Con información de LA Nación GDA
El polo argentino está en momentos de cambios para la confección del 2025, que ya cuenta con la resonante unión de los jugadores de La Natividad y La Dolfina (Jeta y Barto Castagnola con Adolfito y Poroto Cambiaso) como la noticia de mayor impacto. Pero sin dudas que uno de los aspectos más salientes era saber qué haría el uruguayo David Stirling, histórico número 2 de La Dolfina y máximo campeón extranjero del Abierto de Palermo.
En las últimas semanas había trascendido la posibilidad de que el Messi uruguayo del polo se bajara de la Triple Corona y que concentrara sus objetivos en el polo profesional en el exterior. Con 43 años y 9 goles de handicap (fue descendido este miércoles), todavía tiene capacidad y medios para desenvolverse en los torneos más importantes. Pero aún así, decidió dar un paso al costado. Quizá definitivo, quizá no. Pero fue su reacción del momento, lo que siente hoy.
“Quería contarles que hoy es un día duro ya que tomé la decisión de bajarme de lo que más he disfrutado en mi vida deportiva, la Triple Corona. Calculo que estoy equivocado en irme, pero bueno, es lo que siento en este momento. De lo que sí estoy seguro, es que me voy feliz y con mucho más de lo que imaginó ese chico criado en La Esmeralda, Young, hace ya un buen rato…", expresó el uruguayo en su despedida, y se tomó el tiempo de agradecer uno por uno a sus compañeros, equipo y a su país.
La trayectoria de Pelón en Argentina
Pelón Stirling jugó su primera Triple Corona en 2009 con Indios Chapaleufú II. Fueron los Heguy, Eduardo, Pepe e Ignacio, los que lo convocaron para ser parte de un conjunto tradicional. Hijo de David Stirling, otro jugador uruguayo de los años 80, dejó en claro que su paso no sería fugaz. Batallador, con buenas herramientas técnicas y sobre todo con actitud, apelando a la conocida garra charrúa, ya estaba en el radar de Adolfo Cambiaso (h.).
Stirling mostró sus condiciones en ese torneo de Palermo, acaparó elogios de sus compañeros y al año siguiente dio el primer gran salto: La Dolfina. Reemplazando nada menos que a Mariano Aguerre, que se despidió en la Nochebuena del conjunto con el que había ganado cuatro de cinco títulos en el Argentino Abierto entre 2005 y 2010.
Ese año del debut en Cañuelas (su casa adoptiva) no fue el mejor, aunque llegaría a su primera final, que perdieron contra Ellerstina. Fue el año de la separación de Cambiaso-Castagnola. Después, vendría lo mejor de su vida. Fueron 15 temporadas en La Dolfina, en la que ganó nada menos que 10 títulos y tres Triple Corona consecutivas con el equipo dorado, con Cambiaso, Mac Donough y Nero.
Pasó grandes momentos en La Dolfina, el club donde forjó su trayectoria. Cuando el mexicano Carlos Gracida selló su quinta conquista en el Abierto de Palermo parecía difícil que algún otro extranjero pudiera alcanzar esa marca. Bueno, Stirling la duplicó. Un monstruo. Pero además, siempre recordamos las palabras de Pepe Heguy: “Todos creen que Pelón es el menos crack de los cuatro, pero lo que hace a la velocidad que juega no lo consigue nadie. Es crack-crack”.
Siempre le puso humor y onda al equipo. Cuando llegó el turno de la nueva etapa en 2022 y con el regreso de Nero después de su paso por Murus Sanctus, se daba el caso de la diferencia generacional con Poroto Cambiaso, que cumpliría 16 años en pleno desarrollo de la Triple Corona, Pelón tomó la iniciativa y creó un grupo de wasap del equipo. La intención no era táctica ni de coordinar horarios ni cuestiones logísticas: era crear buen clima de recepción para el adolescente, que se sintiera cómodo. Stirling fue el primer compinche del heredero.
En varias ocasiones debió hacer frente a lesiones, sobre todo en el último lustro. Fue muy recordada una situación en 2021, cuando por una dolencia en un hombro debió someterse a sesiones en cámara hiperbárica. El problema no era el tratamiento, sino que Pelón era...claustrofóbico y tenía que permanecer encerrado en una suerte de tubo. Así que buscó la solución al problema: tomar unas pastillas para dormir una siestita.
