ENTREVISTA

-Te formaste en economía, ¿cuál fue la primera experiencia en la comunicación?

-Mi primera experiencia fue un poco exótica. Yo escribía para un blog personal porque me gusta escribir y mi estilo siempre ha sido conciso. Lo leyó un productor de prensa, que se comunicó conmigo y me dijo que le gustaba lo que hacía. Un día se le cayó un invitado en una radio de Rosario y me invitó. Estuvimos hablando de economía y desde entonces me empezaron a llamar de otras radios. Todo eso derivó, luego de mucho tiempo y mucha comunicación, en un especie de producto que a la gente le gusta. Le gusta mi forma de expresarme y mi no condicionamiento hacia nada ni nadie.

-¿Qué te seduce de la comunicación?

-La comunicación es maravillosa. Si me preguntás qué soy, antes que economista, consultor o docente, yo digo: “Soy comunicador”. Estoy muy contento por eso. Es fascinante que alguien te escuche y pueda sacar algo bueno de vos. En la comunicación uno es mejor porque el otro lo hace mejor; el que te critica y el que te alaba. Saber que se te escucha me eleva y me da un valor agregado. Esa es la magia de la comunicación.

-Actualmente formás parte de Radio Rivadavia, LN+ e Infobae, ¿cuáles son los principales desafíos a la hora de comunicar sobre asuntos económicos?

-Los desafíos en la comunicación, más allá de que sea economía u otra temática, tienen que ver con que el mensaje sea claro. Que el mensaje llegue es más responsabilidad de los medios, aunque hoy, con las redes, se ha democratizado mucho el mensaje, sin necesidad de que haya un gran medio de comunicación detrás. Lo importante es explicar realidades complejas de manera simple. Hoy, uno habla de déficit fiscal y cualquiera te sabe explicar de qué se trata. Eso se debe a que quienes hablamos de déficit fiscal lo hicimos de forma clara. No hablo solo por mí, sino por otros comunicadores de la temática que hay muy buenos.

-En los últimos años, Argentina enfrenta un escenario de dificultades económicas. ¿Cuáles son las causas de la crisis que debería atacar el gobierno para buscar salidas?

-Las causas del problema de Argentina son múltiples. El populismo destruyó el país, lo devastó. No solo por este gobierno sino por décadas de una idea que nos vendieron acerca de que las cosas que el mundo normal consigue con esfuerzo y trabajo, nosotros lo podemos lograr con la firma de un decreto o la impresión de billetes. Hay que hacer muchas cosas en Argentina porque desde hace 10 u 11 años que no se genera empleo en el país, con una presión fiscal enorme, una inflación descontrolada, con desocupación o empleo precario, con cero inversión. Pasa de todo y hay que hacer reformas estructurales pero tenemos un gobierno sin credibilidad y sin ganas de hacer esas reformas.

-El Mercosur suele ser criticado y parece estancado. ¿Fracasó como bloque?

-El Mercosur fracasó. Un bloque, en prácticamente 30 años, por lo menos tendría que tener dos cosas: libre movimiento de personas y libre movimiento de mercaderías. Acá no tenemos ninguna de las dos. Hay muchas diferencias entre los países en cuanto a la competitividad y no hay posibilidad de negociar en bloque, que es para lo que debería servir.

-El gobierno uruguayo emprendió una campaña para atraer residentes e inversores argentinos. ¿Cómo se está percibiendo eso desde allá? -Históricamente el hombre de mundo, no solo el argentino, escapa cuando siente atacado su patrimonio. Se va a otro lugar donde se siente menos atacado. Uruguay ha sido un refugio importante para quien quiera proteger sus bienes. Yo sé que ahora me pueden saltar con el tema lavado de dinero, pero eso es otro tema, que habrá que comprobar caso a caso. Lo cierto es que la gente está podrida de que el gobierno se robe el patrimonio, con una enorme presión fiscal. De hecho, el pedido de residencias de argentinos en Uruguay desde 2020 ha sido récord. Eso está dado porque en Uruguay hay seguridad jurídica para invertir y en Argentina, no.

-En un tiempo se decía que la dependencia de la economía uruguaya sobre la argentina era alta. Si había crisis en Argentina, se replicaba en Uruguay. ¿Sigue siendo igual a tu juicio?

-Diferentes presidentes uruguayos hicieron suya aquella frase de que cuando Argentina se resfría, Uruguay se engripa. En parte hoy puede ser cierto, en especial vinculado a algunos sectores de la economía, pero Uruguay tiene una gran capacidad de adaptación. Recientemente, Argentina impuso el cepo a la exportación de carne y Uruguay nos pasó en ese rubro. Creo que quedó vieja de la discusión de si Uruguay es dependiente de Argentina.

-¿Cuál es tu visión del gobierno de Luis Lacalle Pou?

-Para hacer evaluaciones a fondo, uno tendría que esperar a que el mandato esté maduro o que termine. El discurso y la idea de Lacalle Pou siempre ha sido el de un país próspero basado en la libertad, en el mercado y en el trabajo, todo lo contrario a lo que lo practica el populismo argentino. Veremos si al final del mandato logra avances en esa línea.

-Hace un tiempo compartiste un video de una protesta feminista en Piriápolis con cierta ironía sobre la oportunidad del reclamo. ¿Cómo recordás aquel episodio?

-Me acuerdo del video de Piriápolis. En realidad era una canción sobre el patriarcado (NDR “El violador eres tú”). Me pareció una expresión lamentable. En el siglo XXI, creo que ese tipo de protestas le hacen mal a la mujer y a la lucha que dan por la equidad. Todo lo que vaya en contra del sentido común y que haga daño a mujeres y hombres me parece condenable. Me burlé porque ameritaba la burla. No pasa por ahí el reclamo. Me parece que fue una cuestión de algunos grupos por hacerse conocidos.

-Darán una conferencia con Javier Milei en Punta del Este en los próximos días, ¿cuál será el foco?

-Con Javi somos amigos y pensamos muy parecido. La idea es hablar del sentido común, de libertad, economía, lo que pasó con la pandemia y compartir un momento lindo con la gente de Uruguay, país que visitamos menos de lo que nos gustaría.