MARCA PERSONAL

Con solo 22 años el alemán Kai Havertz ya se metió en la historia grande del Chelsea. Convirtió en la final de la Champions League para darle a los londinenses el título ante Manchester City y volvió a ser el héroe cambiando penal por gol ante Palmeiras en el alargue de la final del Mundial de Clubes. Esta vez, con gran participación de César Azpilicueta. 

El capitán del equipo inglés fue tan importante como Havertz en ese penal porque, instantes antes de la ejecución, se encargó de quitarle toda la presión al joven volante que gracias al español fue más tranquilo a hacerse cargo de la ejecución desde los doce pasos. 

El árbitro se dirigió al VAR para revisar una posible mano dentro del área de Palmeiras y mientras tanto, tras la posterior expulsión de Luan y posterior sanción del penal, Azpilicueta le hizo creer a todos los jugadores del Verdao que él se haría cargo. Los futbolistas brasileños se dirigieron a él para molestarlo y tratar de inquietarlo antes del penal pero al capitán no le importó porque sabía que el pateador era Havertz.

Finalmente Kai, con mucha más tranquilidad gracias a la simulación de Azpilicueta, cambió penal por gol y el Chelsea consiguió su primer Mundial de Clubes. En redes sociales, la "actuación" del capitán de los Blues fue tan viral como la repetición del gol.