Enviado a París - Francia
María Pía Fernández cerró este miércoles su segunda participación en los Juegos Olímpicos tras debutar en Tokio 2021 y repetir en París 2024 donde disputó los 1500 metros.

Luego de su primera carrera, donde no logró acceder a la semifinal, tuvo repechaje en la madrugada de Uruguay, pero el objetivo tampoco pudo ser alcanzado. Pese a esa situación, Fernández valoró lo hecho en el certamen.

"Estoy súper feliz y orgullosa de estar acá. Fue un camino muy largo, muchos años con muchas caídas, pero siempre me levanto y esta no va a ser la excepción", subrayó al finalizar su participación.

"Con el sistema de repechaje me guardé un poco en la primera ronda, pero hoy lo di todo, me vacié, me hubiera gustado tener un puntito más. Era una carrera perfecta para correr en mis marcas o mejorar, pero podía pasar fueron semanas complicadas desde lo físico y lo mental", agregó.

La trinitaria no baja los brazos y de hecho se puso como meta repetir su presencia dentro de cuatro años: "Tokio lo padecí, Paris lo difruté y toca subir la vara, hoy me prometo estar en Los Ángeles 2028 de una manera mucho más competitiva".

Foto: Oscar Muñoz Badilla / CAU.

A su vez aprovechó la oportunidad para "dejar un mensaje para niñas y niños que sueñan con estar acá". "No hace falta nacer en un país súper potencia, ni hacer trampa. Jugando limpio, entrenando, soñando en grande se puede cumplir. Una persona de Uruguay puede estar en los Juegos Olímpicos y puede pelear de igual a igual con cualquier deportista", manifestó.

En relación al contexto en el que llegó a esta competencia, analizó: "Tuve que superarme a míi misma este año, batí seis récords nacionales, mejoré mis marcas y estar en los Juegos cada vez es mas difícil por las marcas. La vara sigue subiendo, en Sudamérica quizá nos estamos quedando un poco atrás, pero hay que seguir peleando".

"Tokio me costó. Me costó casi un año volver a sentirme segura, año y medio trabajando día a día para volver a estar un nivel de nuevo, estos últimos seis meses di todo de mi y se reflejaron las marcas", sostuvo.

Y precisamente sobre las marcas y sistemas de clasificación sentenció: "No somos máquinas, el sistema de clasificación quedó en evidencia tras observar que hubo muchas bajas por lesiones. Evidencia que el sistema tiene que cambiar, es muy duro. En mi caso mi pico de forma ya fue hace mes y medio, cuando me avisaron que clasifiqué a los Juegos Olímpicos faltaban apenas 20 días y fue muy difícil".