Redacción El País
El columnista de El País y panelista en Esta boca es mía hará un alto, al menos en sus actividades televisivas. Parte a un viaje de dos meses por Europa donde participará de un congreso sobre cohesión social y también se someterá a un tratamiento quirúrgico de columna. Si se lo permite la rehabilitación, vuelve para poner su voto y su opinión en las elecciones internas de junio. Sin pelos en la lengua, el analista identificado con el Partido Colorado y con Peñarol, opina de la actualidad política, su rol como cantante y carga contra el presidente mirasol Ignacio Ruglio.

-¿Te vas a ausentar dos meses de Esta boca es mía? ¿Cuáles son los motivos?

-Me voy a ausentar del país. No soy figura central ni importante en ese muy prestigioso programa. Vivo afuera y voy solo una vez por semana. En cambio siento que donde más resiento la ausencia es en redes sociales. Estoy al alpiste de todo y participo escribiendo mucho. Estoy además en tres programas de radio y escribo en un par de medios, entre ellos El País. Voy a extrañar no estar tanto en el ruedo. Muchos motivos.

-Hay un asunto de salud, ¿qué se puede saber?

-Me voy en esta época desde que me jubilé. Trataré de exprimir el viaje. Tengo un congreso en Asturias del 15 a 17 de mayo sobre cohesión social e igualdad de oportunidades en años de IA. Voy también por razones de reencuentro familiar como siempre y con una operación de columna proyectada para el 14 de junio en España.

-¿Cuál es tu análisis de lo que va de la campaña? ¿Qué te parece lo más llamativo?

-Lo llamativo es que la más atractiva interna y los mejores programas de gobierno están en el Partido Colorado que es un partido que por ahora parece no tener chances de volver a ser gobierno. La Coalición además precisa de un resurgimiento del PC. Si no vota al menos un 13% difícilmente se repita el gobierno otro periodo.

-¿Tenés definido tu voto para las internas?

-Si me permite el post operatorio volver en fecha tengo la duda de si votar en mi partido o incidir en la interna de otro. En mi orden de prioridades siempre está el país primero. Luego el partido.

-¿Hay un intento de “blanquear” al Partido Colorado como dicen algunos precandidatos?

-Más bien he visto lo contrario. Lacalle habla por el mundo como un batllista. Y lo digo en una buena. Me encanta. La derecha uruguaya no entiende que es pescando en “el centro” donde definen los balotajes. Lo que sí comparto con la derecha es que mientras se gobierna no se puede ni debe ser “tibio”.

-En el Frente Amplio, ¿preferís a Orsi o a Cosse?

-Me da exactamente igual. Tal vez prefiera un poco más a Cosse. Porque al menos sé lo que puede dar y cómo combatirla. Orsi no puede ni siquiera autodefinirse como peñarolense sin decir que además empatiza con Nacional. Un indefinido es a veces más peligroso que un comunista confeso.

-De cara a octubre, ¿cuáles serán las claves para que la coalición renueve el crédito o gane el Frente Amplio?

-Que le muestre a la gente todo lo bueno hecho por y para ellos. Y que alguien creíble le pronostique a la gente lo que va a suceder en un eventual gobierno frentista. Con un FA manejado por comunistas y tupas y cooptado por Pit - Cnt aliado su presidente a la República de Irán y al foro de Sao Paulo.

-La denuncia ahora comprobada como “falsa” en contra de Yamandú Orsi enrareció el clima de campaña. ¿Cuál es tu análisis del caso?

-Una denuncia berreta de alguien despechada. Fue hace dos meses y el sistema político no le creyó. Pena la familia del candidato agraviado. Este a su vez manejó muy mal sus reacciones e hizo contraacusaciones destempladas y fuera de lugar. Ahora todo lo que acusó esa persona queda bajo la lupa de la sospecha. Incluso otros casos muy sonados.

-En un aplaudido comentario tuyo reciente de tu ida al concierto de Roberto Carlos, hablás de los valores de los “veteranos”. ¿Por qué te parece importante rescatarlos?

-Porque Roberto Carlos nos juntó a 10 mil uruguayos veteranos que estamos todos muy “agrietados” por otras pasiones y nos regaló una noche de mancomunión. Con sus 83 años a cuesta nos devolvió al mundo en el que no está penalizado (por el universo woke) dedicarle la prosa romántica a una mujer. Fue un show fantástico de una leyenda viviente de la música popular.

-Cada tanto compartís video de karaoke, ¿volverás pronto a una regularidad en el canto?

-Mi vida ha sido un constante ejercicio para reinventarme. Tratar de aprender cosas nuevas. Hoy en mi agenda tengo como prioridad profesionalizar mi nuevo oficio de Comunicador. La música tendrá sus momentos pero más espaciados. Disfruto mucho escribiendo editoriales o participando en radio con columnas de opinión.

-Peñarol, otra de tus pasiones, también tiene su polémica interna por la situación de Ignacio Ruglio. ¿Cuál es tu posición?

-Me parece de cuarta tener a un Presidente que “clava” con una deuda propia a una gerente del BROU. Un populista es algo dañino no solo en la política. En su defensa se puede decir que hubo obras en el club. Obviamente no pudieron tapar algunas vergüenzas deportivas vividas el año pasado. Algún día volveré al fútbol a dar una mano. Hoy hay prioridades que atender. Se nos puede ir el país al diablo con el plebiscito del Pit - Cnt con complicidad por negligencia de parte del FA. Mi tarea que casi siempre es autoremunerada es hacer contracultura, ayudar a pensar y ser activo luchador en la defensa de una civilización occidental hoy acechada por nuevos dogmas y nuevos poderes en los que ves azorado a muchachas lgbt o feministas defendiendo causas de países donde decapitarian a una mujer por quitarse un velo. Ver a jóvenes que se embanderan con Hamas o hacen guiños a Rusia y se suben a un estrado para hacer gárgaras con los DDHH. Contra eso lucho a diario desde mi humilde espacio. Ya no me importa un partido político. Me enrosco únicamente con la causa: país.