SELECCIÓN

La reunión que Óscar Tabárez tuvo el sábado en la tarde en el Complejo Celeste con el Ejecutivo de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), y que tuvo al país entero en vilo, inclinó la balanza a su favor y ayer fue confirmado para dirigir los partidos del mes de noviembre por las Eliminatorias camino al Mundial de Catar 2022.

Las duras derrotas sufridas ante Argentina (3-0) y Brasil (4-1), sumados al flojo rendimiento colectivo, hicieron que las autoridades de la AUF se reunieran con Tabárez para analizar su continuidad tras 15 años de trabajo ininterrumpido.

Antes de la reunión con Tabárez y su cuerpo técnico, la balanza no estaba inclinada a favor del DT. Como sucesor, solo se manejaba una opción: Diego Aguirre, hoy entrenador de Inter de Porto Alegre.

Según supo Ovación con fuentes, desde la AUF se habían contactado con el entorno de la Fiera para conocer su situación. El DT estaba dispuesto a abandonar su puesto en uno de los grandes de Brasil para tomar el desafío de la selección.

Lo cierto es que los motivos que expuso el entrenador conformaron al Ejecutivo, que le dieron un voto de confianza para afrontar los dos próximos compromisos. Antes del inicio de la última triple fecha, Uruguay había empezado tercero la Eliminatoria. Ahora, tras conseguir un punto de nueve, está quinto y en zona de repesca a falta de 18 puntos por disputar.

Ovación confirmó con una fuente dirigencial que se le darán “dos fechas más y luego se evaluará”.

En noviembre, Uruguay recibirá a Argentina en el Campeón del Siglo y luego visitará a Bolivia en la altura de La Paz. El resto de los partidos se jugarán el año que viene: Paraguay (visitante), Venezuela (local), Perú (local) y Chile (visitante).

La Celeste tiene 16 unidades y quedan 18 en juego. Desde que se comenzó a jugar este sistema de Eliminatorias, todos contra todos a dos rondas, la selección terminó al menos en zona de repesca cosechando 24, 25 y 27 unidades. Es decir que, de acuerdo a lo que marcaron las últimas Eliminatorias, la Celeste debería sumar al menos las mitad de los puntos que restan para asegurarse un lugar entre los cinco primeros de las Eliminatorias.

¿Qué fue lo que dijo Tabárez en esa reunión de más de tres horas? ¿Por qué los integrantes del Ejecutivo se tomaron unas horas más para pensarlo y se terminaron decidiendo por su continuidad? Estos son los cinco motivos que llevaron a los dirigentes a dar luz verde para que siga el maestro.

Las dos partes, tanto los jugadores como el cuerpo técnico de la selección uruguaya, hicieron una fuerte autocrítica por lo sucedido en esta última triple fecha de Eliminatorias. No hubo excusas ni llevaron el foco de atención hacia otro lado. Se enfocaron en los errores propios.

Durante la reunión que mantuvieron en la tarde del sábado, tanto Tabárez como el resto de su cuerpo técnico se mostraron enteros pese al golpe y dejaron en claro su absoluta confianza para revertir la situación como anteriormente lo hicieron en otras Eliminatorias. No tenían en mente dar un paso al costado.

Una de las fuentes consultadas por Ovación manifestó que uno de los puntos claves para tomar la decisión fue que si venía un nuevo DT se iba a encontrar con un “hierro caliente”: con un equipo que venía de sufrir dos duras derrotas y que encima tenía que debutar contra Argentina y luego ir a La Paz.

Otras de las razones que pesaron en la decisión de la AUF fue la proximidad de los partidos ante Argentina (11 de noviembre) y Bolivia (16). Si venía un nuevo DT, debía preparar el clásico contra la albiceleste con tan solo un par de prácticas y una sola con el plantel completo a disposición.

En menos de un mes, una vez que se hayan jugado estos dos partidos por las Eliminatorias, la AUF pasará raya nuevamente y evaluará en qué situación está la selección. Los cuatro partidos restantes en la búsqueda de un pasaje al Mundial están todos fijados para el año que viene.