Tras cumplir la sanción, vuelve Luis Suárez al Gremio ante un rival que lo chicaneó y luego lo tuvo que sufrir

El Pistolero, ausente ante Santos, ya pagó la pena por haber alcanzado las cinco amarillas, vuelve a estar a disposición de Renato Gaúcho e intentará cortar la racha negativa.

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El festejo de Luis Suárez con la camiseta de Gremio.
El festejo de Luis Suárez con la camiseta de Gremio.
Foto: Gremio.

Redacción El País
El próximo domingo 27 de agosto a las 19:00, Gremio volverá a tener acción por el Brasileirao. Luego de lo que fue la derrota ante Santos en la fecha pasada, el tricolor gaúcho buscará volver a la victoria con el regreso de Luis Suárez.

El salteño estuvo ausente en el duelo ante el Peixe luego de alcanzar las cinco amarillas y, por ende, cumplir una fecha de sanción en lo que fue derrota por 2-1 tras un gol insólito en la última pelota del partido.

Lo cierto es que para el atacante uruguayo será un partido especial por varios motivos y uno de ellos es por el rival que tendrá enfrente. Es que Gremio se medirá con Cruzeiro, un equipo con el que ya jugó tres veces en el año y con el que tuvo cruces particulares.

Es que el primero de los partidos que enfrentó al Pistolero con el equipo de Belo Horizonte terminó con derrota por 1-0 para el uruguayo, lo que generó la chicana de Cruzeiro haciendo referencia a que "no lo vieron en la cancha".

Pero, como le pasó más de una vez a Luis Suárez, el destino quiso que se tomara revancha porque ambos equipos se volvieron a cruzar en los octavos de final de la Copa de Brasil y, como ocurrió durante varias series del certamen, el delantero uruguayo fue protagonista.

Hizo un gol en el partido de ida, en lo que fue empate 1-1, y en la vuelta dio la asistencia del único gol de Gremio que clasificó al tricolor gaúcho a la siguiente fase, lo que provocó que el propio club hiciera referencia a la chicana del Cruzeiro.

El juego además será especial para Luis Suárez porque buscará volver al gol, lo que no ha podido conseguir en los últimos encuentros. El Pistolero atraviesa su racha negativa más grande desde que llegó al fútbol de Brasil porque acumula ocho partidos sin anotar.

En esa misma cantidad de partidos dio una asistencia, pero no ha podido convertir y buscará volver a festejar justamente frente a un equipo que ya lo sufrió y con el que hay historia.

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