ENTREVISTA
El cantante habla de su participación en los programas "Esto es guerra" y "El gran juego de la oca", su ansiedad y su flamante carrera solista
Se lo conoció como el baterista de Rombai, pero Tomi Narbondo es mucho más que eso. Fue integrante de Dame5, también participó de un reality en Perú y este año no solo fue integrante del formato de La Tele, El gran juego de la oca, también inició su carrera como solista.
En esta entrevista, el músico habla de su presente, de cómo logró superar sus problemas de ansiedad y depresión que lo llevaron a hablar ante el Parlamento uruguayo. Sobre su evolución en la música, su trabajo en la televisión uruguaya y peruana, su nueva forma de pararse ante la vida (“aprendí a disfrutar el camino”, dice), y la repercusión que han tenido las dos primeras canciones que lanzó (hay más en camino), habló Tomi Narbondo con la revista Sábado Show.
—En 2020 lanzaste “Agradecido”, ¿sentís que ese fue tu debut como solita?
—Quise intentarlo. Saqué “Agradecido” que eran las ganas de querer contar una historia de superación personal, porque habla de la depresión y cómo salir adelante. Salí como solista pero fue para compartir una experiencia. Siento que en Uruguay es un lugar donde está muy presente el tema, aunque quizás la gente mucho no lo habla. Sentí que esa canción podía ser de ayuda para algo. De hecho me escribieron varias personas para decirme que los ayudó, así que cumplió su propósito. Después quise seguir, pero me llamaron de Perú para estar en un programa de televisión y entonces puse la música en pausa porque me dediqué a ese programa que era de deportes.
—Entre el año pasado y este llegaste a la televisión. Estuviste en El gran juego de la Oca en Canal 12 y en Esto es Guerra que hiciste en Perú.
—Sí, a inicios del 2021 me fui a Perú y estuve en televisión participando de ese reality que es el más visto allá, así que fue una tremenda experiencia. Volví a Montevideo a fin de año y a inicios de 2022 me llamaron de Canal 12 para hacer El gran juego de la oca. Fue otra experiencia muy nutritiva para lo que es hacer televisión. No solo por la visibilidad que da estar en la pantalla, también por aprender el manejo de las cámaras, acostumbrarte un poco a la tensión de las luces, los focos y las cámaras que cuando uno va por primera vez a la televisión por una entrevista suele ponerse nervioso. Eso me ayudó a naturalizarlo.
—¿Cómo notás tu evolución desde aquellos inicios con Rombai, cuando no sabías tocar la batería?
—Ha sido una tremenda evolución. Si bien uno escucha música, no te voy a decir la típica de: “siempre soñé con ser cantante”. La verdad es que la música me encontró. Con Rombai primero empecé a ver lo que se podía hacer con la música, el hacer conciertos, ir de gira, tener contacto con el público, esa ida y vuelta con la gente, y me empezó a gustar. Tuve la oportunidad de repetirlo con Dame5 donde estuve más tiempo, y cuando me voy a Perú que justo fue en pandemia y ya no tocábamos ni hacíamos shows, esa energía que sentía arriba del escenario no la tenía. En pandemia también se me dio por empezar a escribir mis canciones como una forma de liberar o sacar cosas que tenía guardadas. Cuando estaba en Perú, con la visibilidad que logré allá pensé que podía ser un buen momento para dar ese salto de estar en una banda a enfocarme en mi carrera como persona y no tanto como un grupo. Ya saqué la segunda canción, después de “Agradecido”, que se llamó “Quiero tenerte”. El video lo grabé en Punta del Este y lo lancé en diciembre. Acabo de grabar el tercer video que se está terminando de editar y sale en las próximas semanas.
—¿Sentís que tenés más presión ahora que sos solista en comparación a cuando estabas en las bandas?
—Sí. En Rombai lo único que tenía que hacer era aprenderme las canciones y tocar, en Dame5 si bien uno pensaba ideas para un video o lo que fuera, eso siempre quedaba en manos de la productora por lo que el trabajo de logística y todo lo hacían ellos. En este caso, al ser uno mismo el proyecto y no estar con ninguna productora todo recae sobre mí, lo que pueda llegar a conseguir y el equipo que pueda llegar a armar. Tengo que pensar las ideas, llevarlas a cabo, armar el equipo, encontrar locaciones para los videos, grabaciones para las canciones. Eso lleva mucho tiempo y energía pero descubrí que fue gracias a la experiencia en Rombai y Dame5 que lo importante también es disfrutar el proceso. Son esos momentos donde vas a grabar una canción, el proceso entre que se te ocurre la idea y se lleva a cabo, entonces el resultado no es que no importe o pase a segundo plano, pero con el hecho de materializar las cosas que te imaginás, es algo súper lindo. Aprendí a disfrutar el camino y no solo que el resultado sea el que espero.
