Redacción El País.
El periodista deportivo Roberto Moar asume nuevas responsabilidades en Sport 890. Luego de la salida de Federico Buysan en las mañanas de la emisora, el también relator asume la conducción mañanera junto a Diego Jokas, la incorporación de Eduardo Rivas y la continuidad de Nelson “Bambino” Etchegoyen y Rodrigo Vázquez.
El programa se seguirá llamando 100% deporte y busca profundizar en la senda de la información y el análisis. Además, Moar celebra 20 años en Canal 10 y en concreto en Subrayado, donde destaca como el rostro de los deportes. “En los dos lugares donde desarrollo mi actividad me siento como en mi casa”, asegura.
—Comenzaron con el nuevo equipo de 100% deporte. ¿Qué impronta buscan para el programa?
—Cuando hay dos relatores en el estudio, lo que se busca es mucho dinamismo, agilidad e intercambio. A esa hora es muy importante la información y el análisis. Tratamos de resetear un ciclo que fue exitoso y un emblema de la radio. Se mantiene el nombre porque esa ha sido la tradición en la emisora: mantener los nombres de los programas por encima de los conductores.
—¿Cómo se vivió en la interna la salida de Federico Buysan?
—Federico es un enorme comentarista y un gran conductor. Así que su salida implicó una sacudida importante, no solo para nosotros, sino para todo el ámbito profesional. Habrá tras radios deportivas a partir del año que viene, algo impensado un tiempo atrás. En cuanto a nosotros, nos obliga a actuar rápidamente y tomar decisiones para disimular una ausencia que la gente va a sentir, al menos al principio. Federico era quien comandaba la mañana y ahora tendremos que estar a la altura y adaptar los oídos de la gente para que nos vaya incorporando. Porque lo importante es el equipo. Es como en la selección: se fue Suárez, se fue Cavani y la selección se mantiene. Nosotros también buscamos que nuestra grifa se mantenga por encima de los nombres.
—Sport 890 se relanzó en 1997 como emisora 100% deportiva. En la interna se siente que este nueva escenario, la obliga a redoblar esfuerzos para mantener liderazgo?
—Es un modelo exitoso, no hay dudas. Por algo ha inspirado a otras, lo que me parce bien. Es saludable la competencia y cada uno buscará su impronta. El público está: el uruguayo es muy futbolero y siempre está pendiente de lo que suceda con el fútbol. Además, las radios tienen hoy disponibles otras plataformas como las redes y el streaming.
—Llevas 9 años como relator en Sport…
—Sí, la verdad que pasó volando el tiempo. Me parece que hasta hace poco era el último en en entrar y ahora me siento como de los de mayor recorrido en la radio. Cuando trabaja a gusto, pasa rápido el tiempo. Como dije en algún momento referido a Canal 10, donde llevo más de 20 años, entré soltero, me casé, tuve dos hijos, murió mi padre, me divorcié… y así, la vida transcurre mientras uno va cumpliendo etapas en lo laboral y lo personal.
—En su momento, cuando Luis Suárez dio testimonio de algunas situaciones internas de la selección nacional, fuiste duro con Marcelo Bielsa. ¿Mantenés esa postura?
—Sí, aunque yo no soy de la idea de remover a los entrenadores antes de que cumplan su ciclo. Me parece que el problema es de comunicación y un problema así se arregla hablando. A veces con los técnicos tan consagrados se pierde la línea de autoridad. O sea, el dirigente siente tanto respeto por quien está al frente de un equipo que no termina imponiendo su mando. En este caso, imponerle al DT que es necesario que se lleve bien con los jugadores. Tengo la sensación que Suárez habló en nombre del plantel y lo hizo porque ya estaba fuera del plantel, así que el problema es claro y general. Esperemos que las partes dialoguen y se solucione.
—¿Crees que los rendimientos bajos de Uruguay recientemente se deben a estos problemas de convivencia?
—Me cuesta relacionarlo pero evidentemente hay un bajón. Uno no puede ser tan lírico de decir que los jugadores, una vez que entran en la cancha, se olvidan de todo. También hay casos en la historia de jugadores que en cancha funcionaban a la maravilla pero afuera, estaban peleados. Hoy, sin embargo, me parece que se da otro tipo de vínculos, con las redes sociales también participando, que hace muy difícil que los factores externos no repercutan. Evidentemente hubo un impacto y un sacudón a partir de lo que dijo Suárez y otros jugadores importantes.
—¿Te parece que Bielsa no era el técnico ideal para el estilo del jugador uruguayo?
—Creo que es un gran entrenador y todos nos entusiasmamos con los momentos de fútbol que expuso Uruguay en algunos partidos. Este es un problema interno que esperemos que se solucione.
—El trato con la prensa tampoco ha sido el ideal. ¿Cuál es tu visión de ese aspecto?
—Eso ya se sabía. El vínculo de Bielsa con los periodistas ha sido siempre problemático. A mí me tocó estar en varias conferencias, entre ellas aquella en la que se despachó contra la Conmebol después de quedar afuera de la Copa América. Había un montón de colegas y daba la sensación que él no escuchaba lo que le decíamos. Él quería bajar ese discurso y atacar a todos. Está bien. Es parte del personaje.
—Cumpliste 20 años en Subrayado, donde sos la cara de los deportes. ¿Cuál es el secreto de esa permanencia?
—Me siento como en mi casa. Estoy muy a gusto en todos los sectores de la empresa. Disfruto de lo que hago y me siento con la motivación de siempre para hacerlo. Tengo la fortuna que los dos lugares donde más desarrollo mi actividad, el canal y la radio, estoy muy a gusto. Me acuerdo que en 2003 me sumé a Punto penal y el 28 de diciembre de ese año me llegó la propuesta para incorporarme a Subrayado a partir del año siguiente. Pensé que era una broma por el día de los inocentes. Yo estaba en Canal 5 también en aquel momento y lo hablamos con Lucía (Etchegaray, su exesposa) porque ganaba bien. Fue una apuesta aceptar la propuesta de Canal 10.
—Con 100% deporte se recarga tu agenda en la mañana…
—Sí. Cuando me llegó la propuesta lo hablé con mis hijos y mi hijo mayor Francisco me dijo: “papá, agarrá, competí, es un gran desafío”. Fue un gran impulso. También mi hija me dijo algo similar. Sus comentarios fueron decisivos.