ENTREVISTA

Tiene 37 años y desde hace 15 años que trabaja en los medios. De chica quería ser actriz y cantante hasta que un test vocacional le salió que podía ser profesora de literatura o periodista. Y, sin dudarlo, se decidió por la segunda opción. Desde entonces no paró de trabajar. Pasó por radio, trabajó en TV Libre, Canal 4 y Canal 5 hasta que hace dos años la convocaron para que sea coordinadora del informativo de VTV. Desde hace dos semanas, también es la conductora de la edición mediodía del informativo. Sobre su carrera y el estar frente a cámaras charló Natalia Gemelli con Sábado Show.

—El informativo del mediodía tiene un tono más descontracturado. ¿Cómo es estar al frente?

—Sí, es lo que estamos tratando de lograr. A Nicolás, mi compañero en el informativo lo conozco de la calle, porque toda mi vida hice móviles, hasta que hace dos años entré a la coordinación del informativo central. Entonces ya nos conocemos, de las esperas en la calle. Y sucede que pasás más tiempo con ellos en la calle que con tu familia, entonces hay una química. Lo mismo con los demás compañeros, y eso se ve. Al menos es lo que tratamos de transmitir: buena energía y frescura. Los informativos laterales, como les dicen, no son como el Informativo Central. En todos los canales tienen una seriedad y son más estructurados, y los de la mañana y mediodía tienen otra soltura. Tampoco nos salimos del esquema de un informativo, no es un magazine. Igual tratamos que sea lo más fresco posible. Soy de la idea que cuando la hora del informativo se pasa rápido es porque la disfrutaste y no se hizo tediosa. A mí, la primera semana fue lo que me pasó.

—Imagino que igual hubo nervios. Además, hubo noticias como para que no te aburras. ¿Cuándo te avisaron que ibas a ser la conductora?

—La salida de Valentina del informativo la sabía una semana antes. Igual ella sigue en el programa En la Mira. Ella dejó un miércoles, ese jueves y viernes condujo solo Nicolás, me hicieron la propuesta y me dijeron: empezás el lunes. Pero recién el domingo de noche caí que al otro día conducía. Estaba como adormecida, pero el domingo de noche me cayó la ficha que al otro día me tenía que presentar, me tenía que maquillar de nuevo, peinarme todos los días, el vestuario.

—Todo eso es extra al trabajo del informativo.

—Sí, las mujeres tenemos más trabajo que los hombres, eso seguramente. Tenés que estar maquillada y peinada. Yo dejé el aire hace dos años y me amigué con mi cabello natural, rulos, y ahora volví al lacio hasta que vea cómo rinden los rulos al aire. Ese es un ejemplo, y más allá de eso que es trabajo extra, mi miedo era terminar el informativo y no hacer el clic para seguir siendo coordinadora del Informativo. Mi horario es de 12 a 20 y por estos días estoy entrando a las 11 para aggiornarme del informativo del mediodía. Termino eso, me cambio, me saco el maquillaje, vuelvo a mi imagen de antes y sigo trabajando para el Informativo Central. Así que la primera semana estuve agotada. Son distintos roles, pero hay que saber hacer el clic. Calculo que con el tiempo me voy a ir aceitando, pero todo es aprendizaje. En este caso estoy al aire al mediodía y después me vuelvo a la cocina.

—Además de estar en televisión, estuviste en El Espectador.

—También, fui productora de Rompekbezas con Daniel Figares. Fui productora también de Sonia Breccia en Canal 5, trabajé para el exterior haciendo documentales , así que soy variada.

—¿Qué es lo que más te gusta hacer?

—Me encanta la profesión, por eso me siento una afortunada de poder dedicarme a lo que me gusta. Esa es la verdad, no todo el mundo puede dedicarse a lo que le gusta, y nunca dejé de trabajar de esto. Claro que algunas cosas me fascinan y otras las tomo como trabajo y se hacen, pero soy una agradecida de dedicarme a esta profesión.

—Estar en la cocina del informativo tiene que ser interesante.

—Sí, es interesante, aprendés muchísimo. Cuando se hacían los informativos al mediodía en Telenoche, coordinaba también los fines de semana, entonces ya tenía conocimiento de lo que era coordinar. Pero no era un trabajo de todos los días en un informativo central como estoy haciendo ahora. Y encima, cuando me cambié a VTV me agarraron las elecciones, balotaje, cambio de gobierno y después la pandemia. Ahora está todo más relajado y nos estamos acostumbrando, pero estuvo bravo. Pensé que si zafaba de las elecciones sin un surmenage, estaba fantástica. Y cuando todo se había solucionado, habíamos tenido la asunción, llegó la pandemia. Y empezaron los informativos de dos horas y media. Yo sabía que entraba a las 12, pero no sabía a qué hora me iba. Es un lindo desafíos, pero llega un momento que te agotás. Por eso tengo que agradecer al equipo que hay en el canal, porque los compañeros que tenemos son unos fenómenos, y la remamos todos. Mucho apoyo desde la dirección, la jefatura de prensa y todo el equipo, conductores, productores, periodistas de calle. Uno que pasó por eso sabe lo que es, pasar por frío, calor, no ir al baño y son largas horas del día. Jornadas enteras en Torre Ejecutiva.

—Uno tiene la idea idílica que en el informativo se dicen todas las noticias. ¿Hay presiones?

—La verdad, no. He sufrido presiones, sí, pero en otros medios. Uno sabiendo dónde trabaja, sabe con quién se puede meter y con quién no. Si bien la presión no es explícita, decís por acá, no. En VTV eso no pasa. Aparte, nosotros no hacemos notas policiales, sí hacemos judiciales y es Gabriel Pereyra el que toma la rienda de eso. Por eso digo que presiones no he tenido, sí en otros medios que prefiero no nombrar porque hablaría muy mal de mí. Existen las presiones, solapadamente en algunos medios.

—Tenés 37 años. ¿Sentís que llegaste rápido a ese lugar destacado en el canal?

—Por momentos me siento re vieja. La otra vez me dijeron: pasa que te pasó todo muy rápido. Capaz que mi puesto, la coordinación del informativo, lo tendría una persona más mayor. Pero Valeria Milman que es la jefa del informativo tiene mi misma edad y da la casualidad que somos amigas, entonces el canal le da la oportunidad a la gente joven para que aprenda y se forme. Eso está buenísimo.