¿Un clásico? ¡Los extranjeros! La particularidad de los duelos entre Nacional y Peñarol y lo que pasa desde 1997

Miguel Méndez - Especial para Ovación
El domingo en el Gran Parque Central, por la segunda fecha del Torneo Apertura, se jugó un clásico especial y que tuvo una particularidad: nunca antes habían tenido minutos tantos extranjeros en el principal partido del fútbol uruguayo.

Luis Mejía (panameño), Julián Millán (colombiano), Gabriel Báez (argentino nacionalizado paraguayo), Diego Herazo (colombiano), Jeremía Recoba (italiano), Rómulo Otero (venezolano) y Eduardo Vargas (chileno) en el local y Leo Coelho (brasileño) en la visita fueron los foráneos que dijeron presente en el 1 a 1 que se saldó con los goles de Maximiliano Silvera y de Recoba.

Este récord corona una tendencia que lleva ya casi tres décadas: la presencia de futbolistas nacidos fuera de Uruguay en los clásicos. Son 120 partidos consecutivos con, al menos, un extranjero jugando en este tipo de partidos.

Hay que viajar hasta 1997 para encontrar el último partido entre Peñarol y Nacional exclusivamente con jugadores uruguayos en cancha. Casi 28 años hacia atrás.

El 15 de junio de ese año se enfrentaron por la desaparecida Supercopa sudamericana, en un partido que estuvo salpicado por la polémica.

El arquero bolso, Carlos Nicola, y el volante aurinegro, Pablo Bengoechea, estaban convocados para jugar la Copa América en Bolivia con la selección celeste. Por diferentes motivos ninguno de los dos fue y, tras rumorearse una posible sanción, los dos quedaron habilitados para jugar en clásico, aunque solo Nicola participó.

Foto: Archivo El País.

Por delante de él jugaron Óscar Suárez, Fernando Kanapkis, Dardo Pereira, Leonardo Jara, Mario Barilko, Rodrigo Lemos, Diego Tito, Washington Rodríguez, Juan Ravera y Juan González.

En el transcurso del encuentro ingresaron Gustavo Badell, Martín Ligüera y Silvio Fernández, que anotó uno de los goles. El otro lo hizo Rodríguez.

En Peñarol estuvieron Fernando Álvez en el arco, Serafín García, Óscar Aguirregaray, José Enrique de los Santos, Robert Lima, Marcelo de Souza, Washington Tais, Nicolás Rotunda, Carlos Aguilera, Juan Carlos de Lima y Antonio Pacheco.

Durante el partido, que terminó 2 a 2, entraron Ignacio Borjas, Martín García y José Cancela. Las anotaciones las concretaron De Lima y De los Santos.

Fue el partido inmediatamente anterior a los clásicos que Peñarol dio vuelta (Torneo Clausura y semifinal del Campeonato Uruguayo) que terminaron en Quinquenio, con el triunfo por 3-1 de la Liguilla como broche de oro para el Carbonero, que por ese entonces vivía años de esplendor por su supremacía.

En los 119 clásicos disputados desde entonces y hasta el del domingo pasado (120 si se considera como “jugado” el famoso duelo de la garrafa donde se le dio por ganado el partido a los tricolores en el Estadio Centenario) pasaron extranjeros de todos lados.

Los otros nueve países representados por la CONMEBOL tuvieron jugadores clásicos. Por nombrar algunos: Limberg Gutiérrez (Bolivia), que se destacó por su formidable remate en Nacional, Fidel Martínez (Ecuador), que pasó sin pena ni gloria, o los peruanos Rinaldo Cruzado y Paolo Hurtado.

Llegaron también desde destinos más exóticos, como el húngaro Kriztian Vadocz (volante central) o el español Xisco Jiménez, que jugó en los aurinegros en 2019 y 2020.

Gerardo Perez

Para el conteo, es necesario aclararlo, se toman como extranjero a cualquier futbolista nacido fuera de Uruguay, más allá de haber desarrollado la mayor parte de su vida (y carrera) en tierra oriental como sucede, por ejemplo, con el propio Jeremía Recoba, que nació en Italia cuando su papá estaba jugando en ese país.

Otros de los ejemplos más claros son los nacidos en Porto Alegre (Damián Rodríguez y Matías Aguirregaray), los argentinos Fernando Muslera -que con el tiempo se transformó en uno de los referentes de la selección uruguaya, ganando la Copa América de Argentina 2011- y Fabián Césaro o Jadson Viera, de Santana do Livramento.

En 2017, en el clásico del Apertura que Nacional empató 1-1 sobre la hora, se estuvo a tres minutos de cortar la racha, que por entonces llevaba casi 20 años.

El tricolor jugó solamente con uruguayos pero Peñarol, a los 87 minutos, mandó al campo de juego al canadiense Lucas Cavallini, único foráneo en jugar esa noche, que incluso jugó en la selección de su país.

Al año siguiente, por la primera edición de la Supercopa Uruguaya, fue el último clásico en el que Nacional jugó únicamente con uruguayos.

Dirigidos por Alexander “Cacique” Medina, esa noche estuvieron defendiendo a los tricolores Esteban Conde, Matías Zunino, Guzmán Corujo, Diego Polenta, Alfonso Espino, Diego Arismendi, Luis Aguiar, Santiago Romero, Tabaré Viudez, Carlos de Pena, Leandro Barcia, Sebastián Fernández, Gonzalo Bueno y Christian Oliva. Ese equipo perdió por 3 a 1 por los goles de Fidel Martínez, Cristian “Cebolla” Rodríguez y Maxi Rodríguez.

También un año más tarde, por la Copa Antel 2019, fue la última vez que Peñarol utilizó solamente jugadores locales en un partido clásico.

El Carbonero ganó 2 a 0 (goles de Agustín Canobbio y Gabriel “Toro” Fernández) con Kevin Dawson, Giovanni González, Fabricio Formiliano, Enzo Martínez, Lucas Hernández, Agustín Canobbio, Guzmán Pereira, Walter Gargano, Fabián Estoyanoff, Gastón Rodríguez, Gabriel Fernández, Cristian Rodríguez, Rodrigo Piñeiro, Yefferson Quintana, Marcel Novick e Ignacio Lores, uno de los jugadores que supo jugar en los dos equipos más populares del país.

Tras 120 partidos con presencia foránea estable y consecutiva en los clásicos del fútbol uruguayo, Nacional lidera ese tramo particular del historial: ganó 43 de los “clásicos de los extranjeros”, hubo 41 empates y Peñarol se impuso 36 veces.

Foto: Estefanía Leal.

Actualmente, los tricolores atraviesan una racha sumamente positiva frenta a su tradicional adversario, en la que llevan nueve partidos consecutivos sin caídas.

Solamente en este 2025, Nacional venció en el clásico Serie Río de la Plata por 3 a 1 con dos goles sobre el final del partido, hizo lo propio en la final de la Supercopa, pero 2-1 (goles de Nicolás López y Jeremía Recoba) y empató a uno el domingo en el Gran Parque Central después de empezar en desventaja.