ENTREVISTA
El humorista de Locos por el fútbol (Del Sol FM) y Los mismos locos (Urbana FM) y la periodista deportiva llevan cinco años de relación y son padres de Bautista, de tres.
La radio, el humor y el fútbol los unió. Germán Silveira, integrante de Locos por el fútbol (Del Sol FM) y Los mismos locos (Urbana FM) conoció a su pareja, la periodista Rosana Tropiano, por los medios. Hoy están juntos hace cinco años y son padres de Bautista, de tres años.
Eran los tiempos en que el programa de humor y deporte estaba en las madrugadas de fin de semana de la 1410 AM Libre. A la emisora desembarcó un nuevo equipo para las transmisiones de fútbol encabezado por Roberto Moar y los “locos” iban a estar en el comando de la previa. Como periodista deportiva, Rosana integraba el equipo liderado por Moar.
En la emisora se organizó una comida para que todos se conocieran antes de la salida a la cancha. El asado fue en la casa de Adrián Mozzone, otro integrante de Locos por el fútbol.
“Ahí quedó muerta”, asegura Germán. Ella descarta que su flechazo haya sido por la pinta. “Pegamos muy buena onda. Él tiene un carácter muy especial. Como todo humorista se pasa haciendo chistes y me impresionó por ese lado”, cuenta Tropiano.
“Le entré por el lado del humor porque de otra forma no había chances. El humor salvará al mundo, como dice Gustaf”, asegura Silveira, quien tiene varios segmentos y personajes memorables en sus programas radiales. “La mota del Toto”, Daniel Ranchero o Charly Telasaco son algunos de ellos.
De hecho, junto a Yuri Jakimczuk están al frente del espectáculo “Algo tenemos que hacer”, que se ha presentado con aforo agotado en Magnolio Sala y ahora planea más funciones.
“Empezamos a salir y como pegué buena onda con el resto de los chiquilines, me sumé con un espacio en Locos por el fútbol, además de ayudarlos con la producción”, cuenta Rosana.
Pero más tarde quedó embarazada y resolvió dejar el programa. Ese no habría sido el único motivo. “Los quiero y los aprecio pila pero ellos tienen algo que están cambiando de a poco y es el chip de la inclusión... son machistas”, dice sin medias tintas. “Ellos son así. Hay un montón de mujeres que los siguen y se la bancan. Yo los banco también pero se los digo”, agrega.
Sin mucha planificación, quedó embarazada. Ahí empezó uno de los desafíos más grandes para esta historia de amor.
“Quedé embarazada a los 39 años. Mi madre estaba muy enferma y además, me agarré varicela. Los doctores nos dijeron que venía complicado y nos preguntaron si teníamos pensado abortar”, cuenta Tropiano.
“La verdad que fue espantoso”, complementa Silveira.
Nadie daba seguridad de que el bebé no nacería con secuelas. Luego de una semana de sufrimiento, tomaron la decisión de seguir adelante con el embarazo.
“Nos dijeron de todo. En los distintos controles nos decían de todo: llegaron a decirnos que iba a nacer enano”, cuenta Silveira. Sin embargo, Bautista nació con normalidad.
“Mientras todo esto pasaba había que ir a la radio a hacerse el gracioso. Fue salado”, revela el humorista.
Hoy, el niño está completamente saludable. La familia también disfruta del éxito teatral y Rosana también participa de “Algo tenemos que hacer” como “presentadora” de los “talentos” que suben al escenario a hacer sus personajes. También manejan la idea de hacer una versión acotada del show para boliches.