TORNEO CLAUSURA

El segundo tiempo de Progreso-Villa Española comenzó con uno de sus arcos vacíos. No fue por cambio, ni porque el arquero estaba adelantado, sino que directamente no estaba en la cancha.

Esteban Ostojich pitó el inicio de la segunda mitad sin corroborar la presencia de los defensores de cada arco y el complemento comenzó.

Incluso el capitán Gustavo Alles no se había dado cuenta de la falta de su compañero, ya que fue el que empezó con un toque el segundo tiempo. Pero el arquero del Gaucho, Rodrigo Formento, todavía no había ingresado a la cancha y estaba en el vestuario del local.

Los segundos 45' comenzaron y se jugaron cerca de 12 segundos, los suficientes para que alguien le hiciera señas para que Ostojich se percatara de lo que estaba pasando mientras el DT de Progreso, Álvaro Fuerte, gritaba de forma desesperada alertando de la situación. En ese momento Formento, quien venía trotando desde el vestuario, ingresó a la cancha y el partido se reanudó con normalidad.

Pero este no fue la única curiosidad del arquero del Gaucho, sino que antes ya había sufrido un mal momento, justo en el festejo del gol de su compañero Rodrigo Mieres (1-1), cuando se sintió al celebrar el tanto. Para su fortuna, fue solo un susto y continuó en la cancha. Antes había fallado en el gol inicial de Villa Española, al dar un rebote innecesario tras una arremetida de Emiliano Albín; Pablo Silva lo aprovechó para colocar el 1-0.