ENTREVISTA

-¿Cómo se gestó Buen vivir, el programa que estrena este sábado en Canal 4?

-Con la productora Lucía Demichelis, con quien trabajo desde hace 16 años en distintos programas de Canal 12, armamos una productora en salud. Después de que se terminó Calidad de vida, comenzamos dando un servicio de micros y cortes para redes a diferentes clientes. Luego, armamos la idea del programa e iniciamos las conversaciones con el canal, que por suerte llegaron a buen puerto. Se demoró un poco el estreno por la situación de pandemia porque estos programas, más allá del contenido, se tienen que sustentar económicamente.

-¿Por qué Buen vivir?

-El nombre no es antojadizo, sino que tiene una filosofía detrás. Se llama "Sumak kawsay", lo que se puede traducir como "buen vivir" o "la vida en plenitud". Es una filosofía de origen indígena quechua que pregona al ser humano como centro. El hombre tiene que estar en equilibro y armonía consigo mismo y con su entorno. Se trata de darle un sentido a la vida. Nos pasamos corriendo atrás de la zanahoria y a veces no frenamos para ver lo qué queremos hacer. En mi caso, esto es lo que quiero hacer. Desde hace 10 años me dedico al periodismo de salud y bienestar y entiendo que damos un servicio a la gente. El propósito del programa no es solamente estar sano y estar al día con la información sobre patologías y tratamientos, sino tener una buena vida, lo que no es sinónimo de no estar enfermo.

-O sea que no solo abordarán la medicina en tanto estrategias para superar la enfermedad.

-Exacto. La medicina de hoy es 4P. Va mucho más adelante: es predictiva, personalizada y el objetivo es estar sano y no llegar a la patología. Para eso hay que tener hábitos saludables. Somos lo que comemos, lo que pensamos y lo que sentimos. El alimento no solo nos proporciona nutrientes; las emociones también lo hacen. Si comemos bien y hacemos todo lo que dice el manual, pero vivimos en un estrés galopante, a la larga nos va a perjudicar. Vamos a hablar de todos esos temas en el programa. Vamos a hablar de ciencia, de avances tecnológicos, pero también de políticas sociales. Para tener una buena vida no alcanza con estar sano, sino con alcanzar ciertas situaciones. No hablo solo del confort, que ayuda. Hablo de poder aprender a ser feliz con lo que uno tiene y salir a buscar lo que nos falta pero desde otra actitud. La salud desde el punto de vista mental y espiritual nos permite acercarnos a esa plenitud.

-En tu caso personal, ¿desde cuándo te interesan estos temas de salud y bienestar?

-Desde chica la medicina me gustó pero no para ser médico. Si bien hice preparatorio de medicina, mi idea era seguir psicología o volcarme a la comunicación como sucedió. Cuando hacíamos Bien despiertos, los temas de salud me tocaron muchas veces. Después estoy muy agradecida a la oportunidad que me dio Calidad de vida para ganar experiencia en este rubro. Fueron los últimos 10 años desarrollando temas que me gustan y donde me siento súper cómoda. Este tipo de periodismo es específico. Tenés que prepararte e informarte muy bien. La salud es algo que nos importa a todos y es una manera de vivir que intento practicar. Yo como sano, hago ejercicio. O sea que lo que digo no es pour la gallery, si no que es algo que trato de cumplir. Digo "trato" porque no somos perfectos. También abordaremos la economía circular o la ecología, algo que tenemos un poco de familia los García.

-¿Por qué?

-Claudia hacía su programa Verde agua y vive en una chacra. Yo también tengo una chacra, donde planto y como orgánico. No vivo allí pero trato de ir todo lo que puedo. Mi hermano es doctor en ciencias acuáticas y está en el tema de la ecología. Mi hermano menor es artista plástico pero tiene una gran conciencia animal. No te pisa ni una hormiga.

-¿La salud o la enfermedad también está marcada por la genética?

-Sí y no. Antes pensábamos que éramos rehenes de lo que marcaba nuestro genoma. Sin embargo, hoy se sabe que solo el 2% es determinante de una patología, lo demás depende del estilo de vida. Si cambias el estilo de vida, podés prender y apagar genes y llegar a una longevidad proactiva que es lo que todos queremos.

-¿La pandemia reactivó el interés por los temas de salud?

-Sí. Creo que mucha gente se asustó e hizo que bajáramos un cambio y nos centráramos en la importancia de estar saludable. No solo en lo que tiene que ver con las medidas de prevención específicas contra el virus, como el lavado de manos y la mascarilla, sino para la salud en general. Hay mayor interés en comer sano. Uno a veces anda corriendo y termina comprándose algo súper procesado que no es lo más saludable. Se multiplican los cursos de cocina saludable. Yo hice, por ejemplo, un taller de panes sin gluten.

-¿Dejaste el gluten?

-Prácticamente sí. Yo no soy celíaca pero hoy se puede saber si uno tiene una sensibilidad o una intolerancia o una patología. En mi caso, tengo una sensibilidad. Las cosas con gluten son muy ricas pero también hay otros ingredientes y trucos que hacen de la elaboración tan sencilla como cocinar con harina. Y al comer esos panes no te sentís pesado como a veces pasa con el gluten. En Buen vivir también queremos dar ese mensaje de escuchar al cuerpo, que siempre nos da señales.

-¿Cómo será el programa a nivel de formato?

-Vamos a tener invitados, testimonios, notas de exteriores. Es un programa de nada más que media hora pero con un ritmo periodístico muy rápido y con muchas imágenes. La nota central será en el canal pero también haremos notas en clínicas y laboratorios, buscando testimonios.

-Juan Carlos Paullier y Calidad de vida volvieron estos días con Buscadores a la pantalla de Canal 5. ¿Qué te genera esa noticia?

-En realidad, yo no tuve ningún problema con él. Calidad de vida en Teledoce se terminó por diferencias entre él y el canal. Yo estoy súper contenta con que haya vuelto. Considero que está buenísimo que haya varias propuestas en lo que hace a la salud porque la gente lo necesita. Además de Calidad de vida, está el programa de Canal 10. Todos vamos a hablar de salud pero con un estilo diferente. No es un tema de competencia que puede existir o no, aunque estamos en franjas horarias diferentes. Juan Carlos tiene mucha experiencia pero tal vez está más enfocado en lo médico, más allá de que en el último tiempo en Calidad de vida abordaba también el enfoque hacia el bienestar.

-¿Cuál es el mayor desafío de manejar estos temas cuando abunda la información en Internet?

-Internet es un océano gigante y hay que saberlo navegar porque de lo contrario terminás con una fake news. Los pacientes cuando van a una consulta ya consultaron internet. Se democratizó la información pero tenés que saber dónde te metés. Los uruguayos en general somos responsables con la información. Pasa ahora con la pandemia. Más allá de las decisiones de gobierno, los principales responsables de que el virus esté en niveles de control se debe a que hemos sido muy respetuosos con las recomendaciones de los expertos. En general, diferenciamos bien lo científico de lo que no lo es.