Por Redacción El País
Tras una prueba de ADN, Geremi Njitap se llevó una noticia que le hizo replantearse muchos años de su vida. Confirmó que no es el padre biológico de sus hijos gemelos de 16 años y le pidió el divorcio a su esposa Laure Fotso.
Según informó el medio camerunés Actu Cameroun el padre de los dos chicos sería el exnovio de la mujer, con quien tuvo una aventura.
El periodista Beaufils Zambo dio a conocer algunos fragmentos del escrito que presentó el demandante para separarse de su esposa en el que alega que “Ella nunca dejó de humillarlo y despreciarlo encubriendo insultos tan degradantes como infames, sin dudar en llamarlo ‘vividor’ y cualquier otro calificativo”, dice el informe sobre la mujer que es hija de una familia millonaria.
“Estos insultos proferidos contra él y delante de sus hijos han sumido al demandante en un estado psicológico degradante", dice el acta de divorcio sobre la situación emocional del exfutbolista y aclara, sobre los chicos, que nacieron antes de que Geremi y Laure se casaran y fueron el motivo determinante de su unión.
Antes de dar el salto a Europa, Geremi jugó en Sudamérica. Defendió los colores de Cerro Porteño de Paraguay en 1997 y, jugando para Real Madrid, enfrentó al Boca Juniors de Carlos Bianchi en la final intercontinental que consagró al equipo argentino con dos recordados goles de Martín Palermo, uno de ellos ganándole la posición al camerunés y rematando cruzado.
Luego de jugar en el equipo Merengue se fue al Chelsea donde ganó la Premier League y su carrera también incluyó pasos por el Newcastle y el Middlesbrough.
Geremi también destacó con su selección. Ganó dos Copa de Africa y la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000.