Jugar un ATP Challenger de la categoría 100, como el Uruguay Open, no es algo que suceda todos los días para los tenistas uruguayos. Mucho menos cuando al mirar el cuadro principal de la edición en curso uno apenas se encuentra con tres representantes, que en todos los casos accedieron gracias a una wild card (carta de invitación para participar) y que son menores a 25 años.

Joaquín Aguilar (18), Franco Roncadelli (23) e Ignacio Carou (24) quedaron eliminados en primera ronda, pero dejaron la bandera celeste en alto al completar buenas actuaciones que los animan a mirar con optimismo hacia el futuro.

Después de un desempeño agrio en la Copa Davis contra Egipto, donde Roncadelli se acalambró, Carou no integró el dobles y Uruguay únicamente vio ganar el punto del honor, en medio de la lluvia, al mellizo Aguilar, los tres jugadores se prepararon para la cita más importante de su calendario con actuaciones en diferentes futures. El último lo hizo compitiendo principalmente en Argentina, aunque también incluyó en su gira al M15 que se organizó en Punta del Este a mediados de setiembre; Roncadelli le sumó Brasil y Carou también, además de Lima.

Foto: Uruguay Open 2023.

Ojeando en retrospectiva, esto de que ya ningún compatriota siga con chances de aspirar al título, que hoy puede parece una catástrofe, es más normal de lo que parece. En especial desde que se acabó la hegemonía de Pablo Cuevas, ganador del torneo en tres ocasiones (2009, 2014 y 2017).

Los antecedentes de los últimos seis años marcan apenas una única alegría de un local, cuando la por entonces raqueta número uno del país fue campeón al vencer en la final al portugués Gastão Elias por 6-2 y 6-4.

Desde entonces, no hubo más ganadores uruguayos, pero sí una aparición de Carou en la final del dobles de 2021 con el italiano Luciano Darderi, que juntos perdieron 6-4 6-4 contra la dupla brasileña de Rafael Matos y Felipe Meligeni Alves.

En esta oportunidad, el nacido en Buenos Aires y nacionalizado uruguayo se inscribió con el argentino Camilo Ugo Carabelli —y ganó—, pero antes debutó en el singles contra el brasileño Gustavo Heide. El resultado de su partido jugado el pasado martes fue derrota en dos muy ajustados sets (6-3 y 7-5), aunque su balance, en términos generales, terminó siendo positivo, según expresó: “El partido fue duro, pero creo que jugué bien. Todos los rivales son difíciles”.

Foto: Prensa Uruguay Open.

El caso de Aguilar, aún con mucho terreno para crecer, demuestra que el chico tiene una condición innata para reconocer sus días “malos”. Así fue como se lo dijo a Ovación, sin mayores rodeos, tras perder 6-4 y 6-1 con el chileno Tomás Barrios Vera, el 106 del mundo. “Fue una experiencia muy linda jugar en casa. Pudieron venir mi familia y mis amigos y lo disfruté mucho. Si bien no fue uno de mis mejores días, pude sentirme bien, cómodo, y competir de igual a igual con Barrios Vera, que es uno de los favoritos en el torneo”.

Finalmente, para Roncadelli, el número uno de Uruguay en el ranking ATP, el partido de primera ronda frente al argentino Andrea Collarini le dejó, por un lado, “mucha confianza” para seguir compitiendo luego de levantar un 3-5 en el primer set y, por otro, el gusto amargo de no poder sostener la ventaja en los dos siguientes.

Sin embargo, en el dobles inició con el pie derecho y esto analizó: "La experiencia en el torneo está espectacular. Estoy recontragradecido con la organización de que me den el wild card porque con mi ranking todavía no puedo jugar el cuadro principal".

"Todos los años lo disfruto un montón. No solo los partidos, sino la semana en sí, porque se entrena con gente de buen nivel y eso hace que suba el tuyo. Me sentí que estuve a la altura; quizás me faltó levantar un poquito la intensidad (en el singles). Tengo que seguir teniendo partidos de este nivel para pegar el salto", reconoció.