Con The Last of Us, la serie de HBO que acaba de terminar su temporada uno, Pedro Pascal se convirtió no solo en el actor del momento, sino en un galán que arranca suspiros. Mañana cumple 48 años y, por eso, van cinco curiosidades sobre la vida del chileno.
Vivió un tiempo en Dinamarca
José Pedro Balmaceda Pascal nació el 2 de abril de 1975 en Santiago de Chile. Sus padres eran militantes de Salvador Allende y fueron parte de grupos de resistencia contra la dictadura de Augusto Pinochet. Por este motivo, su familia -que también incluía a su hermano Nicolás y a su hermana Lux, que es actriz- recibió asilo político en Dinamarca. Antes de que Pedro cumpliera un año, los Pascal se establecieron definitivamente en Estados Unidos. Primero vivieron en San Antonio (Texas), donde su padre consiguió trabajo como psicólogo, y luego se mudaron al condado de Orange (California), donde se quedó hasta su adolescencia.
Cambió la natación por la actuación
Durante su infancia, Pedro se dedicó a la natación e incluso participó de varios campeonatos estatales en Texas. Sin embargo, abandonó el deporte cuando descubrió su interés por la actuación. Su madre le consiguió un lugar en una escuela de artes escénicas y enseguida confirmó que ese era su lugar. En su último año, un amigo de su madre le regaló su entrada para ver la obra Angles In America y lo sintió como una especie de epifanía. “Me cambió”, revelaría años después.
Luego estudió actuación en la Escuela de Artes Tisch de la Universidad de Nueva York, y consiguió sus primeros papeles en series como Buffy, la cazavampiros.
El suicido de su madre cuando el actor tenía 24 años lo dejó shock, y decidió poner su carrera en pausa por un tiempo. Para homenajear a su madre fallecida, tiempo después decidió cambió su apellido profesional de Balmaceda a Pascal. “También lo hice porque a los estadounidenses les costaba mucho pronunciar ‘Balmaceda’”, comentó con su humor. “Era realmente agotador”.
Fue bailarín gogó en Madrid
En 2017, durante su paso por el programa español El Hormiguero, el chileno brindó una inesperada revelación. “Yo tenía trabajo en la noche, era gogó en Madrid”, le dijo al presentador Pablo Motos. “Qué pena que no tenga una foto mía con el pelo plateado, una remera de fútbol, zapatos de plataforma... ¡Pero hacía todo con ropa!”. Y agregó: “Era el verano del 96, y casi me quedo para siempre porque me enamoré de Madrid. De la noche, del día, de todo. Me pagaban en pesos, por eso no me quedé”.
Pero ese fue apenas uno de sus tantos trabajos por fuera de la actuación. Fue mesero hasta los 30 años, y así lo recordó: “cuando me gradué (como actor), no me contrataban para nada. Fui camarero, pero me despedían todo el tiempo. No exagero cuando digo que me echaron como de 17 lugares en un año y medio. Restaurantes, cafés y más... Las razones eran muy variadas, pero principalmente por ser incompetente”.
Protagonizó un videoclip de Sia
En 2015, justo en la época en que interpretaba a Javier Peña en la serie Narcos de Netflix, Pedro Pascal protagonizó su primer videoclip. Se trata de “Fire Meet Gasoline”, que la cantante Sia grabó en su disco 1000 Forms of Fear y llegó al Top 5 de la lista de Billboard. Junto a la modelo Heidi Klum interpreta a una pareja que comienza un nuevo camino, por lo que Klum empaca todas sus pertenencias antes de prender fuego su casa, una imagen que se relaciona con el título de la canción (“El fuego se encuentra con la gasolina”), mientras que Pascal la espera en una camioneta roja para llevarla a su nueva vida. El video tiene 130 millones de reproducciones en YouTube.
Si se siente triste, lee a sus fans
Se lo preguntaron hace un año, cuando se sometió a un detector de mentiras para una entrevista de Variety. “¿Miras cuentas dedicadas a ti como rompecorazones cuando estás bajoneado?”, le preguntó la reportera, y él no pudo negarlo. “¡Sí!”, exclamó con cierta vergüenza, antes de lanzar una sonora carcajada. Luego reconoció que su cuenta favorita se llama “Cuenta fan de Pedro Pascal” (@pedropascalfanaccount en Instagram, con casi 100 mil seguidores), y también admitió que cada tanto busca su nombre en las redes sociales para saber qué dicen de él. En períodos como estos, lo que encuentra son, casi siempre, muestras de cariño y entusiasmo.