ENTREVISTA
El doctor y comunicador está de vuelta en la televisión con el nuevo programa de las mañanas de Canal 4, "Buen día" donde comparte pantalla con Claudia García
Regresó a la televisión después de una ausencia que se prolongó por tres años, y cuando ya sentía que su ciclo en los medios uruguayos estaba cumplido. El médico y comunicador Daniel Nogueira se puso al frente de Buen Día, el magazine de Canal 4 que se estrenó el pasado lunes. Este ciclo informativo lo conduce Claudia García y además de Nogueira también se encuentran Jimena Sabaris, Martin Fablet y Magdalena Prado en la conducción. Sobre su regreso a la televisión, cómo se ha vivido la primera semana que lleva este ciclo al aire, su aporte como médico y el coronavirus, charló Nogueira con Sábado Show.
Daniel Nogueira es una cara conocida para los espectadores uruguayos desde hace más de do décadas, aunque hace un tiempo que había estado alejado de los medios, dedicándose a la familia y su profesión de médico.
En televisión comenzó trabajando en Canal 5 (“cómo pasa el tiempo”, me dice cuando le cuento que me acordaba de haberlo visto en el canal oficial), también fue parte del equipo de Telenoche, el informativo de Canal 4, y durante cuatro años estuvo al frente de Doctor en casa, un ciclo de medicina (otra profesión de Nogueira además de comunicador) que estuvo en la pantalla de Canal 4 los días sábados y donde este doctor compartía pantalla con Marianela Lugano que comenzaba a dar sus primeros pasos en los medios de comunicación. Una vez que Doctor en casa llegó a su fin, Nogueira sintió que había llegado su momento para alejarse de los medios. Así fue durante tres años hasta que recibió la llamada de una productora que lo invitaba a ser parte del nuevo magazine matutino de Canal 4.
Desde el pasado lunes, Nogueira es parte del equipo de Buen Día, el magazine informativo de las mañanas de de Canal 4 que llegó para ocupar el lugar que dejó vacante Buen Día Uruguay. Este nuevo formato lo conduce Claudia García junto a Nogueira, Jimena Sabaris, Martín Fablet y Magdalena Prado entre las 8 y 10 de la mañana.
—¿Hace cuanto estabas alejado de la televisión?
—En febrero hicieron tres año que dejamos de hacer Doctor en Casa. Se va el tiempo volando. Volver a la televisión es lindo, soy sincero que es algo que no tenía en mis planes. Justo le decía a la gente de Sinapsis que es la productora de Buen Día, que me sentía muy cómodo en mi zona de confort con mis trabajos y mi familia, y bueno, en la vida todo tiene un ciclo, un tiempo y había entendido que mi tiempo en la televisión había caducado. Cuando me llaman obviamente la propuesta me interesa porque por otro lado significa un reconocimiento, entonces dije vamos a tirarnos, vamos a probar.
—Y esa incorporación seguramente alteró la rutina que tenías planeada para el resto del año.
—Sí, eso implico un ajuste en la rutina diaria, tanto en la familia como en los otros trabajos. Pero mientras el cuerpo aguante vamos adelante.
—Ahora la jornada empieza bien temprano, ¿hubo que hacer algún ajuste más en la familia?
—Si, por lo menos el primer día, siete menos veinte ya estaba en el canal. Capaz que porque son los primeros días, después uno se va aceitando más y entrenándose, lo que hace que uno pueda descansar un poco más y llegar un poco más tarde. Pero si, se hace larga la jornada, es cierto. Ahora estamos un poco más livianos por esto de mantenernos en casa y el teletrabajo, eso habilita a que estemos más distendidos en estos días. Pero uno ya sabe que cuando esto pase y volvamos a la rutina vieja, va a implicar estar muchas horas fuera de casa, eso es una realidad.
—¿Como sigue la jornada después de Buen Día?
—Soy jefe médico hace 10 años en la Junta Departamental de Montevideo, donde están los ediles, así que ahí estoy todos los días, seis horas para la atención primaria de funcionarios y coordinar las certificaciones medicas; y en La Española hace también como 10 años que estoy como médico de familia con consultas, tres días de policlínica en días diferentes y por ahí vamos cerrando la actividad.
—Tu profesión de médico le viene como anillo al dedo al programa en estos momentos de coronavirus.
