ENTREVISTA

El fin de semana pasado comenzó la temporada uruguaya de Piel de Judas, la comedia protagonizada por Susana Giménez en Enjoy Punta del Este. El estreno implicó el debut en los escenarios orientales de la diva argentina y del elenco.

El gran socio en escena para la actriz argentina es Antonio Grimau, quien interpreta a Alexis Bruckner, un afamado violinista algo venido a menos en popularidad pero mantiene su encanto seductor y mujeriego. Susana encarna a Marion Bruckner, una mujer exigente, que enfrenta las infidelidades de su marido con intensos cambios de humor.

El elenco lo completan Julieta Nair Calvo y David Masajnik, además de los uruguayos Sebastián Slepovich y Patricia Álvarez.

El jueves 15 se produjo el preestreno de la comedia en una función exclusiva para socios de Club El País. La concurrencia ovacionó a Giménez en su ingreso a escena y acompañó con risas toda la función. Al cierre, el público aplaudió de pie y Giménez retribuyó con un poco usual gesto de llevarse la mano a su corazón.

Finalizada esta primera función, el actor argentino Antonio Grimau dialogó con Sábado Show sobre el espectáculo y el vínculo con Susana Giménez.

-¿Cómo se vivió esta primera función con público?

-Muy bien. Quedamos muy conformes. Reaccionó bien la gente y disfrutamos mucho nosotros sobre el escenario. Cuando hay pública, la energía es bien distinta y se siente el calor humano de la sala completa. Además, nos han devuelto permanente con risas y con aplausos durante toda la obra, así que muy satisfechos de haber pensado.

-Fuiste parte con el mismo papel de la primera temporada de Piel de Judas en Buenos Aires (2015). ¿Qué comparación podría hacerse de aquel espectáculo respecto a este?

-Es un espectáculo más maduro, mejorado en cuanto entendemos mejor a los personajes y lo que pueden generar en el público. Estamos más seguros de nosotros mismos. Creo que ha habido una maduración natural. Con los ensayos y con el tiempo que pasó, en lo que a mi respecta, siento que entiendo mucho más este Don Juan pasó de moda.

-¿Cómo describirías la química con Susana?

-Sigue intacta y fluye cada vez mejor. Ella está estupenda. Es una compañera generosa en el escenario y realmente una comediante y una profesional maravillosa. Tiene ella un encanto natural que no se compra ni se vende. Además, es envidiable su oficio como comediante que durante mucho tiempo la ha caracterizado, no solo en el escenario, sino en televisión.

-Se reencontraron para Piel de Judas después de siete años.

-Sí, fue fantástico, como si no hubiera pasado el tiempo. En los ensayos ella nos recibió en su casa. Es una anfitriona divina, que nos agasaja siempre con comida y con café, tanto en Buenos Aires como en Punta del Este. Una vez instalados aquí en el Enjoy también nos ha tratado de maravillas, con todas las comodidades aseguradas.

-¿Cuánto hubo que repasar después de siete años?

-La memoria surgió enseguida, en especial la corporal. Uno se pone en la piel del personaje y le surgen los movimientos y las palabras. Desde luego que hubo que repasar libreto y ensayar mucho, pero la base estaba.