-¿Qué balance hacés de esta temporada?
-Tuvimos una ocupación casi del 100% durante la primera quincena de enero y se mantuvo así durante todos los fines de semana del verano. En la primera quincena de enero tuvimos 11.700 huéspedes, 45% de Argentina y 38% de Brasil. Durante ese período hicimos 41.000 cubiertos en los siete restaurantes del hotel, tuvimos un ingreso diario de 5500 personas al casino y Ovo recibió 1100 en cada fecha.
-¿Se superaron las expectativas previas a la temporada?
-Teníamos expectativas altas por la avidez que ha habido por Punta del Este durante el último año, pero el resultado las terminó superando. El público argentino volvió a demostrar su fidelidad por Punta del Este, y se pudo ver más gente de Argentina de la que imaginábamos teniendo en cuenta el tipo de cambio.
-¿Los números están cerca de la temporada previa a la pandemia?
-En volumen estamos por encima de lo que fue la temporada 2019-2020, la última antes de la pandemia. No hicimos el análisis fino de los ingresos, pero en cantidad estamos alrededor de un 10% por encima de esa temporada.
-¿Puede ocurrir que venga más gente de Argentina pero gaste menos a causa del tipo de cambio?
-No creo. Yo recuerdo una temporada en la que todavía estábamos más baratos que Argentina hace unos cuatro años, que fue muy buena pero venía más público de supermercado. Este año vimos más público de restaurante, de hotel. Cuando hagamos todos los números de la temporada creo que se va a confirmar esa situación que vemos de forma intuitiva.
-¿Qué servicios incorporó el hotel de cara a esta primera temporada después de la emergencia sanitaria?
-Incorporamos varias líneas nuevas: un nuevo wine bar en el lobby, una inversión grande en la infraestructura de Ovo Beach que se va a convertir en un parador para todo el año, sumamos la propuesta de La Choza de Mar en la arena, organizamos un torneo de póker para mil personas, entregamos autos cero kilómetro. Además realizamos 12 shows internacionales en el parking y continuamos haciendo teatro en alianza con Gustavo Yankelevich.
-¿Cómo fue trabajar con Susana Giménez en el hotel durante la temporada de invierno?
-Excelente. Uno toma dimensión de por qué es la principal figura de la región: es una profesional extraordinaria pero también es muy sencilla, cercana y humana. Nunca tuvo un inconveniente en parar, saludar, tomarse una foto y tener lindas palabras con nuestros colaboradores a medida que se los iba cruzando en el hotel.