—Sí, eso distorsionó lo que era la propuesta inicial del programa. Igual tenes que escuchar lo que la gente te solicita, lo que llamo la necesidad sentida de la gente y me paso a nivel personal, mucha gente que me mando mensajes, llamo y escribió en las redes, como que está agotándose del tema coronavirus aunque recién estamos empezando con este tema. La idea inicial es poder abordar otros temas de salud o ir despegándonos un poco del tema coronavirus para ir centrándonos en otras cosas que son más importantes o que puedan haber sido noticia en las últimas horas. Y yo no solo me limito a dar la opinión médica en el tema, sino que la idea es que todos tengamos intervención y parte implicada en lo que estemos planteando en el programa.
—Así que la idea es salir un poco del tema coronavirus en las próximas ediciones.
—La idea es buscar distintos ángulos. En estos días estamos despegándonos del tema coronavirus y tratar de aportar otros contenidos también, porque la gente lo pide, y es saludable también, sino como que estas las 24 horas del día encerrado en tu casa y si prendes la televisión es solo el mismo tema.
—¿Y cómo salimos de esta rosca de consumir todo lo referido al coronavirus?
—Creo que tomando conciencia. La gente tiene que tomar conciencia de lo que está pasando. El otro día le cayeron al Ministro de Salud Pública, Daniel Salinas por lo que dijo de salir a la calle por 20 minutos al día, y yo soy defensor de ese planteo. Tenemos una sociedad un poco complicada. Por un lado nos molesta que nos pidan la cedula porque nos sentimos intimidados y violentados por nuestro derecho de salir a la calle y todo lo que quieras; pero por otro lado estamos pidiendo a gritos que nos obliguen a quedarnos en nuestra casa. Como que no entiendo, no me cierra mucho. Entonces, ¿tenes necesidad que el Poder Ejecutivo te diga señor quédese en su casa porque si no lo vamos a castigar, va a ir preso o le vamos a poner una multa? Creo que no.
—Si, nos molestamos porque se pida la cédula pero pedimos que nos obligue el Poder Ejecutivo a quedarnos en casa. Da la impresión que ni nosotros mismos tenemos un criterio.
—Exacto, acá hay que tener conciencia, y la conciencia pasa por tener dimensión de lo que está pasando. Creo que información sobra, prendes la tele y es monotemático. El otro día fue a casa un muchacho a buscar unos materiales y me dice: pase por el Prado y no había nadie en la calle; y le digo esa es una situación ideal. Si voy al Prado porque quiero salir a caminar y no hay nadie, porque no hay aglomeración de personas, no estoy corriendo la 5K, ¿por qué no lo puedo hacer? Si no va a salir un virus de atrás de un árbol a acecharme y atacarme.
—Si, igualmente el fin de semana se vieron imágenes de la feria y la playa donde había una importante aglomeración de gente.
—Si ves las imágenes de lo que fue la playa en estos días donde todo el mundo fue y no se guardó la distancia adecuada, ese es otro tema. Tenemos que tener conciencia de la situación para saber qué se puede hacer y qué no, y si lo cumplimos esto lo podemos frenar. Igual falta, esto es el comienzo y si no somos responsables la cosa puede llegar a complicarse. Igual creo que no estamos tan mal.
—¿Cómo nos ves como médico?
—En el primer programa de Buen día hicimos una entrevista con un infectologo y le preguntábamos justamente por ese tema. A veces los titulares pueden ser nefastos en los medios de comunicación. Uno decía: Uruguay lidera la tasa de contagio y decía que era tremendo si nos comparábamos con otros países de América latina. Justo leíamos que en Argentina había más gente detenida este fin de semana y multada por no cumplir la cuarentena que por la cantidad de enfermos por coronavirus. Entonces me pregunto, ¿hay que creer en esas cifras argentinas?, ¿o en realidad los ciento y pico de personas que hay acá es porque hay una buena captación y no hay subregistros?, creo que pasa por esto, en otros países con Argentina a la cabeza tiene que haber un subregistro y muchas más personas contagiadas de las que se informan. De allí la diferencia, porque no tiene sentido que de con 40 millones de habitantes, Argentina tenga la misma cantidad de infectados que nosotros que tenemos tres millones de personas. Hay que tener cuidado con eso, porque podemos informar mal.
—¿Confiás en los datos que proporciona el Poder Ejecutivo?
—Confío que lo que se transmite es lo correcto, que no se está ocultando nada, la mayoría de los casos que hay acá son casos leves, había algunos en CTI que tampoco estaban en una situación crítica. Tenemos que unirnos entre todos, cuestionar menos y respetar más. Somos rebeldes, pero a veces la garra charrúa la reclamamos para el futbol y después hacemos agua en otras situaciones.