La carta de Pelón
-“Quería contarles que hoy es un día duro ya que tomé la decisión de bajarme de lo que más he disfrutado en mi vida deportiva, la Triple Corona. Calculo que estoy equivocado en irme, pero bueno, es lo que siento en este momento. De lo que sí estoy seguro, es que me voy feliz y con mucho más de lo que imaginó ese chico criado en La Esmeralda, Young, hace ya un buen rato…".
“Tengo tanta gente a la que agradecer, que no sé por donde empezar. A Los Chapa, por darme esa primera oportunidad y gran experiencia".
-”La Dolfina (mis colores) que les voy a decir… hoy soy de Cañuelas! Siempre les he dicho que me abrieron las puertas de par en par. Acá aprendí casi todo a nivel polo y excelencia. Espero y creo que siempre di mi máximo, poniendo al equipo siempre por delante de lo personal".
-”Adolfo Cambiaso un honor Sobao… Gracias por bancarme cuando no era nadie y arroparme como uno más. ¡Muchos tendrían que aprender de vos! Me parece que me llevo la cifra del jugador en bancarte por más tiempo en abiertos jugados a tu lado, jajajajaja! Con razón no me queda un pelo…"
-”Carlín (Juanma Nero), voy a extrañar tus coscorrones, pero más aún, nuestras charlas y momentos compartidos juntos, ¡sos el mejor!"
-"Poro (Poroto Cambiaso), tuve la suerte de conocerte desde chiquito y de disfrutarte a mi lado en una cancha de polo; sos algo diferente. Aprovéchalo todo que sos un Crack, pero no te olvides que lo más importante que tenes es lo gran, gran chico que sos, no cambies nunca!".
-”Mou (Milo Fernández Araujo, coach), gracias por aguantarme cuando venía ahogado entre chukker y chukker y leer que no me podías decir nada porque sino te sacaba cagando… sabes que te debo mucho y me llevo miles de enseñanzas!".
-”Primo (Alejo Taranco), esto lo arrancamos juntos y vivimos momentos espectaculares que seguiremos compartiendo de la mano de nuestros chicos".
-”A los rivales con los que me tocó jugar, gracias. Perdón por alguna puteada o algún choque; quiero que sepan que nunca fue con mala fe, de eso quédense seguros.
-”A la más linda (Uruguay), qué momentos me hicieron pasar, enseñando que 'el paisito' puede orgullosamente mostrar al mundo lo lindo que somos. Las banderas dormirán unos añitos hasta que las nuevas generaciones vengan y vuelvan a flamear en la Cancha 1 de Palermo".
-”Mi ORIENTAL (su organización), cada uno que paso por acá, espero que hayan disfrutado y aprendido como uno aprendió de ustedes. Obviamente, un agradecimiento especial a vos Olivera (Justo); arrancamos hace 25 años y acá me seguís aguantando. Espero tenerte siempre a mi derecha".
-”Y los más importantes, mi metro cuadrado: papá, mamá, hermanos, gracias por disfrutar junto con uno! Siempre fue especial tenerlos cerquita".
-”A vos Jose (María José Vercellino, su esposa), sos la 1, nunca dudé cuando nos elegimos, y no le erramos ni un poquito. Gracias gorda por estar, bancar, querernos y mantener el barco a flote. Gracias por ponerme en mi lugar en momentos cuando uno se equivoca. Te quiero mucho".
-”Y lo más lindo que tengo, mis chicos. Lo que más me duele es que no puedan seguir viendo jugar a papá en Palermo. Aunque algún día entenderán que son el principal motor por lo que uno hace esto. Poder pasar más tiempo juntos y disfrutarlos más y más, es mi máxima motivación".
“El camino es la recompensa... Las copas fueron un extra al trabajo que le pusimos muchos. Gracias a todos; me voy feliz por esta etapa vivida y con ganas de nuevos desafíos… Vamooo arribaaaa Uruguay…”.
-
Kagelmacher: el día que Real Madrid lo despertó de la siesta, su análisis del año de Peñarol y el volver a Uruguay
Familia, rugby y oportunidades: la historia de Titanes, el equipo que crece y ayuda en Toledo
De Felippe, el DT que combatió en las Malvinas, logró tres ascensos y llevó a Central Córdoba a la Libertadores