ENVIADO / LILLE, FRANCIA
Nicolás Freitas fue pieza importante en el estreno de Los Teros en el Mundial de Rugby 2023 y tuvo un gran partido el jueves ante Francia en Lille, donde apoyó el primer try celeste en un encuentro que dio mucho que hablar en el mundo de la ovalada por cómo jugó el equipo de Esteban Meneses ante una potencia de este deporte.

El wing de 30 años habló con Ovación sobre cómo se preparó el plantel para esta Copa del Mundo y además, contó qué tiene este equipo que sorprendió a todos y que ahora va por el objetivo de ganarle a Italia y Namibia en el Grupo A.

— ¿Te dejó contento el debut de Uruguay?
— Sí, re contento. Este equipo me emociona y sigue demostrando que está para estas cosas, para estos partidos, para seguir rompiendo brechas, barreras y suposiciones. Así que estoy muy contento, más allá de que hay un montón de cosas para corregir. Ahora toca descansar un poco, reponerse y viajar a Niza para encarar el partido con Italia.

— ¿Fue el partido ideal para saber dónde estaban parados Los Teros?
— Yo creo que sí. Hubo varios factores que pasaron por la cabeza de nosotros porque no es solo el hecho de estar acá, sino que también para muchos era su primer partido en un Mundial, era el debut y contra Francia, que es el local. En lo personal me pasó que el ruido me aturdió y no se escuchaba nada, pero así y todo terminé muy contento.

— ¿Cuánto influyó tener un ambiente como ese?
—Muchísimo. La cancha era un búnker. Ya en el Captain Run nos habían puesto sonido ambiente pero no fue ni un cuarto de la realidad. Lo hablamos mucho eso. Incluso escuchar La Marsellesa a capela fue una motivación y algo extra que estuvo muy lindo. Nosotros nos preparamos para jugar estos partidos así, pero después hay factores que capaz no los podemos tener en cuenta, aunque no dejan de ser motivaciones extras que son muy lindas y que tenemos que saber disfrutarlas.

Foto: AFP.

— ¿Cómo llegó este plantel a tener el convencimiento para salirle a jugar de igual a igual a un rival como Francia?
— Porque estamos locos. Estamos locos. Entrenamos como locos, vivimos como locos y nos queremos como locos. Es eso. Es contagiarnos el uno al otro el sacrificio que hace cada uno, el esfuerzo y las situaciones por las que pasa cada jugador de este plantel para fortalecernos y jugar como un grupo bien unido. Esa es la receta para que Uruguay haga estas cosas.

— ¿Largarse a jugar es la clave de este equipo?
—Tenemos mucha confianza en nosotros. La justa y necesaria. Entonces cuando sentimos que podemos largarnos a jugar, tratamos de hacerlo sin importar el equipo que esté del otro lado. Después veremos qué pasa, cómo se dan los partidos y a qué situaciones nos enfrentamos, pero sin dudas eso es algo bien marcado que tratamos de hacer.

— ¿A partir de ahora empieza la cuenta regresiva para cumplir los objetivos en esta Copa del Mundo?
—Sí, sin dudas. Hay que descansar, estudiar mucho y si bien el partido con Francia nos dio mucha confianza, también tenemos que tener un cuidado bárbaro y no sufrir un exceso de confianza porque Italia vio ese partido nuestro y sabe lo que se va a venir. Por eso nosotros tenemos que enfocarnos en lo nuestro y no salirnos de esa línea para seguir haciendo cosas como las del jueves.