Enviado / Aviñón
El objetivo de hacer historia en el Mundial de Rugby 2023 quedó atrás para Los Teros y el duelo tras la derrota frente a Italia el miércoles en Niza por 38 a 17, debe hacerse.
Es obligación del plantel y staff pasar raya de inmediato y con el paso de las horas lo están consiguiendo porque cambiar de aire y regresar ayer por la tarde a Aviñón, la ciudad base elegida por la Unión de Rugby del Uruguay para esta Copa del Mundo, fue algo positivo para todos.
Pero antes, aún en Niza y en conferencia de prensa, Oscar Durán, uno de los entrenadores de la selección uruguaya, fue claro: “Terminamos muertos el miércoles. Fue un día largo y estamos pasando la página rápido. Claramente estamos de duelo. Es un momento que hay que pasar y que esperemos que pase lo más rápido posible”.
Cochi explicó por qué tanta desazón y agregó: “Trabajamos mucho para este partido y cometimos errores que en este nivel no podemos cometer. Estamos tristes, angustiados, pasando ese duelo para enseguida pensar Namibia”.
Y nada como el tiempo para empezar a curar esas heridas que dejó el partido de Niza contra Italia porque también pasa que el tiempo es corto en un Mundial para Uruguay y ahora, toda la delegación sabe que más allá de no haber podido lograr el objetivo de vencer a Italia, aún queda otro y se llama Namibia.
Esa será la gran meta de un equipo que ante dos poderosos del rugby internacional como Francia e Italia, demostró estar a la altura.
Al anfitrión lo puso contra las cuerdas en Lille y llegó a estar a un punto de diferencia, mientras que a los azzurri, Los Teros le ganaron con absoluta autoridad el primer tiempo por 17 a 7, pero luego no pudieron sostener la intensidad y el ritmo del juego.
“En nuestra planificación el partido contra Francia era el último ‘amistoso’ antes de Italia. Era claramente un partido del Mundial y lo jugamos a mil como se vio. Pero era el último partido antes de Italia, un rival al que estuvimos analizando durante mucho tiempo en Uruguay. Hicimos semanas similares a esta semana de seis días (como entre el partido con Francia y el de Italia), con los mismos entrenamientos y carga horaria. Tratamos de replicar todo”, explicó Durán.
Pero el rival también juego y así lo explicó el entrenador: “Haciendo autocrítica, el camino fue casi perfecto porque lo que hicimos en el análisis, de ver la foto de cómo iba a ser la semana y replicarla, fue tal cual. Pero siempre falta el rival y lo que va a traer al partido”.
Luego de un mal primer tiempo, Italia mejoró en el complemento y además, se vio beneficiada por una amarilla a Andrés Vilaseca que derrumbó el plan celeste.
El partido no tuvo vuelta atrás y se le terminó yendo de las manos a Los Teros, que vieron cómo Italia fue una aplanadora poniendo un parcial de 31-0 en el complemento para ganar el partido.
“En un momento era difícil alentar a los jugadores porque se habían ido a tres tries de diferencia y el equipo se quebró. No pudimos salir de ese momento. Tal vez es la falta de madurez contra estos equipos porque el resultado capaz terminó siendo mayor que el de la realidad del partido”, analizó Oscar Durán.
Lo cierto es que ahora, Los Teros deben pasar el duelo y poner la cabeza en Namibia, el próximo rival. Y eso el plantel y el staff lo tienen claro: “Hoy es el día del duelo y tenemos que pasarlo. Cerramos Italia y ya nos ponemos a trabajar en Namibia. Es determinante y tenemos que poner todo”.
La amarilla de la que se sigue hablando
La tarjeta amarilla que Andrés Vilaseca recibió a los 42’ frente a Italia, sigue levantando polémica. Oscar Durán, uno de los entrenadores de Los Teros, dijo: “Nos golpeó muy duro por el momento, por el jugador de menos y por quién fue el que recibió la tarjeta (el capitán). La repercusión de la tarjeta fue más grande que la tarjeta en sí. Fue fina, seguimos viendo la acción y seguimos teniendo dudas. El contacto existe, es inevitable, se ve. De ese tipo de contacto en un partido hay miles. Si no, no se puede jugar”.
“Andrés no tiene intención de golpearlo, va con las dos manos, el rival baja su altura. El referee lo desestima. El TMO lo llama y ahí sancionan. Fue muy duro el castigo para la acción y por cómo repercutió en el equipo. Recibimos dos tries en ese período”, cerró diciendo.