ELIMINATORIAS

Cuando Uruguay pudo jugar, lo hizo y lastimó. Cuando tuvo que defender, defendió a morir, con ganas, con esfuerzo y con mucho corazón. Y eso llevó a Los Teros a quedarse con una muy buena, pero también trabajosa victoria frente a Chile por 15 a 10 en el Estadio Charrúa, en la segunda jornada del clasificatorio Sudamericano para la Copa del Mundo.

Es que no fue el mejor partido del seleccionado uruguayo, pero tampoco el peor. El rival, sabedor de las falencias celestes y con un entrenador que conoce muy bien a Los Teros como Pablo Lemoine, se repuso a un mal inicio y luego complicó demasiado.

Germán Kessler hizo valer la receta de line y maul para apoyar el primer try del encuentro cuando apenas iban 6 minutos. Luego Felipe Berchesi hizo efectiva la conversión y el local se puso 7-0 arriba.

Sin caerse y sin renunciar a su libreto, Los Cóndores dañaron mucho, jugaron con el nerviosismo de Los Teros y dieron vuelta el marcador en la primera parte.

A los 19’ un penal de Santiago Videla acortó la diferencia y tres minutos después, cuando todo Uruguay estaba en fase ofensiva, Rodrigo Fernández interceptó un pase de Franco Lamanna, se hizo de la pelota y embaló hacia el ingoal celeste para apoyar el primer try visitante. Videla hizo efectiva la conversión y el equipo de Lemoine se fue al descanso 10-7 arriba dejando muchas dudas en el combinado uruguayo que debía mejorar si es que pretendía quedarse con la victoria en el Estadio Charrúa.

Y nuevamente aparecieron Los Teros. En cuentagotas pero aparecieron. Y otra vez lo hicieron en el inicio de la segunda parte, un momento clave. Chile quería seguir imponiendo su idea, pero a los 44’ un penal de Felipe Berchesi igualó el marcador en 10 y a los 58’ Germán Kessler volvió a apoyar en el ingoal rival para dejar a Uruguay 15-10 arriba.

Quedaba mucho partido por delante y ni ese golpe terminaba de desalentar a un Chile que batalló durante 80 minutos y que en los últimos 10 se plantó en campo celeste buscando el premio mayor: el try que no terminó llegando.

No llegó porque Los Teros ejercieron una muy buena defensa en el cierre del encuentro y si bien Los Cóndores estuvieron a punto de sumar de a cinco, el corazón, la garra y las ganas de los uruguayos prevalecieron ante la ofensiva de un equipo trasandino que otra vez demostró estar a la altura y que tiene un gran objetivo con Lemoine a la cabeza: pelear una clasificación al Mundial de rugby.

Uruguay se hizo fuerte en el rubro defensivo pero dejó interrogantes en la ofensiva, más allá de que cuando llegó al ingoal rival, sumó y ganó un partido durísimo frente a Chile.

Los Teros salvaron el primer examen en el clasificatorio Sudamericano y ahora van por más. El domingo 25 de julio enfrentarán a Brasil en el Estadio Charrúa y si ganan avanzarán en la Eliminatoria para enfrentarse en octubre a Canadá o Estados Unidos por un pasaje directo al Mundial de Francia 2023. Se puede.