Sus mañanas son en la radio, en la tarde hace streaming junto a Gastón Trezeguet o es panelista en Intrusos, además tiene un portal que nutre de noticias y por las noches se dedica a hablar de Gran Hermano, el reality argentino que se emite en Uruguay por Canal 10 y donde Laura Ubfal es panelista.
Con más de cuatro décadas en el periodismo, Ubfal reconoce la exposición que le generó el reality que conduce Santiago del Moro, ya que Gran Hermano se ha vuelto el “unitema”, y el motivo por el que la reconocen en la calle, le piden fotos y hasta le gritan desde los autos. En esta entrevista con Sábado Show, Ubfal habla de su carrera, cuenta si hay un estilo Ubfal, de los comunicadores que ha formado y del futuro “Furia” de Gran Hermano.
“Como si yo pudiera decidir algo”, comenta Laura Ubfal sobre los miles de comentarios, de algún famoso también, que recibe en su celular y por redes sociales sobre los participantes de Gran Hermano.
Es martes, la tarde previa a la salida de Juliana “Furia” Scaglione de la casa de Gran Hermano, reality show argentino en el que “La Ubfal” es panelista, y por el que recibe mensajes, de apoyo y con críticas. “Significa que el programa es visto por todo el mundo”, comenta la periodista argentina; “es un fenómeno nacional, y en Uruguay anda bastante bien también; y eso lo veo en el día a día, en la calle, todo el tiempo; todo sobre ‘furia’ o sobre los ‘antifuria’ que, en definitiva, es lo mismo”.
Ni ella, la periodista que desde hace cuatro décadas no ha parado quieta y ha formado a conocidas figuras, ni yo, sabíamos que Furia se iba a ir de la casa; ni que “el chino” le seguiría en la eliminación. Y sobre su carrera, su hija actriz, y el reality que conduce Santiago del Moro es esta charla con “La Ubfal”.
—Ya no importa quién está embarazada o porqué fulana se peleó con sultana, el tema es Gran Hermano y “Furia”.
—Nada más, no hay ninguna figura del ambiente que tenga tanta influencia como ella; a no ser que surja algún escándalo, pero es la figura del momento, es impresionante. Gran Hermano es el unitema. Voy a la peluquería, al supermercado, a almorzar, a dónde vaya es selfie, foto y comentario del reality; hasta me gritan desde los coches “vamos furia”, como también todo lo contrario.
—Vos que ya lo viste todo, sobre todo a estas estrellas que tienen una visibilidad explosiva y llegan a los medios masivos, ¿hay cabida para una “Furia” en la televisión?
—No sé qué va a seguir pero creo que sí, lo que pasa que no sé si ella tiene interés en insertarse en los medios. Yo ya dije que la veo más trabajando con Flavio Mendoza (a las horas de la eliminación el bailarín, coreógrafo y director le escribió a Scaglione). De hecho, en este momento hay una actividad que tiene que ver con el circo y es una delicia. Y Furia a los chicos les encanta porque es muy histriónica, muy divertida.
—Pero también muy criticada.
—Creo que es criticada por actitudes que tienen que ver con el juego, con esto de picantear al otro y lograr que se desestabilice y sacarlo, pero no deja de tener humor. Las cosas que le decía al “Chino”, hasta te dan gracia porque ya se pasó de la raya de la pelea y se fue al humor.
—Tal vez sueno muy Ceferino Reato pero, ¿te parece que “Furia” representa un costado más Milei de la sociedad con esa euforia, mientras “los Bros” son más como conciliadores, más de “la unión hace la fuerza”?
—Sí, por supuesto. Lo que pasa es que son tres tipos muy parecidos. Yo creo que también es como la unión de la amistad masculina, que va más allá de cualquier criterio. Y fíjate que las mujeres no pudieron lograr esa amistad en la casa, porque nos han educado a las mujeres para la envidia, para la competencia, y eso es lo que pasó en la casa. En cambio Bautista, “el Chino”, Nico, y si querés “Licha”, entraron al programa como si fuera un club. Todo el tiempo han hecho actividades juntos, se han divertido juntos, hasta se bañan juntos. Es como un club de hombres y no integraron a las mujeres. Si a algunas, cuando estaban en pareja como pasó Bautista con Denisse, o en su momento Nico con Flor. Pero no han integrado a ningún grupo de mujeres, porque de hecho cuando hablaban de integrar a Flor o a Denisse, mantuvieron siempre su amistad masculina; y así lograron llegar, como logra llegar el hombre en la sociedad. Y si te fijás, ¿por qué ganan varones? Primero porque votan mujeres, y pocas veces se ha dado que esas jugadoras logran que otras mujeres las acepten. También hay que entender que Juliana tiene una imagen física que es rechazada por muchísimos hombres, también por mujeres machistas.
