GOLF INTERNACIONAL
Por primera vez un golfista japonés conquista un torneo Major
Si no hay drama parecería que no hay torneo: esta frase intenta resumir lo que el Masters de Augusta representa como espectáculo deportivo. Año tras año el torneo de golf más importante del planeta genera cosas que pocos otros dan: el drama unido con la perfección de un entorno único han brindado momentos marcados en la memoria de quienes aman los deportes y principalmente el golf.
El japonés Hideki Matsuyama logró lo que otros de sus coterráneos no pudieron, alzarse con una victoria en un campeonato Major. Japón es un país con una tradición golfística impresionante, pues 10 millones de personas practican golf allí y después de Estados Unidos es la nación con más canchas del planeta. Varios han sido los jugadores de ese país que han tenido buenas actuaciones en campeonatos mayores: Isao Aoki, Shingo Katayama, Shigeki Maruyama, entre otros, han tenido relativo suceso en el PGA Tour, pero ninguno pudo conseguir lo que Matsuyama hizo.
El domingo, Hideki llevaba cuatro golpes de ventaja sobre cuatro jugadores, entre ellos Justin Rose, el único ganador de Majors entre los escoltas. Culminado el primer hoyo, la ventaja del nipón de cuatro se había reducido a tan solo un golpe. Lentamente se fue reponiendo y a base de buenos tiros y putts logró recuperar y ampliar su ventaja a cinco golpes, con nueve hoyos por jugar.
Parecía ser historia terminada, pero los segundos nueve de Augusta siempre traen sorpresas. Quien arremetió fue Zander Schauffele, quien a falta de siete hoyos estaba a siete golpes de la punta. Una racha de birdies del 12 al 15 lo pusieron a Hideki con dos de ventaja con tres hoyos por jugar. Un mal swing en el histórico par 3 del hoyo 16 hizo que Xander quedara fuera de combate tras emplear seis golpes en ese corto hoyo de 180 yardas.
Matsuyama encaró los últimos dos hoyos con dos golpes de ventaja y lo que hizo fue administrarlos de la mejor manera. Con un bogey en el hoyo 72 obtuvo su primer título grande.
A pesar de tener 29 años, Hideki acumuló su décima participación en Augusta National en donde jugó como amateur y como profesional. En 2011 se coronó como el mejor aficionado del evento y 10 años más tarde con la chaqueta verde. Se unió a un selecto grupo que integran Jack Nicklaus, Ben Crenshaw, Tiger Woods, Phil Mickelson y Sergio Garcia como ganadores del Low amatueur y del Masters. Pese a todo este éxito, Matsuyama ha demostrado ser muy humilde, lo que conmovió al público en Augusta tras ver sus lágrimas mientras iba camino a firmar la tarjeta.
En cuanto a los retornos publicitarios, se entiende que esta victoria le reportará al japonés contratos durante 50 años que lo harán llegar a los 1.000 millones de dólares. Así de importante es el golf en Japón... En un año en el que Japón recibirá los Juegos Olímpicos en Tokio, no sorprendería ver a Hideki ingresando como abanderado de su país o mismo cargando la mismísima antorcha olímpica.
El mejor latinoamericano fue el mexicano Abraham Ancer, quien culminó empatado en el puesto 26 con uno sobre el par.
La próxima semana el PGA Tour viaja a Carolina del Sur para disputar el RBC Heritage donde se repartirán un total de 7.100.000 dólares.
Un anticipo del golf japonés
El triunfo de Hideki Matsuyama en el Masters tuvo un anuncio, una semana antes, con la victoria de su compatriota Tsubasa Kajitani en la segunda edición del Augusta National Womens Amateur, asegurando para el golf japonés una semana inolvidable.
La jugadora nacida en Osaka firmó vueltas de 73, 72 y 72 para alzarse con la victoria en un torneo que mostró un excelente nivel del mejor golf amateur femenino del mundo. Luego de un dramático final, tras realizar un doble bogey en el hoyo 17, Kajitani tuvo que ir a un desempate frente a la norteamericana Emilia Miglaccio. Pero esta no pudo aguantar la presión, dejándole la gloria y el título a la japonesa.
Entre las latinoamericana, la mexicana Isabella Fierro, la paraguaya Sofia Garcia y la argentina Agustina Zeballos no lograron superar el corte clasificatorio. De cualquier manera, seguramente fue una experiencia inolvidable para estas jóvenes golfistas que cuentan con un futuro muy prometedor para la región.