Redacción El País
Todo lo preparado por el entrenador Fernando Diniz durante la semana se fue por la borda en tres segundos gracias a la infantil acción de Rafa Silva en el fútbol de Brasil. Cruzeiro se quedó con uno menos en la primera incidencia del partido ante Athletico Paranaense y se fue goleado.

Apenas el árbitro Rodrigo José Pereira de Lima pitó el inicio del partido, las condiciones cambiaron. El equipo local sacó del medio y la pelota derivó en Thiago Heleno que enseguida lanzó un envío largo. Hasta ahí todo normal, pero lo que ocurrió en medio de esa acción no se pareció en nada al fútbol.

Como jugando otro deporte, Silva, en su vuelta a Cruzeiro luego de jugar en el fútbol de Corea del Sur, salió despedido como buscando un objetivo que no era la pelota. Y lo consiguió porque, después de medirlo, le pegó un tremendo codazo a Kaique Rocha y en la acción previa había intentado hacer lo mismo con Felipinho pero el golpe no llegó a destino.

El árbitro expulsó a Rafa Silva y le facilitó las cosas a Paranaense que, con la victoria 3-0 gracias a los goles de Pablo (25’), Julimar (46’) y Nikao (80’) pudo salir de la zona de descenso al cabo de esta fecha.

Silva fue el apuntado por la goleada recibida por Cruzeiro, en mitad de tabla, y el club confirmó que el futbolista será multado gracias al amparo en una ley que lo permite. Tras el partido Alexandre Mattos, director deportivo del club de Belo Horizonte, lo confirmó.

"Lo que ocurrió es inaceptable; esta gestión, liderada por nuestro presidente, Pedro Lourenço, no pemite este tipo de situaciones. Rafa ya ha sido informado de una severa multa como lo permite la ley. Tendrá una multa considerable, y esperaremos a ver los siguientes pasos respecto a esto. Se dejó claro en el vestuario que, por encima de todo, Cruzeiro es muy serio y sigue estrictamente todo lo que se acordó, y exige un profesionalismo impecable", afirmó.

En el Código Brasileño de Justicia Deportiva en su capitulo sexto se establece que "cada entidad de administración deportiva tiene la autoridad para decidir, ya sea de oficio o cuando lo presente la parte interesada, sobre asuntos relacionados con el cumplimiento de las normas y reglas deportivas", dice el escrito y menciona que los clubes pueden imponer sanciones en caso de indisciplina o incumplimiento de las redes. Eso sí, deben darle al acusado el recurso de apelar, pero por lo pronto Rafa Silva solo ha pedido disculpas en Instagram.

"Se que me equivoqué y comprometí el partido. Estaba muy feliz por volver a los campos de juego y con grandes intenciones de ayudar después de tres meses de recuperación muy duros pero me terminé excediendo. Voy a trabajar para reconquistar la confianza de todos", publicó el futbolista.