Fue el primer programa televisivo de Sergio Puglia, hasta entonces un inquieto cocinero y empresario gastronómico que se había abierto paso en Radio Sarandí primero y luego en Canal 5, con una columna en el programa de Sonia Breccia. Pero él sentía que estaba para más. Ideó el programa y lo presentó ante las autoridades del canal público.

En 1988 nació El club de la buena vida, que iba con una entrega semanal los días jueves. Según contó Puglia en su libro biográfico Conmigo no van a poder (Leonís, Esteban, 2016), desde el comienzo el programa proponía contenidos culturales con el encuadre de la cocina. “Fue así que músicos, actores y diversos personajes fueron desfilando a su lado mientras juntos se divertían en la preparación de los platos”, asegura el texto.

En sus comienzos El club de la buena vida se grababa en la cubierta del buque de lujo Luciano Federico, entonces propiedad de Buquebus y cuyo restaurante “Gala” dirigía Puglia. Con este barco, la empresa quiso en aquel momento revivir las travesías glamorosas y nocturnas a Buenos Aires de los años del vapor de la carrera.

Este primer ciclo del programa se extendió por dos años. En 1990, con la asunción de un nuevo gobierno y de Julio Frade como director de Canal 5, el programa y el conductor dieron un giro. A propuesta de las nuevas autoridades, El club de la buena vida se convirtió en el primer magazine matinal de la TV uruguay, en vivo de lunes a viernes desde los estudios del canal estatal.

“Me basé en lo que había visto que se hacía en los canales europeos. Lo adapté y le puse mucho foco en lo gastronómico. Generé un espacio para el microondas, para las conservas, para la cocina internacional, para la nacional, para los vinos... Todo eso se iba intercalando con columnistas especializados con invitados con los que teníamos lindísimas charlas y por supuesto con música”, recordó Puglia en el libro.

El éxito del programa fue tal que le significó un Premio Iris Revelación a Sergio Puglia y al poco tiempo, los canales 4 y 12 se sumaron a su propuesta el magazine matinal.

En paralelo y también en 1990 el comunicador inauguró la propuesta de los almuerzos de fin de semana, Puglia Invita. Cuando Canal 10 resolvió producir un programa de este tipo, acudió a su precursor. En 2004, estrenó Con mucho gusto y mantuvo su sello con Puglia invita.

Se inició entonces la era de Puglia como figura de Saeta que perdura hasta la actualidad. Además de los clásicos almuerzos de sábado, donde él es coproductor, Puglia es uno de los panelistas de Polémica en el bar y también jurado de las diferentes ediciones de Masterchef.