Enviado a París - Francia
Los Juegos Olímpicos de París 2024 tuvieron este lunes un parido estelar con Novak Djokovic y Rafael Nadal como protagonistas en el Estadio Philippe Chatrier de Roland Garros, donde el serbio se impuso 6-1 y 6-4 para avanzar en el torneo individual de tenis.

En un partido sumamente complicado para el español, que luchó la segunda manga con mucho ímpetu, Nole tuvo un tremendo primer set y encaminó la victoria para meterse en la siguiente ronda del certamen.

La derrota dejó eliminado a Rafa, que se despidió de lo que probablemente hayan sido sus últimos Juegos Olímpicos en materia de individuales, ya que aún sigue compitiendo en dobles junto a Carlos Alcaraz.

Pero hubo un hecho más que particular. La relación entre el público de Roland Garros y Rafael Nadal es más que conocida: en esta cancha el español conquistó en 14 ocasiones y además, el viernes fue uno de los grandes protagonistas de la ceremonia inaugural en le Trocadero.

Es por eso que luego de la derrota ante Novak Djokovic, la ovación fue enorme para Nadal, que se fue hacia el vestuario principal en medio de un mar de aplausos, gritos y emociones varias de él y por supuesto, de todos los espectadores que poblaron las tribunas de este histórico escenario.

Foto: AFP

Cuando París 2024 anunció día y hora del cruce de la segunda ronda del torneo de tenis en individuales entre Rafael Nadal y Novak Djokovic, el mundo del deporte se sorprendió.

El público francés, que ama al español —tiene 14 títulos en Roland Garros— le trasladó todo su cariño al tenista de 38 que seguramente esté viviendo sus últimos Juegos Olímpicos.

En cada pelota, en cada punto y en cada acción, la gente no paró de alentar y arengar a Rafa, que luchó hasta donde pudo ante un Novak Djokovic que mostró un nivel elevadísimo en París 2024.

Todo eso se confirmó luego de que Nole pusiera el definitivo 6-4 para sentenciar el partido, ganar y eliminar al español, que se fue de la cancha central de Roland Garros en medio de un mar de aplausos y gritos de sus fanáticos que intentaron de alguna forma u otra devolverle a Rafa todo lo que dio en esta cancha que se convirtió en una de las más inolvidables de su carrera como profesional.

Tras el triunfo, Nole también hizo de las suyas. Fue aplaudido por fanáticos y además, lanzó pelotas a la tribuna de la cancha a la que volverá para seguir en busca de su objetivo: la medalla de oro en los Juegos Olímpicos.