Enviado a París – Francia
Lo que Matías Otero consiguió en los Juegos Olímpicos de París 2024 muchos lo denominan como un simple hecho aislado, pero nada más alejado de la realidad porque en momentos en los que el deporte uruguayo necesita de referentes para las nuevas generaciones, esta cita los sacó a la luz.

Sin medallas y sin Diploma Olímpico, Uruguay se merece una discusión sobre el deporte de alto rendimiento, pero el canotaje celeste demostró que se sentaron las bases para competir en eventos de estas características y hoy, Matías Otero es el referente.

“Ahora tenemos que plantearnos una estrategia y tenemos que aprovechar este momento, tanto los deportes que estuvieron acá en París 2024 y los que no también, porque creo que esto sirve para demostrar a los demás que sí se puede, que con trabajo se logran cosas. Sabemos todos que a las federaciones nos cuesta trabajar por diferentes factores, pero esa garra que tenemos los uruguayos, ese empuje para conseguir las cosas, nos lleva a logros que obviamente deben ser acompañados por trabajo y planificación”, le contó a Ovación Sebastián Gómez, presidente de la Federación Uruguaya de Canotaje.

Foto: Enrique Arrillaga.

Por otra parte, Gómez no ocultó la emoción por lo vivido en estos últimos días con lo hecho por Matías Otero en sus primeros Juegos Olímpicos y remarcó: “Que un deporte esté en esta gran cita es una vitrina importante, tiene una repercusión diferente y se empieza a nombrar más, a hablar más sobre la disciplina. Todos preguntan ahora qué es el canotaje y a medida que empieza la competencia, crece la expectativa. Fue sorprendente lo que generó Matías en nuestro país. Me llena de orgullo como uruguayo y como presidente de la federación. Te da mucha felicidad pero también ganas de seguir trabajando para mejorar a futuro”.

Acerca de cómo fue el proceso de Matías Otero rumbo a París 2024, el presidente de la federación detalló: “Matías recién nos contó que después de los Juegos Olímpicos de Tokio él dijo: 'Bueno, tengo que hacer algo y cambiar mi estilo de entrenamiento y de vida para poder ir a París 2024'”.

Sobre la influencia que tuvo el hecho de que Otero decidiera irse a vivir a España, Sebastián Gómez dijo: “Obviamente que la federación apoyó ese proyecto. Ya había arrancado antes cuando se fue por primera vez Seba Delgado, que fue el que inició el contacto con el club cayatudense y la federación. Matías ahí estuvo y después de 2020 lo pensó mucho, lo habló con nosotros y obviamente hay que apoyarlo en ese tipo de cosas. España es un país muy fuerte donde está el canotaje instalado, y la verdad tiene otro tipo de competencias más fuertes, seguidas y se puede ir a participar a otros países, como las Copas del Mundo, a las que llegás en tres horas como mucho”.

Luego elogió la determinación de Otero para sostenerse en otro país y competir a alto nivel: “Además tenerlo en un grupo de deportistas de alto rendimiento lo ayuda en el día a día a trabajar y a ser más fuerte. Y acá en Uruguay, si bien estaba entrenando, a veces llegás a un cierto nivel donde quedás como estancado, y ahí no queda otra que salir a buscar un destino. El deportista lo tiene que tener muy claro en su cabeza, y también los objetivos que se plantean porque si no podés irte y a los dos o tres meses estás de vuelta en Uruguay, pero Matías estaba muy seguro y demostró que lo que hizo le dio resultado”.