INGLATERRA
En su vuelo de regreso desde Lisboa, la aeronave se encontró con vientos fuertes que prácticamente la detuvieron en el aire y la hizo tambalear.
Durante el vuelo de retorno desde Lisboa era todo felicidad en el plantel de Manchester City, que venía de dejar prácticamente sentenciada la serie ante Sporting de Lisboa por los octavos de final de Champions League al imponerse 5-0. Sin embargo, al llegar al aeropuerto de su ciudad las sonrisas dieron paso al silencio a la sensación de terror.
"Para ser honesto, cuando vi el vídeo después pensé: vaya, ha sido más terrorífico de lo que sentimos. El avión se movió mucho, varias veces. En el momento en que íbamos hacia tierra, de inmediato los motores empezaron a sonar y subimos de nuevo", relató Pep Guardiola. "En ese momento sabes que algo está pasando", añadió. ¿Qué ocurrió?
Fuertes vientos, de hasta 40 nudos (unos 75 kilómetros por hora), recibieron a la aeronave cuando se posicionó para tomar la cabeza de pista y aterrizar en Manchester. Eso provocó —según se aprecia en una filmación de lo ocurrido— que el avión prácticamente quedara detenido en el aire y sacudiéndose de un lado al otro, tal cual contó el técnico.
Fue fundamental el piloto y no solo por haber mantenido la aeronave en el aire, sino por la tranquilidad que transmitió a los pasajeros. "Estuvo increíble, nos habló y estaba muy calmado. Nos dijo que había mucho viento y que intentaríamos aterrizar de nuevo. Estuvo magnífico porque ya nos sentíamos un poco asustados. Sus palabras y la forma en que nos habló hizo que todos nos calmásenos", reveló Guardiola.
Ante la imposibilidad de aterrizar en un segundo intento, el capitán del avión anunció que irían a Liverpool. Fue allí, en el aeropuerto John Lennon, que tocaron suelo para luego trasladarse por tierra hasta Manchester. El momento de terror había quedado atrás.