Miramar Misiones y Progresodisputaron el sábado por la noche en el Parque Palermo uno de los mejores encuentros hasta ahora disputados por el Campeonato Uruguayo de la Segunda División Profesional. Ambos conjuntos (únicos invictos del torneo) brindaron 90 minutos intensos, con emociones hasta la última jugada del encuentro y con goles de alta factura.
Los Cebritas ejercieron en el inicio del partido un dominio casi total del campo de juego. El primer tiempo fue un resumen cabal de lo que se considera una final anticipada, con entrenadores que no resignan su forma este quien esté por delante y eso lo saben sus jugadores. Intenso, emotivo, con goles, incidencias de peligro e incluso un expulsado.
Miramar comenzó mejor el encuentro posicionándose en campo rival, y no extrañó que a los 7 minutos se pusiera en ventaja con un golazo del colombiano Ignacio Yepes que colgó el balón del ángulo superior derecho de Lucero Álvarez.
Sin embargo pocos instantes después a la salida de un tiro de esquina, Franco López en un descuido defensivo del local, igualó el tanteador con golpe de cabeza. Pese al empate, fue Miramar Misiones quién siguió ofendiendo pero la falta de un delantero de área lo dejaba al Cebrita sin la posibilidad de concretar todo lo bueno que elaboraban los volantes.
En un contragolpe muy bien orquestado por la delantera gaucha, fue Gastón Colman quien con tiro cruzado marcó el segundo tanto de Progreso, ante la sorpresa de todo el público presente en el escenario palermitano. Poco antes del final de la primera mitad, Ismael Tejería fue bien expulsado por Leandro Lasso y esa acción condicionó el posterior trámite del partido.
La sustitución de Guzmán Pereira luego de caer desmayado en el terreno de juego y un tiro libre de Mauricio Gómez que Lucero Alvarez con una atajada magistral al ángulo neutralizando la igualdad le dieron el broche final a la primera mitad.
La segunda parte mostró a Progreso con una formación en bloque, compactado en dos líneas de cuatro buscando neutralizar todo intento Cebrita de llegar con peligro sobre el arco de Lucero Álvarez. La imposibilidad de llegar con pelota dominada invitaba a tratar de abrir el cerrojo con remates de larga distancia que no siempre tuvieron un buen destino. Cuando el partido moría y parecía que el Gaucho se llevaría los tres puntos para La Teja, apareció Mauricio Gómez en una de las tantas incursiones por derecha y con un remate que ni siquiera tenía destino de gol encontró mal ubicado a Rodrigo Mieres que intentó despejar pero terminó convirtiendo un autogol que puso algo de justicia en el trámite del encuentro.
El Bicho Colorado rescató un punto
En 37 minutos Uruguay Montevideo mostró el manual de la efectividad absoluta, con tres llegadas y tres anotaciones para ubicar un 3 a 0 en el tanteador que a esa altura parecía decisivo. A pocos segundos para el pitazo de Diego Riveiro, Maximiliano Juambeltz descontó y fue el aliciente necesario que necesitaba el Bicho Colorado para poder revertir la pésima primera mitad. En el amanecer del segundo período Fabrizio Fernández con un gran disparo de afuera del área puso el 2 a 3 y Rentistas fue un vendaval sobre el arco rival. La hazaña de Rentistas se completó con un golazo nuevamente de Juambeltz que de taco colocó la paridad definitiva.