—La música es como una carrera de esperas, hay que componer la canción, grabarla y después esperar a que se lance. Ya has hablado de lo que te ha afectado la ansiedad anímicamente, también has hablado de depresión. ¿Cómo se maneja la ansiedad para que no te gane?
—Es así, siento que estoy eligiendo un camino que en paralelo me está ayudando a trabajar en mi persona y en manejar estas emociones y sensaciones que le pasan a uno y que pueden ser difícil de manejar. Esto me está ayudando a aprender a manejar eso. De hecho, cuando vuelvo de Perú estaba muy complicado en temas de ansiedad, lloraba por las noches sin poder dormir, y me dije: voy a mi casa y me voy a preocupar por mejorarme. Si no estoy bien yo, es imposible que nada de lo que haga salga bien porque va a estar condicionado por esa ansiedad o eso malo que tenés. Me propuse estar bien yo, me tomé unos meses para trabajar en mí y ahí aprendí a disfrutar el proceso y cada paso, porque uno te lleva al siguiente. Quizás tenés un objetivo final pero no conocés todos los pasos que hay que dar. Creo que con saber que estás dando un paso correcto para ese objetivo final ya suma porque ese paso abre nuevas oportunidades que ni imaginabas. Estoy haciendo las canciones que me gustan, trabajo con gente que me suma y confía en mí, aprendí a confiar en mis ideas, entonces el producto de lo que estoy haciendo también es disfrutar del camino y no solo esperar el resultado.
—¿Cómo ha sido la respuesta de la gente a estas canciones?
—"Agradecido" tuvo un recibimiento muy bueno. Es una canción muy personal y salvo que hayas vivido algo parecido, probablemente no te llegue, pero a muchos sí les llegó. Uruguay es un país que está trabajando mucho el tema de la salud mental, de hecho me invitaron del Parlamento para hablar del tema a raíz de la canción. Tuve una charla en la presentación de un proyecto de ley de prevención del suicidio adolescente, ahí conté mi historia, canté la canción y me felicitaron Ministros, Diputados y Senadores, así que en ese punto cumplió su objetivo: compartir una experiencia y mostrarle a la gente que es algo que nos pasa a mucho. No necesitás estar en un contexto social, económico o cultural, sino que afecta a cualquiera sin ninguna discriminación.
—¿Y “Quiero tenerte”?
—La saqué estando en Perú y tuvo muy buena aceptación allá. Acá no hice ninguna movida de presentación pero la gente que la ha escuchado le ha gustado. En Youtube tiene más de mil comentarios y en Instagram también he recibido muchos comentarios así que eso me da el impulso para mi carrera. Todo lo que he aprendido y he trabajado me ha llevado hasta este punto así que disfruto del proceso y esperando que le pueda llegar a la mayor cantidad de gente porque creo que al que le escuche le va a gustar.
—Estás metido en todo el proceso creativo, desde la composición hasta la estética para el videoclip.
—Sí, de hecho los videos tienen un pienso, no es que fue lo que se consiguió sino que fue: qué quiero hacer y a raíz de ese objetivo primario iba viendo qué cosas podía conseguir y en qué tenía que improvisar, y como vas haciendo lo que crees que es correcto, van apareciendo oportunidades y posibilidades que parecían impensadas. Por ejemplo, para el próximo video que va a salir se me había ocurrido que apareciera un avión y pensé de dónde lo saco. Hablando con gente le conté la idea como en broma y me dicen: conozco a alguien que tiene, capaz que te lo presta. Y así, charlando apareció un avión en el video que están editando y voy a publicar en las próximas semanas.
—Leí que no contabas con un permiso de trabajo para Perú, ¿qué pasó?
—Terminó todo bien. Se dijo que no tenía los papeles o algo así, pero cuento con el Carnet de extranjería, el documento para extranjeros. Puedo volver cuando quiera a Perú. Estuve invitado al ciclo Esto es guerra y cuando me fui la gente pensó que había pasado algo, y empezaron a especular, pero no hubo ningún problema legal.