Redacción El País
Argentina recuperó fuerza. Con la actualización del ranking ATP del pasado lunes, el país volvió a ser noticia por un logro significativo para el presente del tenis sudamericano. Al revisar entre el listado de los 50 mejores jugadores del mundo, hoy aparecen cinco representantes albicelestes, algo que no se veía desde 2012.
Para encontrar una gesta similar, habría que remontarse a mayo de aquel año. Juan Mónaco (15°), Carlos Berlocq (37°), David Nalbandian (40°) y Juan Ignacio Chela (44°) conformaban un selecto grupo que encabezaba Juan Martín Del Potro, el único top 10 -estaba noveno-.
Ahora, si bien los argentinos no dicen presente entre los 10 primeros integrantes del circuito profesional del tenis, la juventud de quienes están en la elite despierta ilusión de que una de sus raquetas pegue ese salto pronto. Sebastián Báez (23 años; 19° del mundo), Francisco Cerúndolo (25; 22°), Tomás Etcheverry (24; 27°), Mariano Navone (23; 41°) y Facundo Díaz Acosta (23; 47°), campeón del último Uruguay Open, pertenecen a generaciones similares.
Uruguay, en cambio, se ve a años luz, con su mejor jugador rankeado en el lugar 569 (Franco Roncadelli).