porque son jugadores uruguayos y no es fácil destacar acá. Cuando un jugador destaca normalmente hay que prestar atención más allá de la dificultad. Es inevitable que lo producido en el partido de Peñarol contra Flamengo tenga que resaltarlo por la forma en que ganó, la importancia de la competencia, por la calidad del rival y muchos argumentos para que eso no pueda pasar desapercibido. Hay muchos jugadores en equipo menores que constantemente estoy tratando de valorar, sería muy injusto si no valorara lo que produce el fútbol uruguayo en su liga local porque hay muchos jugadores que se pueden alinear en el futuro a la selección mayor.

Análisis de los empates sin goles ante Paraguay y Venezuela.

Ninguno del los dos partidos jugamos bien. Contra Paraguay empatamos pudiendo haber ganado el partido, y con esto me refiero a los elementos que se evalúan para ver quién pudo tener un resultado mejor. Si bien Paraguay tuvo dos chances claras de gol, Uruguay tuvo un dominio más sostenido y similar cantidad de situaciones de gol. Tal vez no tan evidentes o tan claras como las de Paraguay. En un partido donde el empate fue justo, pudimos haberlo ganado.

Con Venezuela empatamos pudiendo haber perdido y es diferente. El empate con Paraguay fue un resultado para no discutir y si hubiéramos perdido con Venezuela tendríamos que haber aceptado que fue justo. En los dos partidos estábamos en condiciones de imponernos. Los primeros 10 minutos indicaron que si manteníamos ese nivel estábamos más cerca de ganar que de perder. No sucedió. Perdimos rápidamente la pelota en nuestro propio campo, no estuvimos efectivos en las situaciones de pelotas en contra. Recuperamos mucho pero no convertimos eso en un ataque o elaboración de juego.

¿Qué característica busca en los centrodelanteros sin Suárez ni Darwin?

Las Eliminatorias serían mucho más parejas si cada una de las selecciones jugara siempre con sus 11 mejores jugadores. Como eso no es posible, lo que marca el nivel y jerarquía es la segunda o tercera opción de cada puesto de acuerdo a como yo me he manejado. Está claro que Darwin (Núñez) tenía un rol protagónico Tengo muchísimas esperanzas en (Federico) Viñas, para mí es un jugador que tiene un futuro muy importante. Después está Luis Suárez que para nosotros, para mí, fue un aporte muy significativo. Su peso en la Copa América, aunque ustedes puedan relativizarlo, fue importante. Si éramos cuarto hubiera sido un fracaso, salir tercero no, si bien estaba por debajo de las expectativas. En el segundo tiempo con Canadá Luis tuvo una importancia capital para empatarlo y que después ganemos por penales. En ese partido que jugó, en el segundo tiempo tuvo rendimiento futbolístico muy importante. Convirtió y contagió unas ganas de jugar y un rendimiento físico muy importante y valorable. Todos sabemos lo que aporta.

Foto: Darwin Borrelli | El País

Me resulta muy fácil evaluar los ciclos de rendimiento entre una fecha FIFA y la otra, porque las evaluaciones que hacemos puedan reflejadas en una planilla que se ven los minutos en su club entre una fecha FIFA y otra, los goles, y analizamos la actuación de un jugador resumiendo sus intervenciones. Tenemos un código de calificación que nunca es solamente mi punto de vista porque le tengo desconfianza a lo que pienso, pero sí compartido con tres o cuatro personas más. Evaluación física y el peso que le doy mucha importancia. Recabamos el peso una vez por semana.

De la Copa América al partido con Paraguay, fue el mejor momento de Luis Suárez. Un rendimiento físico que nunca había visto tan alto en tanto partidos consecutivos. Al no estar Darwin, Viñas y Luis, tuve que busca otras opciones, a veces no son las que imaginan como las mejores. Olivera, desde mi opinión, que no es compartida con mucha gente, sobre todo por los periodistas y opinión pública, pero juega con regularidad y convierte en su equipo. La posición natural de Luciano es wing derecho y lo he utilizado como centroatacante en el preolímpico y algún otro partido. Todo jugador que es transferido vive una baja de rendimiento que se explica de muchas maneras. Tiene pocos minutos de competencia en su club y eso retarda la puesta a punto. También manejé la opción de Merentiel porque juega en un equipo importante y tiene vigencia. A cualquier selección del mundo le cuesta elegir cinco centroacantes de nivel y que Uruguay esté fuera de esa norma, no sé si es lo más justo.

