Volvió a dar en la tecla. Tras el fenómeno de ¿Quién es la máscara? (2022-2024), Maxi De la Cruz se probó en un nuevo formato que le cayó como anillo al dedo. El conductor se puso al frente de Tu Cara me Suena, donde vuelve a combinar los dotes de anfitrión de big show con su talento como comediante para interactuar con distintos famosos que interpretan a estrellas de la música mundial.

A este ciclo que ya se convirtió en su nuevo éxito televisivo, Maxi le suma el suceso teatral que protagoniza en Calle Corrientes. El actor encabeza Mi querido presidente junto a Miguel Ángel Solá y en diálogo con Sábado Show confirma que ya hay fecha para traer el espectáculo a Montevideo. "La gente me lo pedía", señala. El artista habla sobre este momento cúspide de su vida profesional y recuerda la promesa que le hizo Susana Giménez cuando lo fue a visitar al camarín.

-¿Cómo te sentís al frente de Tu Cara me Suena, el nuevo ciclo que estrenaste en Canal 12?

-Muy bien. Es un programa que se vive de una manera cuando se graba, pero después al aire se aprecia mucho más: se ven los distintos planos de las caracterizaciones y la comparación con el videoclip original. Es un formato hermoso y muy entretenido. La idea es que los participantes se saquen el peso de la competencia, se aflojen y se diviertan. Con el correr de los programas se van a ir soltando cada vez más. Vi los primeros programas al aire y me encantaron.

-¿Te gusta mirar los programas cuando salen al aire?

-Sí, me gusta. Miro todo. Incluso mientras lo estamos grabando me imagino cómo va a ser la salida al aire. Muchas veces hablo con la producción y pido “esta parte habría que sacarla porque la hice muy larga”. Al no ser en vivo tenemos la posibilidad de mejorar el ritmo de esa forma. Vino un holandés que va evaluando el formato, vio la primera grabación y me dijo que le había encantado.

Foto: Leo Mainé

-¿El fenómeno que se generó alrededor de La Máscara es una mochila?, ¿dejó la vara muy alta a la hora de presentar una propuesta diferente?

-Sí, totalmente. La gente espera más, pero en este caso es otro programa que no tiene nada que ver. Estuvo bien elegido el formato porque es distinto. Acá los participantes cantan en vivo y los personajes rotan y pueden tener un ida y vuelta conmigo y con el jurado. Todo eso me permite encararlo de otra manera. Como las máscaras no hablaban, yo tenía que estar más encima del show. Ahora, sin perder el show, lo puedo hacer más charlado para que surja el humor. La Máscara marcó porque era algo totalmente distinto a todo lo que se había hecho y nos llevó a un nivel muy alto de producción. Creo que este nuevo programa también lo podemos hacer gracias a que hicimos La Máscara antes.

-¿Vas a hacer el programa de juegos The Balls en el segundo semestre?

-No lo sé todavía. Sé que el programa está y (el productor, Gustavo) Landivar me lo planteó, pero todavía no respondí porque depende de cómo pueda organizar los tiempos. Conozco el formato porque hace poco se estrenó la versión argentina y es buenísimo. Es muy divertido y tiene ese plus de que la gente se cae al agua.

-¿Cómo has visto las participaciones de tu hija Candelaria en los distintos programas de Canal 12?

-Me encanta. Es una manera de empezar a moverse y hacer sus primeras armas.

-¿Le hacés alguna marcación o comentario?

-Nada, que se arregle con los productores. Charlamos y me cuenta lo que va a hacer, pero confío en ella. Es muy inteligente, sabe manejarse y va a aprender sobre la marcha.

-¿Ella sigue todo lo que vos hacés?

-Sí, me acompaña mucho al teatro. También hacemos muchas cosas juntos y fui a ver obras que si no fuera por ella no hubiera ido a ver nunca. Ella va a ver películas que duran tres horas, esa sí que no se la llevo (risas).

-¿Cómo describirías la experiencia de protagonizar la obra Mi Querido Presidente con Miguel Ángel Solá en Buenos Aires?

-Estamos muy felices, siempre quedamos entre los seis espectáculos más vistos de Buenos Aires. Está funcionando mucho el boca a boca. Nosotros estrenamos el 11 de enero, que nos fue bárbaro, pero estamos atentos a lo que pase ahora que es cuando empieza la temporada fuerte y debutan muchos espectáculos.

-¿La vas a traer a Montevideo?

-Sí, está confirmado que la vamos a hacer el 21 de agosto en el teatro El Galpón. Hay mucha gente que me lo viene pidiendo.

-¿Cómo es ser el elegido de Gustavo Yankelevich, el productor del espectáculo?

-Es buenísimo. Para mi cumpleaños me mandó un mensaje enorme y no lo podía creer. Es un productor que cuida al artista y lo respalda en prensa, promoción, despliegue. Es como uno siempre sueña que sea. Tiene mucha visión. Él decía “quiero hacer la obra porque me gusta, si no funciona no importa”. Gracias a Dios funcionó enseguida.

-¿Cómo es tu relación con Miguel Ángel Solá? Tiene fama de ser un hombre serio.

-Pegamos buena onda y eso es fundamental para todo lo que pasa sobre el escenario. Él se queja de que le hicieron fama de tener mala onda y no sabe por qué. Es todo lo contrario: un dulce, un tipo bueno. Con mucho respeto, me he llegado a animar a marcarle alguna cosa: “capaz que funciona mejor que me digas esto y yo responda lo otro”. El tipo me lo toma y después me dice que tenía razón. En los primeros ensayos me decía “estás muy bien pibe” y yo sentía una situación de vergüenza porque si fuera otro le podría decir “vos también estás muy bien”, pero a él no sabía qué decirle. Es muy generoso conmigo y en las notas siempre me da para adelante. Es un gran actor y un buen tipo. La gente lo espera mucho y lo mira embobecido cuando sale a escena.

-¿Quiénes dirías que tienen más ego?, ¿los actores argentinos o los uruguayos?

-El ego en los actores es un tema y en el humor más. Hay comediantes que roban risas en momentos que no van. Pero es un tema del actor en general, creo que pasa de igual forma en Argentina y en Uruguay. Nada de eso me pasa con Miguel.

-¿Seguís siendo la sorpresa del teatro argentino o dirías que el público ya conoce tu talento?

-Muchos me conocen, pero la respuesta de la gente todavía es de sorpresa. El público es sincero y me dice “vinimos a ver a Miguel, pero con vos nos sorprendimos, qué bien que estás”. La gente agradece mucho y me dice “lo que vimos es hermoso”. Es buenísimo que el público se sorprenda para bien.

-Han ido a verte muchos famosos.

-Por suerte sí. Vino Cacho (De la Cruz) y fue muy emotivo. También estuvo Susana (Giménez) cuando la hicimos en Punta del Este. Me elogió mucho y en el camarín me prometió que volvería a verla en Buenos Aires, así que la estamos esperando. También fue muy emocionante la visita de Roberto Jones. Además estuvieron el Puma Goity, que es un crack y me dio una linda devolución, Nico Vázquez, Alejandro Awada, Ana María Picchio, Esther Goris, Víctor Laplace, Tete Coustarot, Fernando Bravo, Guillermina Valdés, Valeria Lynch. El otro día vino Diego Peretti pero nos enteramos después; hasta pagó la entrada.