COPA LIBERTADORES
La tecnología fue protagonista del choque entre el elenco brasileño y Olimpia donde Giorgian de Arrascaeta anotó un gol en la goleada por 4-1.
Flamengo goleó 4-1 a Olimpia jugando en Paraguay y dejó la llave prácticamente sentenciada en los cuartos de final de la Copa Libertadores. De todas maneras, el choque no estuvo exento de polémica, sobre todo, en una jugada que cambió el encuentro.
El equipo norteño ganaba 1-0 e iba en busca del segundo tanto. Giorgian de Arrascaeta cayó en el área y el árbitro argentino, Fernando Rapallini, entendió que no había infracción y dejó seguir la jugada.
Precisamente de ese contragolpe, sucede una infracción de Filipe Luis que ya estaba amonestado, recibió la segunda amarilla y por ende se fue expulsado, pero todo cambió en pocos minutos.
Mauro Vigliano, árbitro del VAR, llamó a Rapallini para que volviera a observar la jugada sobre De Arrascaeta. Si bien se aprecia un leve pisotón, el árbitro de campo entendió que ameritaba cobrar penal.
Como la infracción, de forma cronológica, fue antes que la expulsión, Rapallini anuló la roja y terminó sancionando penal a favor del Flamengo que Gabriel Barbosa cambió por gol.
De esta manera, Flamengo pasó de estar ganando 1-0 y quedar con 10 hombres a duplicar la ventaja en el marcador y además continuar 11 contra 11.