El nivel de Nicolás Marichal y la falta de su ADN futbolístico en el equipo en los últimos cuatro partidos.

Estoy sobreevaluado porque llevo media hora explicando errores que se me asignan, por lo cual probablemente no sea lo suficientemente bueno como para poder rentabilizar los recursos humanos con lo que cuento.

Marichal sinceramente siempre lo consideré un zaguero central derecho o izquierdo. Juega en una liga muy importante de Europa. Es cierto que en su club ha jugado de lateral, pero su posición original es la de zaguero y me permito hacer un comentario que no lo define a él, sino una realidad. En un colectivo como el de jugadores uruguayos que tiene a Araujo, Giménez, Cáceres, Olivera, Piquerez, Viña... Tampoco sería justo ignorar que un jugador que se pone la camiseta de la selección mayor y tiene un rendimiento excelente inmediatamente. No pierdan de vista que Marichal no es titular y (Santiago) Bueno tampoco en sus clubes y eso no habla de sus cualidades o defectos, habla de que hay procesos de saltos en el nivel de exigencias que llevan adaptaciones. Necesitan proceso de estabilización en sus clubes para que luego eso se traduzca en que puedan mostrar las virtudes que sé que tienen en la selección. Si ese proceso por el que pasaron Giménez, Araujo, Olivera, Cáceres. Cáceres es un jugador que está nivel muy alto pero no fue inmediatamente titular en América y el partido que jugó contra Paraguay es de las mejores que recuerdo en un jugador en cualquier puesto desde que yo la dirijo.

Hay procesos que necesitan de pasos y a lo mejor los cuatro últimos partidos, tal vez no jugamos bien. Habría que ver quiénes juegan bien. Me duele que me lo diga, pero es cierto. Igual lo relativizo porque con Colombia no merecimos perder, con Canadá tampoco, con Paraguay tampoco y con Venezuela sí. Con Venezuela tuvimos 15 jugadores no disponibles, ahora eso no son justificaciones porque hace un año y medio que trabajo en la selección. Tengo muchísimas ilusiones con los jugadores que empezaron a jugar en la selección uruguaya, un grupo de jugadores que tiene pocos partidos, pero todos sabemos que no es sencillo jugar bien. Ignorar los procesos de acumulación de experiencia a nivel de selección mayor en partidos de Eliminatorias no es posible.

Una vez le pregunté a Eduardo Berizzo, a quien le tengo mucho respeto y admiración personal. Un día le digo: cuál es el problema más grande de dirigir a Argentina. Y él me dijo que cuando juega de visitante no pasa nada. Jugar de visitante con Argentina es sencillo, pero de Ezeiza a la cancha de River es como si te pusieran una piedra de 1000 kilos en los hombros. Refleja que jugar de local no es sencillo y tampoco lo es para jugadores que no suman partidos con la selección, y hay que darles un margen de confianza.

Foto: Darwin Borrelli | El País

¿Qué busca de un centrodelantero?

Yo cada vez me doy cuenta que sé menos de esta tarea a la que de dediqué mi vida.El contacto con Suárez fue muy enriquecedor porque al jugador se lo termina de conocer cuando se lo entrena. Hay gestos en un entrenamiento que se ven 50 veces y para verlo en un partido tal vez necesita 20.

Dirigí a Batistuta, Crespo, Aduriz, Darwin y lo vi a Suárez de cerca y me empecé a interiorizar. Y una de la cosas que le pregunté es si él pateaba al arco, y me dijo que no, que patea a un lugar del arco. Y tiene un sabor enorme para cualquiera que entiende de fútbol. Todos pateamos, pero a un lugar del arco patea Luis Suárez.

Otra cosa que intuía, pero que la vi en él es que va viendo todos los pases que tiene una jugada. A cada pase él le ofrecía un movimiento que indicaba qué tipo de habilitación quería. Son cosas que comento, pero son difíciles de entender. Los grandes delanteros siempre dicen donde quieren que vaya la pelota, no van a donde fue la pelota. Es una diferencia enorme. Los buenos de verdad dicen: "Tiramela acá". Los comunes van al lugar adónde fue la pelota y en mayoría de los casos llegan tarde.