—Manzana comentó a Sábado Show hace unas semanas que no se veía en la final porque solo llegan los cuerpos hegemónicos.
—Así ha sido muchas veces, pero fíjate cómo Furia rompe ese esquema. No es que su cuerpo no sea hegemónico porque es una mujer doble de riesgo, gimnasta y todo lo demás pero no es hegemónica en su presencia como mujer, lo que elegiría el afuera como la mujer ideal, entre muchísimas comillas. Y no solo el físico, porque es una mujer fuerte, que va de frente. El otro día hablaba con la mamá de Nicolás y le decía que ella es todo el tiempo ataque, y que Nico es todo el tiempo defensa.
—No hay muchas más opciones que defenderse.
—Esa es la genialidad que los que la han atacado están todos afuera; y con un resentimiento impresionante. El otro día Eliana Guercio decía que los que están afuera cometieron los cuatro pecados capitales: gula, avaricia, envidia y soberbia, es interesante.
—Hacés radio, streaming, trabajás en televisión y tenés un portal, además de ser panelista en Gran Hermano. ¿Hay vida además de los trabajos?
—Sí, ahora estoy tomando mate, tengo vida. Hace muchos años descubrí que lo mejor en este oficio es tener muchos kioscos. Desde que trabajaba en una editorial, por el 89 y nos echaron, dije: nunca más voy a tener una sola fuente de trabajo, y de ahí en más tengo de todo, siempre tuve más de cuatro trabajos. De hecho pasé por 42 conductores entre radio y televisión, de Mirtha Legrand pasando por Marcelo Tinelli o Florencia de la V, he trabajado con todo el mundo, he producido televisión, trabajé para afuera, he tenido mi propio programa que hice por 10 años, se llamó La Linterna; y he estado en radio, tele, prensa, cable, ahora streaming, todo lo que hay.
—¿Te ha faltado hacer algo?
—Hay siempre falta hacer algo. Me gustaría poder escribir una obra de teatro. Hace tiempo, antes de estudiar periodismo iba a estudiar filosofía y letras, siempre me quedó esa deuda. Tengo un libro publicado, Los Teleídolos, pero siempre me hubiera gustado escribir más. Se verá, tal vez con la jubilación. También he dado clases, he formado periodistas, hay muchos colegas de los que estoy orgullosa que han estado a mi lado, han estudiado conmigo, eso me deja contenta.
—Además de ser una referente en el mundo del espectáculo, has sido formadora de Ángel De Brito y Adrián Pallares.
—Sí, he tenido la suerte de haberles podido dar una mano, y obviamente se destacan como grandes profesionales. Estoy contenta porque lo único que les traté de inculcar siempre es que la información es poder, que el único poder que tiene un periodista es la información y que hay que saber buscarla, chequearla, trabajarla y utilizarla para bien. Ya sea de espectáculos o de cualquier tipo, porque tanto Adrián como Ángel son periodistas más allá de estar dedicados al espectáculo, creo que me han salido buenos. La verdad que los admiro y los valoro, como a otros colegas más jóvenes que han estudiado conmigo.
—¿Hay un estilo Ubfal?
—Yo no soy muy buena para el chimento, soy mejor para la información. A mí me cuesta tejer de chimento, o sea, no sirvo para hablar 4 horas a partir de una luz.
—¿Y cómo ves la situación actual de la televisión argentina? Porque hoy parece que todos los programas son un panel y nada más.
—Lamentablemente al haber poca producción y poco dinero, ya saben lo que es la situación política en Argentina, sobre todo económica y financiera, es muy difícil producir televisión. Demasiado se hace para el poco dinero que hay. Ustedes en Uruguay tienen la posibilidad de hacer un montón de formatos de reality que acá no se pueden hacer porque cuesta mucha plata y algunos no funcionan como ¿Quién es la máscara? que a ustedes les funciona y a nosotros no. Además, acá cuando aparece un formato que rinde lo estiran justamente porque no se puede arriesgar tanto. ¿A quien no le gustaría producir más formatos y hacer más ficción y hacer más cosas?, lo que pasa es que no hay dinero, ese es el problema de la tele argentina, por eso hay tanto panel. Tengo una hija actriz )Alma Gandini) y es muy difícil este momento para los actores. Hay más laburo para el periodista por todo el tema del streaming que para los actores; fíjate que las plataformas casi siempre trabajan con los mismos. Y el streaming es un medio muy económico y rendidor. Aparte como empezó siendo cool, las agencias de publicidad y los publicistas se han volcado a apoyar a Olga o a Luzzu.
—¿Cuándo se puede decir que se es un buen periodista de espectáculos?
—La clave no está en tener el teléfono de Tinelli o de Susana porque lo puede tener cualquiera; el valor de uno está en poder llamar a Tinelli o a Mirtha Legrand y que te atiendan.