“¡Llegó el glamour!”, exclaman Sergio Gorzy y Luis Alberto Carballo cuando ven a Victoria Rodríguez ingresando por la puerta. Sábado Show citó en el diario El País a los tres comunicadores que están atravesados por un mérito común: ser las caras de los programas diarios más longevos de la televisión por fuera de los noticieros. Victoria con Esta Boca es Mía, Gorzy en Buscadores y Carballo al frente de Algo Contigo son quienes están hace más años al aire con el mismo programa. Y con un condimento extra que se va a hacer notar durante el encuentro: compiten en el mismo horario.
Los comunicadores se saludan y se preguntan cómo están organizados sus programas para estos últimos días del año. Buscadores, por ejemplo, sale grabado. “¿Cómo hacés para no tener temas de actualidad?”, le pregunta Victoria con sorpresa a su colega. Él le explica que se presentan temas atemporales, y ella le comenta que tiene previsto conducir su programa hasta mediados de enero, cuando finalmente se tome unos días de licencia.
Al momento de posar para la foto de la tapa, Victoria se coloca entre Luis y Sergio. Para la imagen siguiente, se ubica en una silla con los otros comunicadores a los costados, pero encontrar la mejor ubicación se vuelve más difícil. “Me están apretando”, se queja ella con humor, y los reta: “chicos, ¿no saben hacer una foto?”. Sergio observa que al lado de Victoria, él y Luis son “los victorios”, a lo que el conductor de Algo Contigo se pregunta “¿Cómo va a ser la marquesina?”.
Apenas comenzada la charla, Gorzy da cuenta de que su programa fue el primero de los tres en estrenarse. “Nosotros somos de una época en la que a la hora que estamos no había programas en vivo”, destaca. Buscadores salió a la luz en febrero de 2003 como rara avis de una tarde televisiva en la que predominaban series norteamericanas y telenovelas, con la excepción del clásico De Igual a Igual de Omar Gutiérrez. “Nosotros fuimos los primeros en animarnos. Copiamos un poco lo que se hacía en Argentina, donde se apostaba más a los programas en vivo".
Tiempo después llegaron los dos tanques a la competencia. Tras varias idas y vueltas y la grabación de unos cuantos pilotos, Victoria Rodríguez debutó con Esta Boca es Mía un 6 de octubre de 2008 bajo un formato que invitaba a un debate de temas cotidianos pero alejados de la coyuntura política que hoy marca el pulso de cada emisión. Una transformación más drástica sufrió Algo Contigo con Carballo a la cabeza. El ciclo se estrenó un 2 de mayo de 2011 como un espacio de variedades, con humor y segmentos solidarios, pero a los pocos meses mutó hacia el primer programa local de chimentos. Con este ciclo en el aire, el público se empezaba a acostumbrar a ver producciones nacionales en cada canal a la tarde.
Los tres programas comparten la franja horaria, pero para Carballo la competencia queda en un segundo plano. Según el conductor, “uno no hace televisión para competir, no es una competencia”: “Nosotros a través de la cantidad de llamadas que llegan al 0900 sabemos cómo nos va. Tener medio punto más o medio punto menos no hace que nos vaya bien o mal. Ahí está la permanencia. Uno compite pero para mantener su público”.
Gorzy evalúa que al salir al aire en Canal 5 y VTV no siente la competencia porque estos canales “no están en la lucha del minuto a minuto”. De todos modos, revela que cada vez que un televidente se enoja con el programa suele mandar un mensaje que dice “me voy a ver a Victoria o a Carballo”. El conductor de Algo Contigo ríe y confiesa que sus televidentes enojados le dicen lo mismo a él.
Victoria aprovecha el encuentro entre los tres para hacer una propuesta disruptiva: sugiere hacer una llamada al aire entre todos, cada uno desde su programa. Gorzy plantea la idea de organizarlo a través de la plataforma Zoom, pero ella lo descarta. Prefiere algo que parezca más espontáneo sin planificación.
