ENTREVISTA

Gimena Sauchenco, o “Alaska” para quienes la siguen en las redes, sube videos a YouTube que miran cientos de miles de jóvenes por el mundo. Allí se muestra haciendo monólogos en los que suele abordar temas como la vida cotidiana y la idiosincrasia uruguaya. Con 18 años y consolidada como una referente de su generación, Alaska debutó como conductora de televisión y publicó su primer libro autobiográfico."Mi generación tiene mucho potencial", advierte.

-¿Cómo surge el nombre artístico “Alaska”?

-Siempre supe que cuando tuviera un proyecto para que la gente me conociera tenía que tener un nombre fácil de recordar. Me gustan los nombres raros y quedó ese. Fue marketing. Después descubrí que había una cantante que se llamaba así y me quería matar (risas).

-¿Cuál fue la clave para convertirte en una referente de tu generación?

-Las redes sociales están llenas de personas inalcanzables que responden al estereotipo del influencer perfecto, y yo no hago nada de eso. Me muestro como soy: una gurisa normal de Uruguay que hace las mismas cosas que la gente de mi edad.

-Pero te sigue gente de todas partes...

-Para llegar a eso lo primero que me ayudó fue hacer videos sobre Uruguay. Yo soy fanática de la Selección y tengo una serie de videos llamados “Sos uruguayo si...” y se viralizaron súper rápido. A eso se le sumó que el año pasado fui a la Copa América e hice videos reaccionando a partidos. Yo pensaba que no los iba a ver nadie, pero fue con eso que llegué a otros países. Se sorprendían de ver a una gurisa uruguaya viviendo el fútbol así.

-¿Cuál fue el lugar más lejos al que llegaste con tus videos?

-A todos lados, es una locura. Me llegan muchos comentarios en otro idioma que los tengo que pasar por el traductor y dicen “veo tus videos”. Lo más loco fue el año cuando viajé a Perú, que se me acercó un chico para preguntarme “¿Vos sos Alaska, la youtuber?”. Yo no lo podía creer.

-Decís que sos una chica común de tu edad, ¿te sentís una fiel representante de tu generación?

-Sí. Yo digo lo que me pasa y es lo que le pasa a cualquier persona de mi edad.

-¿Cómo definirías a tu generación?

-Somos una generación con mucho potencial, y muchas veces se nos tira para abajo. Los adultos tienen una cabeza muy distinta y muy cerrada de cómo son las cosas: “son así y no se pueden cambiar”. No entienden que una persona logre éxito a partir de las redes sociales . O tiran la de “no podés hablar de política porque sos joven” o “si hacés bachillerato artístico te vas a morir de hambre”. Los jóvenes buscamos otros caminos y estamos cambiando la cabeza. Pensamos que las cosas se pueden hacer.

-¿Tenías el objetivo de convertirte en influencer?

-Yo soy muy enfocada y tenía en la cabeza las ganas de que me fuera bien. Pero también sabía que You Tube no era un fin sino un medio para lograr otras cosas, como escribir un libro o llegar a la televisión.

-¿Te privás de decir o hacer algo por el público que te sigue?

-Cuido las palabras porque sé que me siguen muchos niños y eso es una responsabilidad. Si tengo influencia la quiero usar para bien.

-¿En qué momento empezaste a ser consciente de la responsabilidad que tenías?

-El año pasado organicé una juntada con mis seguidores en la Rambla. Se llenó de gente y entonces dije “esto se me está yendo de las manos”. Entendí que un youtuber puede ser un ídolo para muchos nenes, lo que hasta para mí era una locura.

-Debutaste como conductora de televisión en C+ (TNU), ¿qué valor tiene estar televisión para alguien que logró su éxito en redes?

-El programa es transmedia y tiene presencia en otras plataformas aparte de la televisión. Yo tengo clarísimo que para mí las redes están por encima de la tele. Pero lo que uno puede ganar haciendo videos no es lo mismo que teniendo un trabajo en la televisión. Además, la televisión da otro tipo de visibilidad. Cuando doy una entrevista en televisión, me escriben varias marcas interesadas en lo que hago.

-¿Cómo surge la iniciativa de escribir tu propio libro?

-En diciembre se contactó la editorial conmigo y me lo propuso. Mi caso es particular porque hay otros influencers que sacaron libros pero que no son escritos por ellos, sino que venden la imagen para que salga un libro con su nombre. Mi libro es escrito por mí porque me encanta escribir desde chica. Yo sé que me fue bien con los videos, pero siento que la forma de la que me expreso mejor es escribiendo. Siento que esta fue la chance de mi vida y le metí mucho trabajo para que saliera. Estuve escribiendo desde diciembre hasta julio, que fue cuando se mandó a la imprenta. La libertad que tuve para hacerlo fue increíble.

-¿Qué opinás del fenómeno de Yao Cabrera?

-No sé cómo es como persona, pero lo que muestra no está bueno para el público que lo sigue. No es el mejor ejemplo de usar bien la influencia. Capaz que es la forma más fácil de ser famoso con videos que se viralizan rápido, pero yo no iría por ese camino. Todo el tiempo se está sexualizando, muestra violencia y cosas que son mentira.

-¿Nunca te gustaron los youtubers como él?

-Cuando era más chica y estaba el auge de Dosogas los miraba. Nunca fui a una juntada, pero tengo amigos que sí y ahora se arrepienten (risas).