En la Copa América aprendí de él, como aprendí de muchos centroatacantes. Luis cada pase va viendo si el que recibe la pelota está en condiciones de habilitarlo y, si está en condiciones, se mueve porque entiende algo que solamente lo entienden los que tienen una gran voracidad por convertir. Nunca deja pasar una posible habilitación sin ofrecer un movimiento porque sabe en la posible habilitación y coordinada con el movimiento está el gol, y él está enamorado del gol. Luis siempre está enojado y se enoja porque no le dan la pelota que él sabía que había que darle para convertir.

¿No trató de convencer a Suárez? ¿Tendremos alguna sorpresa o cara nueva en la próxima doble fecha?

No tengo ni la confianza de decirle Luis. El paso de Luis Suárez fue impecable, un caballero y generoso con el equipo. Demostró que no pensaba en él, sino en el equipo. Me llamó y me dijo después de la Copa Amércia que iba a seguir hasta diciembre, pero que si yo prefería él podía despedirse anticipadamente y no consumir espacios en una convocatoria que yo pudiera dedicarle a jugadores que garanticen el futuro. Si usted me pregunta ahora, usted viene de protagonizar una Copa América en la que jugó muy poco pero fue decisivo para nosotros y tiene un valor enorme y fue un apoyo para todos los jugadores, inclusive para mí también. Es bueno tener a alguien que actúa de manera desinteresada. Después de la Copa jugó ocho partidos, hizo goles y está en plenitud, va a estar convocado en la próxima fecha FIFA pero hay algo que es muy importante: cuando una persona le da tanto a un país no es justo que le sigamos reclamando.

Cuando a un jugador se le va a asignar un espacio de tercera opción es difícil de sostener. Como se respeta a un jugador, se lo respeta diciéndoles sos convocado porque lo mereces y porque estas en condiciones de disputar el espacio en la posición en la que actuás, ningún jugador quiere que la garanticen nada que no merezca.

Me dijo: "No quiero pertenecer si no soy necesario, útil. No quiero pertenecer por mis antecedentes, sino por ser útil’’. Cuando un jugador te dice eso es porque tiene una gran confianza en sí mismo.

Le dije que entiendo su opción de llegar a diciembre, pero usted tiene el derecho de cambiar de opinión cuando le parezca porque no estoy en condiciones de pedirle nada. Cada vez que se renueven las convocatorias, lo convoco si es necesario y útil. Me parece alguien al que había que darle y no pedirle. Fue una relación muy sencilla de llevar adelante.

No me vi tentado en convencerlo porque siempre supe que un jugador como Luis Suárez no hay que pedirle, hay que aceptar las decisiones que tome.

Ocho partidos entre Copa América al partido con Paraguay en ese período metió seis goles, tuvo un rendimiento físico de bueno a muy bueno, y el futbolístico siempre estuvo muy cerca de siete puntos. Es difícil que un delantero esté a nivel de siete puntos porque tiene que hacer goles y jugar bien.

Falta de goles en los últimos cuatro de cinco partidos.

Lo peor que puede hacer un DT es no enterarse de la verdad. Si uno la maquilla tiene poca posibilidad de revertir ese error. En relación a los partidos en los que señala que no hubo goles, el resultado que se obtiene aumenta o disminuye aquello que se reclama. Contra Colombia estábamos en mejores condiciones que el rival para ganar en el primer tiempo y lo terminamos perdiendo, y en el complemento fuimos mejores.

Durante mucho tiempo sentía que mi equipo jugaba mal si no creaba seis situaciones de gol por tiempo. Ahora, si uno mira los partidos de Eliminatorias son mínimas las situaciones de gol que se crean. Sé que a ustedes les preocupa y a mí también. Estoy preocupado, pero no puedo ignorar dentro de qué fútbol nos estamos moviendo, sino aspiraríamos a jugar un fútbol muy superior que la media de la competencia. Estamos dentro de lo mejor que producen los equipos.

Me doy cuenta que le DT de Argentina hace que los jugadores estén muy cerca de hacer lo que son capaces de hacer y no siempre lo consigo en Uruguay. La culpa ahí es del entrenador y hay un plus de crecimiento que pensé que íbamos a resolver y que no está resuelto. Pero todos los ciclos de los equipos tienen altos y bajos. Haber ganado dos puntos es muy poco, pero también es mucho. No le voy a decir que estábamos tristes después de empatar con Paraguay y Venezuela. Cuando entrás al vestuario te das cuenta si hay tristeza o no hay alegría. No había alegría, pero no había tristeza.