¿Y si dan un paso más y cada conductor hiciera por un día el programa del otro? "Yo me veo más enrocando con Gorzy", imagina Victoria, y agrega que "como televidente lo que más me gustaría seria ver a Luis moderando Esta Boca es Mía, seguro le sobra nafta y sería entretenido". Gorzy se presta al juego y considera que él podría conducir cualquier de los otros dos programas. "Esta Boca es Mía se parece más a Buscadores por los debates, y estoy acostumbrado a mediar. Para el otro debería estudiar un poco más", considera. Carballo, en tanto, le pone racionalidad al asunto: "Cualquiera de los tres podía conducir cualquiera de los tres programas, pero nadie lo va a hacer como el conductor original".
El diálogo entre los tres conductores fluye con tanta química que sorprende a la propia Victoria. “No sé si en Argentina se podrían reunir tres conductores que compitan entre sí”, reflexiona. Gorzy analiza que tal vez ocurre como con los políticos, “que en Uruguay se juntan de todos los partidos y en Argentina es imposible”. Ella se pone entonces más sensible: “Yo de verdad les tengo re afecto y les deseo lo mejor, no sé si eso podría pasar allá eso pasa de forma auténtica”. Pero un mensaje que cae al celular de Carballo corta con la dulzura del diálogo: “Su estacionamiento venció”, lee en voz alta dando por terminada la charla.
Viejas facturas.
Al final no todo es color de rosa en el encuentro entre Victoria Rodríguez, Sergio Gorzy y Luis Alberto Carballo. Los (no) competidores no tienen pruritos en sacar a relucir viejas facturas. En este sentido es Victoria la que rompe el hielo con una sinceridad brutal: “Yo acepté la nota con una condición”, advierte. Entre risas, comenta que dio el sí para ser parte del encuentro solo si “se aclara que yo lidero el rating”.
Lo que parece un chiste es en realidad una ajuste de cuentas. En el año 2011, Carballo hablaba en su programa sobre rating y puso al aire la gráfica del minuto a minuto que revelaba que en ese momento le estaba ganando por amplio margen al programa de Victoria. Ella se molestó y contestó tiempo después en una entrevista que hacer eso “era de poco hombre”. “Ahora te devuelvo la gentileza”, le dice ella con picardía.
Carballo recoge el guante y explica lo que sucedió hace más de una década. El conductor solo quería mostrar que le ganaba a Canal 12 porque él había emitido un fragmento de Este es el Show en el que aparecía y que el 12 había recortado. Carballo le había dado un móvil al programa que conducía José María Listorti y que salía por Canal 12 en el que hablaba sobre la separación de Diego Forlán y Zaira Nara, pero el canal recortó ese segmento y nunca lo puso al aire. Como venganza, Carballo emitió esa entrevista durante su propio programa, alcanzando altos picos de rating. “Hice 9 puntos a las 3 de la tarde”, recuerda orgulloso. “Si mostré el rating fue por culpa del 12”, se excusa.
Los trapitos entre Victoria y Carballo no son los únicos en salir al sol. Gorzy tiene bien presente un distanciamiento que existió durante un tiempo con el conductor de Algo Contigo. Este sucedió por la transmisión especial que tuvo lugar en 2010 para recibir a la selección uruguaya que había quedado en cuarto lugar en el mundial de Sudáfrica.
Gorzy se encontraba en pleno auge de su programa Cámara Celeste y se había convertido en una suerte de ícono de la hinchada de la selección. Iba a ser el maestro de ceremonias del evento, junto a un comunicador de cada canal: Humberto De Vargas (Canal 10), Maxi De la Cruz (Teledoce) y por el 4 estaba Carballo. El nudo del probklema estuvo en que la producción le asignó a Gorzy un rol central y el de recibir en el escenario al entonces presidente José Mujica, pero los otros comunicadores quedaron relegados. “Quedó como que yo quise acaparar, pero solo hacía lo que me dijeron, y a los demás no le aclararon cómo iba a ser”, recuerda.
La historia siguió con Carballo ironizando en su programa (en aquel entonces “Pizza a Carballo”) sobre el protagonismo que había tenido Gorzy en esa actividad. Hoy Carballo aclara que “nunca estuvo enojado” por ese episodio y a la distancia entiende que el evento exigía que hubiera un conductor central “porque de lo contrario hubiera sido caótico”: “Si hice algún comentario fue porque le servía al programa, pero a mí aquello nunca me pareció mal”. Otro viejo conflicto que quedó laudado.