AFP
La argelina Imane Khelif, una de las dos boxeadoras de los Juegos Olímpicos de Parí 2024 envueltas en una polémica de género, conquistó este viernes la medalla de oro olímpica del peso wélter (-66 kg) ante un público enfervorizado por su victoria en el cuadrilátero de Roland Garros.
Khelif logró su primer título olímpico al batir a la china Yang Liu por decisión unánime y lo celebró dando la vuelta a la emblemática pista de tenis levantada en hombros por un miembro de su equipo.
"He sido objeto de ataques y de una campaña feroz, y ésta es la mejor respuesta que podíamos dar", declaró Khelif tras su triunfo. "Soy una mujer fuerte con poderes especiales. Desde el ring, envié un mensaje a los que estaban contra mí".
"Trabajé durante ocho años sin dormir. Ocho años cansada pero ahora soy campeona olímpica", se felicitó la boxeadora de 25 años.
Tras competir sin hacer ruido en Tokio 2020, tanto Khelif como la boxeadora taiwanesa Lin Yu-ting se vieron en París en el centro de una ola de críticas por parte de algunas rivales y políticos conservadores como Donald Trump, así como de numerosos usuarios en redes sociales, que cuestionaron que sean mujeres debido a que el año pasado no superaron una prueba de género en el Mundial femenino.
Ambas fueron descalificadas de ese torneo por la Asociación Internacional de Boxeo (IBA), organismo que está enfrentado al Comité Olímpico Internacional (COI).
El COI le ha retirado a la IBA la organización del boxeo en los Juegos por problemas de ética y transparencia y defendió la presencia tanto de Khelif como de Lin, quien el sábado peleará por el oro del peso pluma (-57kg).
La mejor respuesta al "acoso"
Tras ser felicitada telefónicamente por el presidente argelino, Abdelmadjid Tebboune, Khelif dijo a beIN Sports: "Fui objeto de acoso y de una campaña feroz, y ésta es la mejor respuesta para ellos".
"Estoy plenamente cualificada para participar (en el torneo olímpico femenino). Soy una mujer como cualquier otra. Nací mujer, viví como mujer y competí como mujer", insistió. "Mi éxito tiene un sabor especial por los ataques".
En un reverso de la polémica, Khelif se ha erigido en estos Juegos como una nueva heroína deportiva en Argelia.
La boxeadora le brindó al país africano su segundo oro en París 2024 y también es la primera boxeadora argelina en coronarse en un ring olímpico.
Con sus camisetas y banderas, la afición argelina tiñó el viernes de verde las tribunas de Roland Garros, abarrotadas con alrededor de 15.000 aficionados.
Ídolo de Argelia
Khelif fue recibida al entrar con un sonoro estruendo, mientras que su rival Yang Liu era abucheada por una parte del público.
Gritos de "Imane, Imane" alentaron a la argelina durante los tres asaltos, en los que dominó completamente a su experimentada contrincante, siete años mayor y campeona mundial en 2023.
Khelif, que esta vez no tenía ventaja de envergadura, sí pudo explotar su mayor potencia física descargando una ráfaga de golpes sobre Yang para tomar la iniciativa desde el principio.
En el último asalto, la argelina sólo tuvo que conservar su ventaja y, al sonar la última campana, saltó de alegría antes de alzarle el brazo a Yang en señal de reconocimiento.
La púgil china aceptó el saludo de Khelif a diferencia de otras oponentes vencidas, como la italiana Angela Carini en el debut.
La italiana abandonó ese combate entre lágrimas tras sólo 46 segundos de pelea, en los que recibió varios fuertes golpes en el rostro.
Las imágenes se extendieron rápidamente por las redes sociales con figuras del deporte, como Martina Navratilova, y de la política conservadora, desde la primera ministra italiana, Giorgia Meloni a Donald Trump, criticando la autorización del COI a la participación de Khelif.
"Me esforcé al máximo, pero mi rival fue mucho mejor. Es una luchadora excelente y muy fuerte", le reconoció Yang tras la final.