La situación de molestia se repite en la dirigencia de Peñarol. No es la primera vez en lo que llevamos del Campeonato Uruguayo 2023 que los directivos aurinegros se pronuncian ante jugadas puntuales de partidos en los que el aurinegro dejó unidades.

Los estados de WhatsApp del presidente Ignacio Ruglio, los posteos en redes sociales de los dirigentes o las declaraciones de estos mismos en los distintos medios reflejan la molestia mirasol por lo que ha ocurrido en varios partidos de esta temporada.

Tras el juego ante Danubio en Jardines del Hipódromo algunos de estos hechos no fueron la excepción. Fue en el duelo ante los franjeados que todos Peñarol protestó los dos goles que le anularon a Abel Hernández y que podrían haber cambiado el rumbo del encuentro por la quinta fecha.

Dos posiciones adelantadas de Hernán Menosse, que fueron sancionadas por el VAR, le quitaron la posibilidad al delantero mirasol de que los tantos no solo fueran festejados, sino que también subieran al marcador.

El final de la historia ya es conocido. Los goles no fueron convalidados y Danubio, por una grosera desatención de la defensa mirasol, terminó anotando el gol de la victoria que le permitió cortar una extensa racha de 13 partidos sin poder vencer al aurinegro en juegos oficiales por el Campeonato Uruguayo.

La situación caló hondo en la directiva de Peñarol que en la noche del domingo se reunió con, nuevamente, el tema de los arbitrajes sobre la mesa.

La decisión pasaba por declarar persona no grata al presidente de la AUF, Ignacio Alonso, al presidente de AUDAF, Marcelo De León, a los árbitros Christian Ferreyra y Esteban Ostojich -árbitro central y VAR del partido ante Danubio, respectivamente- y además retirarle la confianza al Colegio de Árbitros o no hacerlo para evitar lo que podría ser un “mal mayor” en lo que resta de la competencia. Fuentes aurinegras le informaron a Ovación que por el momento no hubo resolución.

En la pasada jornada, las repercusiones de lo ocurrido en el juego entre Danubio y Peñarol se multiplicaron y entre ellas estuvo la palabra del propio Christian Ferreyra quien explicó sus decisiones en Jardines.

“El VAR, como en toda jugada que terminó el gol, siempre hace chequeo. Cuando detectan que hay un jugador en posición adelantada, el primer trabajo es chequear si está adelantado. Después esta la parte de la interpretación: si ese jugador con el movimiento interfiere al adversario, si hace movimiento, si va a disputar el balón, si tiene contacto. Se evaluó la jugada y se entienden que hay una interferencia”, indicó respecto al primer gol anulado a Peñarol.

En diálogo con el programa Punto Penal (Canal 10), agregó sobre el segundo tanto mirasol no sancionado: “Similar a la primera jugada, en el sentido de que se evalúa de la misma manera porque interfiere al adversario. Las condiciones que se dan es que, por lo que muestra el trazado del VAR, el jugador (Menosse) está en posición adelantada. A partir de ahí el jugador realiza una acción de que va a ir a disputar el balón. ¿Cuándo es offside? cuando el jugador va a disputar el balón, la otra es si tiene contacto con el rival, por lo tanto obstaculiza al rival y lo otro es que el balón está en disputa, en contexto de juego. Solo por offside no está cometiendo falta, pero sale de esa posición para disputar el balón. Con todas esas consideraciones se evaluó”.

“Yo creo que fue un partido bastante disputado, el trabajo del equipo arbitral estuvo concentrado en todo el juego, en lo personal fue buen trabajo”, sentenció Ferreyra.

Las próximas horas serán claves para conocer los pasos que termina dando la dirigencia aurinegra respecto al tema de los arbitrajes y también cómo se interpreta la actuación de los árbitros desde el Colegio. Mientras tanto, Peñarol sabe que tras los resultados de la pasada jornada sigue en lo más alto de la Anual y en lo deportivo no puede desenfocarse porque también tiene mucho para trabajar.